Probamos esta pantalla baratísima comprada de importación con nuestro teléfono Android y iPhone. La experiencia, aunque con limitaciones, merece la pena
Conforme tu coche va sumando años, pesa más invertir en él más allá de lo imprescindible. Sin embargo, a día de hoy algo que aprecio mucho en los coches relativamente modernos y de lo que me cuesta horrores prescindir es de los sistemas de infoentretenimiento en mi coche.
Sí, me apaño con mi móvil en un soporte, pero cuanto más conduzco y más pruebo Android Auto y Apple CarPlay, más me convencen por su efectividad y comodidad para facilitar las tareas al volante. Tenía claro que no iba a hacer modificaciones en el coche (ni mucho menos llevarlo al taller), así que aposté por una pantalla sin instalación: pasé de modelos más premium y compré una pantalla en AliExpress con Android Auto y Apple CarPlay por unos 30 euros.
Un diseño resultón
Al abrir la caja encontré todo lo necesario para montarla en mi coche e incluso diferentes opciones, pero lo principal era esta pantalla de siete pulgadas con resolución HD. Para montarla solo es necesario elegir entre las opciones con ventosa o adhesivo para colocar en la zona de visión de quien conduce, pero sin molestar ni obstaculizar según las normas de la DGT. Después, incluye un brazo para fijarla y colocarla a nuestro gusto y finalmente el cableado.
En cuanto a calidad y materiales no ha habido sorpresas: el plástico es el rey y los acabados son bastante trotones, pero lo importante lo cumple de sobra. Así, el conjunto se fija bien y ni la ventosa se mueve (salvo que así lo deseemos) ni lo hace la pantalla, algo providencial cuando estamos con el coche en movimiento: nadie quiere que el dispositivo se caiga en plena autopista y que ponga en riesgo nuestra integridad o simplemente, que se mueva y nos incomode mirarla o manipularla.
Asimismo, es posible ponerla y quitarla con facilidad y rapidez, importante para dejarla guardada cuando aparcamos, ya que aunque es un dispositivo barato, puede atraer a amigos de lo ajeno.
El elemento protagonista del kit es su pantalla, que dispone de unas rejillas con los agujeros de fijación en la parte trasera, los puertos en el lateral y ni un solo botón físico, algo que hemos echado de menos alguna que otra vez, porque la realidad es que para bloqueos puntuales o algunas operaciones se agradece la sensación física. Los puertos más importantes son una ranura SD, la toma USB, el puerto de la alimentación, que va enchufado al mechero y poco más. Un punto interesante: la toma del mechero cuenta con un USB-A hembra de 10W para que podamos conectar más dispositivos y así no perdernos la toma.
Funcionamiento: Android Auto bien, Apple CarPlay más que notable
Si acostumbras a leer nuestra web hermana Xataka Android, este artículo puede que te resulte familiar. Sin embargo, consideramos que también es de interés aquí puesto que la pantalla cuenta con Android Auto y Apple CarPlay, por lo que servirá tanto para quienes tengan un móvil Android como para quien use iPhone. Pero hay algo más a tener en cuenta: la experiencia con ambos sistemas de infoentretenimiento es diferente, como irás comprobando.
Tras esta aclaración, toca la puesta en marcha. Una vez hemos montado el kit en apenas un par de minutos y conectado a la corriente el cable correspondiente y el jack al sistema de sonido del coche, es momento de configurarlo con nuestro móvil. Lo primero será establecer conexión con Bluetooth y Wi-Fi y después, en función del sistema operativo que tengamos, el móvil reconoce la pantalla como un dispositivo Android Auto o Apple Carplay respectivamente.
Nos ha sorprendido gratamente poder usar la pantalla tanto sin cable como de forma inalámbrica. Aquí para gustos, los colores, pero a título personal preferimos no tener tanto cableado por la zona de la palanca de cambio (la alimentación, el jack de sonido y ese tercero opcional para el móvil) aunque ganemos algo de latencia al optar por la vía inalámbrica. Así, al entrar al coche y conectar la pantalla, en cuestión de segundos ambos dispositivos se ven y se emparejan.
¿Qué tal se ve una pantalla de 30 euros? Pues bastante bien: tiene un brillo suficiente como para que se vea bien incluso en entornos luminosos como los días soleados (eso sí, ha sido probada en pleno inverno onubense) y también de noche, aunque lo de lo no poder regular el brillo hace que en con baja luz pueda deslumbrar un poco, molestando a los ojos.
Pero las siete pulgadas han pasado factura, especialmente con Android Auto Coolwalk y varias aplicaciones abiertas, pero en general con el sistema de infoentretenimiento de Google: en una pantalla de diagonal tan ajustada hemos agradecido el minimalismo de Apple, tanto en su interfaz como en su aplicación de navegación por defecto, Apple Maps. En resumen, Apple aprovecha mejor la pantalla ofreciendo lo importante y sin saturar.
Mejorable es su sensibilidad a los toques, lo que si eres impaciente puede llevarte a la desesperación. Por eso consideramos que cumple para un uso básico y acciones básicas, pero si tienes varias aplicaciones abiertas, no esperes que los toques los note y ejecute de forma instantánea siempre... lo que puede ser crítico si haces un toque rápido en un semáforo.
Algo que nos ha parecido interesante: mientras que con Android Auto alguna que otra vez se nos ha desconectado, con Apple CarPlay la conexión siempre ha sido estable y sin caídas. Esto es un anticipo de la experiencia: el sistema de infoentretenimiento de Cupertino brilla incluso en una pantalla baratísima, mientras que Android cumple bastante decente.
Lo que más nos preocupaba era la fluidez, pero tanto con Android Auto como con Apple CarPlay hemos podido abrir aplicaciones típicas como Google Maps, Apple Maps, Waze, Spotify... no es un cohete, pero con una agilidad suficiente como para ser útil en tareas como moverse por ciudades, rutas largas o entretenernos de viaje.
El micrófono da talla con el ruido habitual del coche, pero si estás escuchando música le puede costar entendernos, ya sea invocando a Google Assistant o a Siri. En cuanto a las llamadas, las personas receptoras han precibido algo de eco, pero nada dramático.
Habrá qué ver qué tal la experiencia en verano en Huelva, porque en invierno ya hemos notado que el dispositivo se calienta con un uso continuado. Colocarlo cerca de la rejilla de ventilación en verano es nuestro apaño de conveniencia.
Conclusión: vale más de lo que cuesta
Cuando usar el móvil con un soporte mientras conduces te sabe a poco y buscas una interfaz específica para el coche que sea más intuitiva y simplificada, hay alternativas de lo más interesantes con y sin instalación. Si además quieres gastar lo mínimo posible, entonces esta pantalla barata con Android Auto y Apple CarPlay resulta de lo más versátil tanto en sistemas de infoentretenimiento como en montaje nos parece una estupenda opción, teniendo en cuenta sus limitaciones y su precio: costó 28 euros de importación (el precio puede variar).
O lo que es lo mismo: que puedes usar el navegador para no perderte o respetar límites de velocidad, escuchar música en streaming y responder llamadas con un dispositivo que funciona decentemente, visionado correcto y sonido apañado. No es para un uso intensivo, pero sí para salir del paso para viajes puntuales.
Portada | Propia (Antonio Sabán)
En Xataka Móvil | He usado CarPlay por primera vez y estas apps ya se me hacen imprescindibles
Ver todos los comentarios en https://www.xatakamovil.com
VER 3 Comentarios