Huawei P10 Lite, análisis: los escuderos de la línea P siguen en plena forma

La gama media está a un nivel más competitivo que nunca, con los grandes flagships despegándose en precio y dejando la batalla para los modelos situados entre los 200 y los 400 euros. Aquí es donde se encuentran los más vendidos del mercado y donde Huawei, con sus Lite, quiere establecer una posición dominante de cara a controlar todo el mercado.

El Huawei P10 Lite fue el último en llegar a la gama de escuderos de sus gamas altas y ahora pasa por nuestra mesa de análisis. La segunda fila del P10 cuenta con características bastante interesantes pero aquí lo relevante es el rendimiento, las sensaciones y qué nos ha parecido tras ponerlo a prueba. Si os parece, comencemos por las especificaciones del terminal y después entramos en materia.

El Huawei P10 Lite, mejorable pero compensado

El interior de un teléfono móvil es crucial, más importante aún que el aspecto pues es el que definirá su funcionamiento. Con el P10 Lite nos topamos con un modelo de gama media movido por un procesador de la casa, el Kirin 658 que reemplaza al modelo 655, y con una pantalla FullHD de 5,2 pulgadas. Pero veamos en profundidad cada uno de sus componentes antes de saltar al análisis.

Las gamas medias de Huawei visten el mismo traje

Bien podríamos decir que visto un Huawei de gama media, vistos todos, pues lo cierto es que aunque heredan parte de la estética de sus "padres" en cada generación, los teléfonos tienden a parecerse entre ellos. A veces incluso demasiado. Así pues, con este P10 Lite tenemos de nuevo un terminal con marco de metal y trasera de cristal, diseño unibody integral y un color blanco predominante en todo el dispositivo. El minimalismo llevado al extremo.

Observando el P10 Lite de frente nos topamos con un dispositivo no muy distinto a otros de la marca, con una cara casi impoluta, sólo "rota" por el logotipo de la marca en la parte inferior, bajo la pantalla. Sobre ella tenemos la cámara frontal junto con el sensor lumínico y el altavoz para las llamadas. Los marcos no han desaparecido, como es la tendencia actual, pero son de aproximadamente un par de milímetros, lo que supone un aprovechamiento bastante conseguido de todo el frontal. Nada de botones hápticos ni físicos, todo se controlará por software.

Le damos la vuelta al Huawei P10 Lite y observamos la cámara, junto al flash LED, ocupando la esquina superior izquierda de la espalda del teléfono. El lector de huellas, con un pequeño reborde dorado y forma de cuadrado con los bordes redondeados, se sitúa en el centro de la mitad superior. El resto del smartphone es completamente limpio salvo por el logotipo de Huawei, algo repetitivo, en la parte inferior de la carcasa trasera, además de los distintos marcados CE.

Tampoco hay nada novedoso en la colocación de las botoneras, que siguiendo las líneas de Huawei de los últimos modelos están todas a la derecha del dispositivo. Parte superior para los botones de volumen, y un poco por debajo el botón de encendido. El lateral izquierdo del P10 Lite queda completamente liso y sólo se aprecia la bandeja para la microSD y la tarjeta SIM, que tendremos que sacar con el clásico pincho al tratarse de un terminal con diseño compacto.

En cuanto a la parte superior e inferior, el jack de auriculares está arriba ligeramente volcado a un lateral, junto con un micrófono de reducción de ruido para la grabación de vídeo, y el puerto microUSB 2.0 está centrado en el marco inferior. A su lado vemos el altavoz cuyo rendimiento repasaremos en el apartado de sonido, y al otro lado tenemos el micrófono inferior para llamadas.

Llegamos al peso, a las dimensiones, a la sensación en mano. A si el nuevo Huawei P10 Lite es o no cómodo y a qué se siente cuando se sujeta el suficiente tiempo. Con sus 5,2 pulgadas de pantalla, el P10 Lite mide 146,5 milímetros de alto y 72 milímetros de ancho. Ligeramente más pequeño que el P8 Lite 2017 que ya lleva meses en circulación, y también es más fino con sus 7,2 milímetros de grosor. Pese a esto, pesa prácticamente lo mismo que él, 146 gramos frente a los 147 gramos del P8 Lite. Pero no es un teléfono pesado. Tal vez la palabra ideal para este momento es el equilibrio. La sensación es buena y el teléfono es cómodo. Puede que la única que pega que puede achacársele llegado a este momento sea su limpieza. O su falta de ella.

