iPhone 13 vs iPhone 13 mini vs iPhone 13 Pro vs iPhone 13 Pro Max, análisis frente a frente: cuál comprar entre los cuatro modelos

Apple repite la fórmula del año pasado y su gama alta para 2021 está compuesta por cuatro modelos: iPhone 13 mini, iPhone 13, iPhone 13 Pro y iPhone 13 Pro Max. Este año hay más diferencias entre los modelos Pro y los 'No Pro', aunque cabe la duda sobre si son suficientes como para apostar por los modelos más caros.

Hemos comparado a fondo los cuatro iPhone 13, así que vamos a contarte en qué se parecen, en qué se diferencian y cuál es la mejor opción. Tras la comparativa, tenemos bastante claro qué iPhone comprar esta generación, y ya podemos adelantarte que en el término medio está la elección correcta.

Comparativa de especificaciones

Los parecidos

Antes de empezar con esta comparativa, vamos a explicarte aquellos puntos en los que no hay diferencias ya que, un año más, la familia iPhone 13 comparte buena parte del hardware. En primer lugar, todos los iPhone 13 tienen el nuevo Apple A15 Bionic, el procesador más potente de la actualidad. La única salvedad aquí es que los modelos Pro tienen 6 GB de RAM frente a los 4 GB de los 13 y 13 mini y una GPU con un núcleo extra que otorga bastante potencia.

Comparten todos tecnología de pantalla OLED, con resolución Full HD+ y compatibilidad con Dolby Vision. También han reducido el notch en los cuatro miembros de la familia iPhone 13, siendo ahora un poco más pequeño, aunque sin llegar a ser un gran cambio respecto a la generación anterior.

Tampoco hay diferencias en ubicación de los altavoces, conectividad o tecnologías como la carga inalámbrica. Del mismo modo, todos tienen sensores de 12 megapíxeles con el sensor principal estabilizado, tecnología que heredan del iPhone 12 Pro Max. No obstante, más adelante veremos que hay diferencias en tamaño de sensor y óptica.

En definitiva, a nivel de hardware son similares y, ya te adelantamos, que la experiencia de usuario es muy parecida entre estos modelos. No obstante, hay varios puntos diferenciales en los que vamos a profundizar.

Diseño: ¿qué tamaño quieres?

Apple es la compañía que más variedad de tamaños ofrece en su familia de gama alta. Empezando por el modelo más pequeño tenemos el iPhone 13 mini, un terminal con un alto de apenas 13 centímetros.

Es así el móvil de gama alta más pequeño del mercado, con un peso de tan solo 135 gramos, casi 100 gramos menos que cualquier gama alta actual. Si buscas un teléfono pequeño que se pueda usar con una mano, ya te adelantamos que esta es la opción ganadora.

Los iPhone 13 y 13 Pro son el punto medio: siguen siendo más pequeños que la gama alta actual, pero no tanto como el mini. Aquí tenemos dos terminales con 14.6 centímetros de alto, muy cómodos en mano y con un tamaño equilibrado. La diferencia entre materiales es notable, ya que los iPhone 13 y 13 mini son de aluminio y cristal brillante, mientras los modelos Pro cuentan con bordes de acero inoxidable y cristal mate, que repele las huellas y resbala menos.

El aumento de peso se nota y mucho en el iPhone 13 Pro respecto al iPhone 13: 204 gramos vs 173 gramos. El iPhone 13 se siente bastante ligero, mientras el iPhone 13 Pro se empieza a acercar peligrosamente al peso del modelo Max.

Sobre este iPhone 13 Pro Max, comentar que es la opción para los que quieren un móvil gigantesco. Es un móvil que no se puede usar con una sola mano, que pesa casi 240 gramos y que, al rato de usarlo, se hace bastante incómodo si no estamos acostumbrados a este tamaño. Tampoco es fácil guardarlo en el bolsillo del pantalón a la mínima que está algo apretado y, aunque más adelante veremos que el Pro Max tiene sus ventajas, a nivel ergonómico no es la mejor opción de la familia.

En conclusión, estamos convencidos de que el acabado es un punto a valorar en los modelos Pro, sobre todo si queremos usar el móvil sin funda. El acabado en acero inoxidable es diferencial en gama alta frente al aluminio tradicional, aunque el principal tributo es el peso.

Pantalla: ProMotion marca la diferencia

En caso de un servidor, llevaba utilizando el iPhone 13 Pro durante un par de semanas y, en cuanto usé unos segundos el iPhone 13, noté que algo "iba mal". Apple ha llegado tarde a los 120Hz, pero ha llegado de forma sobresaliente. La principal diferencia entre los iPhone 13 Pro y Pro Max respecto a su hermanos menores es esta tecnología ProMotion, con 120Hz adaptativos.

La "ventaja" con la que parte el usuario de Apple es que, si viene de un iPhone, no tendrá problema alguno en seguir con un nuevo modelo con 60Hz. En el lado contrario, si hemos probado un móvil con 120Hz y saltamos al iPhone, notaremos que "raspa". Los 120Hz en el iPhone están especialmente bien integrados en las animaciones, por lo que los modelos Pro se notan bastante más fluidos que los modelos estándar.