Marco de metal con trasera de cristal. Ideal para dejar marcadas nuestras huellas, así como la pantalla pese a su capa oleófuga. Aún así, resiste mejor que la espalda del dispositivo. Los terminales con este diseño, sin texturas, son propensos a la aparición de huellas y el P10 Lite no es distinto. Aún así, el color blanco de este modelo hace que se disimulen y es un punto a favor para este tinte concreto, en un cuerpo oscuro seguramente se marcarían de forma más prominente.

En líneas generales, el P10 Lite es un teléfono estético a la par que discreto, y puede que esto último sea su principal problema. No destacar en casi nada es una desventaja frente a tanta competencia y el modelo de Huawei podría parecer cualquier otro. Los diseños del fabricante chino empiezan a sufrir de cierto desgaste y convendría una reinvención de sus líneas P, al menos. Con todo, el teléfono es cómodo en mano y tiene un tamaño bastante bueno, pese a que el mercado tiende cada vez más hasta las 5,5 pulgadas. Un buen trabajo.

Un móvil que juega en el campo del LCD

Con la actual guerra entre tecnologías de paneles, es lógico ir corriendo a mirar de qué bando estamos cuando nos hacemos con un Huawei P10 Lite. En esta ocasión, su panel de 5,2 pulgadas FullHD, con una densidad de 424 píxeles por pulgada, se queda en terreno del LCD. Para jugar con el AMOLED tendremos que acudir a otros modelos del fabricante que, por supuesto, existen.

Dado que estamos en el apartado de la pantalla, hablemos del brillo de este P10 Lite de Huawei. Algo más que correcto pero sin niveles demasiado elevados. En interiores servirá perfectamente a nuestros propósitos mientras que en exteriores podremos usarlo, aunque si el sol incide directamente sobre la pantalla nos podemos ir olvidando. Estamos ante una gama media y éste es uno de los aspectos en los que nos lo hace notar. Un poco de brillo extra se habría agradecido en determinadas situaciones, y es que la opción para añadir brillo extra al leer al sol tampoco marca demasiado la diferencia.

En cuanto al tacto de la pantalla, a la sensibilidad de la misma, nada que objetar. Hace mucho que este punto pasó a ser secundario y casi todos los fabricantes manejan altos niveles de satisfacción. Aunque, puestos a ser objetivos, se echa de menos el doble toque para activar la pantalla y también para apagarla. Una función bastante útil a la que es fácil acostumbrarse y de la que se vuelve uno nostálgico con mayor facilidad.

Como en otros terminales del mercado, el Huawei P10 Lite cuenta con una herramienta en los ajustes para decidir la temperatura de color de la pantalla. Podemos optar por configuraciones cálidas o frías, o por volver a la predeterminada que es bastante equilibrada, pero una sencilla rueda táctil nos permitirá decidir el punto exacto de tinte que queremos en el panel.

En lo relativo a ángulos de visión, la pantalla del P10 Lite también se comporta a un alto nivel pues no llegamos a perder la visión total de la pantalla hasta que está casi perpendicular a nuestra vista. Si vamos a usar el móvil sobre la mesa, podremos alejarlo sin problemas y seguirá siendo operativo. ¿Y qué tal se porta en cuanto a huellas? Mejor que la trasera, sin duda, pero aún así es un terminal algo delicado. Podríamos decir que en la media de lo que hemos analizado hasta el momento: ni muy bien ni muy mal.

Kirin que te quiero Kirin

Kirin viento. Kirin ramas. Hemos llegado al cerebro del dispositivo, pongamos a prueba el equipamiento del P10 Lite para ver qué tal responde en todas las situaciones. Pero antes de entrar en detalles, veamos qué nos ofrece. Estamos ante un proceasdor de fabricación propia, un Kirin 658, un paso más allá del Kirin 655 del P8 Lite y del Kirin 650 del P9 Lite. El procesador alcanza los 2,36GHz de velocidad de reloj y tiene una GPU Mali T830 MP2 con dos núcleos de renderizado. En el modelo que hemos analizado contamos con 3GB de RAM y con 32GB de memoria interna, pero hay un modelo superior que alcanza hasta 4GB de RAM.

Pasa el tiempo y la hierba crece, como también evolucionan los chips de Huawei. El Kirin 658 se muestra bastante fiable en casi todos los escenarios y pruebas, y sólo se aprecia que no estamos ante un chip de gama alta cuando requerimos de potencia gráfica en grandes cantidades. Ahí es donde la Mali se muestra más débil y echamos de menos que los modelos montados a partir del Kirin 960 comiencen a llegar a otras categorías. Pese a todo, la fluidez es alta y el procesador se muestra sobrado en casi todas las tareas.

La multitarea responde con velocidad en todo momento y juegos con mayor carga gráfica de lo normal, como Clash Royale, se pueden jugar con un nivel alto de fotogramas por segundo. La memoria RAM ayuda a que las aplicaciones no se congelen en segundo plano, aunque las más tragonas pueden llegar incluso a cerrarse cuando pasan algún tiempo inactivas. Los 3GB no son interminables y el software cada vez requiere de más espacio.

Otro aspecto a tener en cuenta del hardware de este Huawei P10 Lite es su lector de huellas. Montado en la espalda, la posición es bastante cómoda y su respuesta es veloz. Con un leve toque el teléfono se desbloquea y podemos utilizarlo, siendo este proceso de autenticación casi transparente al usuario. Además contamos con el chip NFC por lo que los pagos móviles están a nuestra disposición. Los hemos probado con distintos datáfonos y no ha dado un solo problema. Como decimos, respuesta rápida y ágil.

Siendo conscientes de que estamos ante un terminal de gama media, el Huawei P10 Lite resuelve muy bien el día a día y salvo que busquemos un teléfono que ejecute juegos pesados, algo para lo que necesitaremos elevar la categoría y también la inversión, obtendremos un dispositivo para cumplir con prácticamente todo lo que le pidamos. Las gamas medias no son lo que eran hace unos años y Huawei se muestra fuerte en este terreno. Tal vez sus flagships estén algo por detrás de la competencia, pero en líneas como éstas son un potente competidor.

Volvemos a encontrarnos, EMUI

EMUI 5.1 en el Huawei P10 Lite

A estas alturas del mercado queda claro que las capas no gustan a todos, y que cada usuario tiene su personalización favorita para Android. El que no encuentra la suya, echa mano de launchers que pueden encontrarse fácilmente en Google Play. En este caso estamos ante EMUI, tan querida como odiada por su aparente complejidad por unos, y por su parecido con iOS por otros. En el Huawei 10 Lite es la versión 5.1 y esconde a Android 7.0 Nougat, una de las últimas versiones oficiales hasta el momento.

Comprar un teléfono Huawei significa pasar obligatoriamente por EMUI aunque su evolución hasta este momento es notable. Pese a la dualidad de apps que solemos encontrar por la presencia de opciones propietarias y de las surtidas por Google, EMUI 5.1 llega bastante limpio al Huawei P10 Lite y, esto es importante, sin añadidos que no pertenezcan a ninguna de las empresas citadas. No habrá antivirus ni apps que prometan mejorar el rendimiento de nuestro teléfono cuando lo encendamos, sólo EMUI, las Google Apps y la posibilidad de desinstalarlo casi todo que nos ofrece Nougat.

Como capa, EMUI ofrece algunas mejoras interesantes como la posibilidad de decidir el tamaño de la rejilla de iconos en el escritorio, bien de 4x4 o de 4x5, y también ajustes tan curiosos como la posibilidad de agitar la pantalla para ordenar los iconos o activar un botón flotante para obtener controles extra. Incluso podremos configurar gestos sobre el lector de huellas para que ejecute determinadas aplicaciones. O para que active la cámara o conteste llamadas.

Como decíamos al principio, las capas no son para todos pero EMUI está en un punto de madurez bastante interesante y el hecho de no contar con bloatware juega a su favor. En el P10 Lite su funcionamiento es fluido y aparentemente no recarga el teléfono ni lo ralentiza. Sin embargo, si lo que buscas es un smartphone con Android limpio corriendo por sus venas, este Huawei no es para ti, ni ningún otro Huawei.

Hablemos de esta batería no extraíble

Alcanzamos otro apartado importante, el que nos habla de la autonomía del terminal pese a que este punto es demasiado subjetivo. Vivir en una zona con poca cobertura, usarlo siempre en estancias iluminadas o, simplemente, emplear aplicaciones con más consumo puede provocar que nuestra autonomía varíe notablemente con respecto a la de otros usuarios con el mismo teléfono. No obstante, veamos qué hemos sido capaces de conseguir con los 3.000 mAh del Huawei P10 Lite en nuestras pruebas.

No cabe duda de que en Huawei le han sacado rendimiento a esta capacidad de batería pues debe aguantar todo el día sin mucho problema, aunque no nos encontramos ante un teléfono que podamos tener encendido varias jornadas. Con un uso mixto, con apps de redes sociales, mensajería, navegación por internet y juegos sin mucha carga rápida hemos obtenido entre cinco y seis horas de pantalla antes de que el teléfono se rinda y nos obligue a conectarlo al cargador. Cifras superiores a otros modelos de la misma casa, por ejemplo, como el P8 Lite 2017.

Además, en este P10 Lite contamos con carga rápida y podemos devolver aproximadamente la mitad de la carga total en tan sólo 30 minutos con el cargador suministrado en la caja. La batería entera se carga en aproximadamente 80 minutos aunque esa primera media hora puede servirnos para otra media jornada de uso. Si fuese necesario, el P10 Lite cuenta con modos de gestión de batería apoyados en Doze. Tanto el modo de ahorro Normal como el modo Ultra alargarán la autonomía del dispositivo a costa de limitar la conectividad o limitar el brillo de la pantalla. En caso de emergencia, son modos útiles que pueden hacernos volver a casa con el teléfono aún encendido.

Huawei le ha cogido el punto a la fotografía

Los fabricantes van aplicando la experiencia adquirida entre gamas y aunque este Huawei P10 Lite no cuenta con la doble cámara trasera de sus hermanos mayores, desde luego que ha aprendido de éstos para su procesado. En lugar de dos ojos ahora sólo tenemos uno, uno de 12 megapíxeles con una lente f/2.2 y que cuenta con enfoque PDAF (detección de fase) y flash LED. Además, el tamaño del sensor es de 1/2.8" y captura píxeles de 1,25 micrones. No es la cámara más luminosa del mercado pero se mantiene en la media de lo que se espera de esta categoría.

En cuanto a la respuesta de este sensor, con buena luminosidad obtenemos bastante buen resultado. No es algo sorprendente pues a día de hoy prácticamente todos logran esto en idénticas circunstancias, al menos a ciertos niveles. El detalle de la cámara del Huawei P10 Lite es bueno aunque satura levemente los colores, nada que deba preocupar en exceso, y la nitidez de contornos está a buen nivel. Tal vez con una segunda cámara habríamos tenido más posibilidades ante nosotros pero el P10 Lite se porta bien con un único ojo, y es que cuenta con un buen software de ayuda.

Cuando la situación se vuelve más exigente, con luces y sombras en la escena, la cámara del P10 Lite presume de un buen rango dinámico y captura fotografías realistas. Los defectos en estas fotografías sólo aparecen cuando el contraste de luz es muy marcado, nada en lo que no sufra también su competencia. El HDR con buena luz, por otro lado, no destaca demasiado. Podemos activarlo si queremos pero no producirá un efecto demasiado diferenciador como para saber si hemos llegado a usarlo o no.

Sin embargo, estamos ante una gama media y eso hace que la caída de calidad sea pareja a la de la luz. Si buscamos fotografías nocturnas, éste no es nuestro móvil pese a que se porta por encima de lo esperable. Aunque eso no evita que con poca iluminación aparezca el ruido o que el enfoque se vuelva lento y errático. Si además activamos el HDR de noche, más vale que echemos mano de un trípode u obtendremos una fotografía movida pues la captura se ralentiza. Por lo demás, se trata de una cámara que se porta bien en casi todas las situaciones aunque, como comentábamos, su fuerte son las escenas con luz.

La cámara frontal del Huawei P10 Lite se comporta bien tanto en interiores como en exteriores

Por supuesto, en el Huawei P10 Lite también tenemos una cámara frontal y conviene detenerse en ella en plena fiebre por los selfies y los vídeos para Instagram Direct y compañía. 8 megapíxeles frontales a nuestra disposición con apertura f/2.0, más luminosa que la trasera, y un rendimiento también algo superior, aunque se aprecia mejor en baja luz. Si queremos selfies, el P10 Lite nos mantendrá contentos en casi todas las situaciones gracias a fotografías definidas, luminosas y con un enfoque veloz (enfocado al infinito) que permitirá evitar muchas imágenes movidas o borrosas.

Hablábamos del software de Huawei para esta cámara y es que tenemos el mismo que encontramos en EMUI en terminales superiores, con la limitación de no poder contar con los modos específicos para dos lentes. Pero tenemos el modo de fotografía profesional para controlar cada parámetro, así como uno de vídeo del mismo palo para hacer lo propio con la captura de imágenes en movimiento. También hay un modo de cámara rápida, uno para panorámicas y otro para cámara lenta. Muchas opciones por si no queremos disparar en automático sino afinar en determinados aspectos o situaciones.

Modos de la cámara del Huawei P10 Lite

El modo de fotografía profesional nos dejará decidir la velocidad de obturación, la sensibilidad ISO, el balance de blancos y el tipo de enfoque, además de poder compensar la luminosidad de la escena de forma manual. Nos hará sentir que estamos ante una cámara profesional sin estarlo, algo que probablemente valoren los aficionados a la fotografía que requieren de un extra más allá del clásico modo automático que todas las cámaras ofrecen.

También nos encontramos con un modo en blanco y negro por software en el apartado de filtros, varios, de hecho, pero por desgracia no estamos ante una cámara de doble sensor como otros Huawei, y la cámara se limitará a desaturar la fotografía que capturemos. Aunque es justo reconocer que el ajuste del contraste y la saturación en estas fotografías en blanco y negro es notable. Como decíamos, la cámara del Huawei P10 Lite rinde mejor de lo esperado. No tanto como móviles fotográficos de varios cientos de euros, pero lo suficiente para dejarnos un muy buen sabor de boca. Huawei se está convirtiendo en una potencia fotográfica, y la prueba de ello es el resultado de este móvil que ya ha bajado de los 300 euros.

Estos altavoces están hechos para sonar

No solemos prestar demasiada atención al sonido de los teléfonos móviles, sobre todo a unos altavoces que cada vez se utilizan más debido a determinadas tendencias. Pero el sonido es importante y no sólo el volumen de las llamadas sino también por la música. Viniendo de varios análisis de gamas medias de Huawei podemos decir que el sonido ha evolucionado en este P10 Lite. No de forma notable, pero la mejora está presente.

En esta generación de los modelos Lite contamos con un único altavoz inferior, como en el P8 Lite 2017. Pese a no ser estéreo, el sonido que produce es alto y claro y no se aprecia distorsión aún cuando elevamos el volumen. Acostumbrados a que los teléfonos móviles no tengan caja de resonancia extraña que haya modelos que no produzcan ese característico sonido metálico, y el P10 Lite es uno de ellos. Sin duda una buena opción para oír música sin auriculares, aunque su punto fuerte es con ellos conectados.

Tanto si contamos con auriculares de buena calidad como si usamos unos de "andar por casa", el Huawei P10 Lite genera un sonido nítido y con buen volumen, aunque lo ideal es contar con auriculares que amplifiquen en entornos ruidosos. Gracias a EMUI contaremos con un interruptor por software para activar el sonido SWS con un efecto envolvente bastante bien conseguido y que amplifica levemente lo que estemos escuchando. Como en anteriores ediciones de los Lite, este P10 de Huawei cuenta con un nivel multimedia alto pese a que tiene un fallo que no podemos pasar por alto: ¿dónde está el ecualizador, Huawei?

Huawei P10 Lite, la opinión de Xataka Móvil

Huawei sigue consolidándose entre los grandes fabricantes del mercado y su tercer puesto en ventas a nivel mundial está más que justificado cuando sometemos a sus teléfonos móviles a estos análisis. No sólo han logrado una gama alta competitiva sino que también las líneas más económicas que éstas responden a lo esperado. Tal vez el Huawei P10 Lite no sea el mejor teléfono de gama media del mercado pero sí está por encima de ésta.

Se trata de un teléfono ideado para vender sin parar, pese a contar con competencia más que de sobra para obstaculizar su objetivo, y a poco que descienda un poco en precio podría lograrlo. Con sus sombras, que las tiene, el P10 Lite nos ha gustado bastante en líneas generales aunque a estas alturas hay que ser exigentes con determinados puntos. Con los materiales, por ejemplo, o con la presencia de una segunda lente para elevar el nivel fotográfico. Incluso exigiendo una batería mayor.

Con un diseño sobrio aunque algo pasado de vueltas a estas alturas, el P10 Lite debe satisfacer a sus compradores en casi todo. Incluso su procesador, que podría generar dudas al no tratarse de una marca empleada por todos, ha cumplido con lo esperado y no debe hacernos dudar a la hora de comprarlo. Mejorable, como siempre, pero notable en líneas generales. Si el camino de Huawei sigue así, su techo está aún por llegar aunque otros, como Samsung, ya afilan sus cuchillos en la gama media. Sobre todo en materia fotográfica.

El terminal ha sido cedido para la prueba por parte de MaxMóvil. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.