Además de esta diferencia en tasa de refresco, los nuevos iPhone 13 Pro y 13 Pro Max cuentan con un brillo máximo más alto, de 1000 nits frente a los 800 nits de los modelos estándar. La diferencia a pleno sol no es demasiado perceptible, ya que a partir de estas cifras sería necesario un salto bastante más sustancial en nits para notar un brillo realmente más alto. Los tamaños son los mismos del año pasado: 5,4 (mini), 6,1 (13 y 13 Pro) y 6,7 (Pro Max).

Los cuatro iPhone se ven de forma más que digna bajo plena incidencia de luz solar, por lo que el cambio en nits no debe ser un factor de compra. También es idéntica la respuesta táctil, excelente en los cuatro modelos. A pesar de los 120Hz de los modelos Pro, no hemos notado mayor respuesta táctil en la entrada de la pantalla, la cual ya era sobresaliente desde hace generaciones.

Más allá de la propia calidad del panel, es relevante contar la experiencia de uso con este hardware. Aquí tenemos dos polos opuestos, el iPhone 13 Pro Max es una maravilla para jugar y consumir contenido multimedia, al contar con una diagonal de pantalla cercana a siete pulgadas. Por su lado, el iPhone 13 Mini es el más cómodo, pero su diagonal de pantalla puede resultar insuficiente en pleno 2021.

Autonomía: caballo grande...

Uno de los grandes puntos de la nueva generación iPhone 13 es el salto que se ha dado en batería en todos los modelos. A pesar de esto, el punto diferencial seguirá siendo el modelo que escojamos: cuanto más grande es el iPhone, más batería tiene. El iPhone 13 mini ahora tiene una autonomía similar a la del iPhone 12.

Para usuarios exigentes no será fácil llegar al final del día, ya que sigue gastando bastante batería. No obstante, con uso ligero de redes sociales, algo de cámaras y sin jugar, podemos acabar el día. En horas de pantalla hablamos de unas cinco, un poco menos si le apretamos en exceso, algo más si somos benévolos.

Los iPhone 13 y 13 Pro, a pesar de la diferencia en miliamperios hora, tienen autonomía casi idéntica. El iPhone 13 Pro tiene una batería más pequeña, pero el panel ProMotion ahorra más energía que el panel del 13, lo que logra equiparar los resultados. La batería de ambos teléfonos es sobresaliente, pudiendo sobrepasar el día de uso con unas siete horas de pantalla.

Respecto al Pro Max, es una autonomía espectacular. Hablamos de más de 10 horas de pantalla repartidas en dos días completos de uso, siendo prácticamente imposible agotarlo. Como curiosidad, hemos intentado destrozar su pila con Genshin Impact a 120Hz, máxima resolución, brillo alto y sonido, y aún así iba de camino de las 5 horas de pantalla (cifra sobresaliente en gaming sostenido a 120Hz).

Cámara: distintos sensores, mismas fotos

Con el mismo titular del año pasado arrancamos la comparativa fotográfica de estos teléfonos: distintos sensores, mismas fotos. El año pasado el iPhone 12 Pro Max montaba mejor sensor que sus hermanos menores, pero no hacía mejores fotografías. Este año los iPhone 13 y 13 mini llevan ese sensor del iPhone 12 Pro Max, mientras que los iPhone 13 Pro y 13 Pro Max tienen un sensor aún más grande. ¿Hay diferencias? No, al menos en fotografía con cámara principal.

Como en esta generación los iPhone 13 y 13 mini tienen la misma cámara, y lo mismo sucede con los 13 Pro y 13 Pro Max, los ejemplos que verás a continuación enfrentan al iPhone 13 con el 13 Pro, para que los resultados sean más claros y se eviten fotografías duplicadas.

Tanto en condiciones de buena luz como por la noche, no hay diferencias notables entre los iPhone 13 y 13 Pro. Analizando de forma milimétrica algunos ejemplos, observamos que los modelos Pro tienen ligeramente más detalle en muy determinados escenarios, pero es una diferencia irrisoria.

Al ser sensores y lentes que captan distinta luz, Smart HDR se comporta de forma algo distinta, aunque no muy consistente. En ocasiones tenemos fotografías algo más quemadas en el Pro, otras veces en el 13... Apple necesita afinar su HDR para encontrar equilibrio entre sombras y altas luces.

La buena noticia es que todos hacen unas fotografías de nivel, con un buen a nivel de colorimetría (salvo algunas ocasiones en las que sobresatura) y balance de blancos. Compres el modelo de 800 o el de 1200 euros, vas a tener una cámara de categoría.

La principal diferencia sobre el papel llega con un ultra gran angular con nuevo sensor y lente y el zoom, las lentes secundarias de los iPhone. En el ultra gran angular sí que hay diferencias en detalle, aunque principalmente en fotografía nocturna. Esto último se hace notar tanto en condiciones de baja luz como en situaciones donde requerimos un extra de rango dinámico.

En cuanto al zoom, los modelos Pro montan un teleobjetivo de tres aumentos que convence, siempre y cuando se active (si no hay suficiente luz el iPhone tira el 3X de forma digital). Este es uno de los puntos diferenciales de la cámara de los Pro: un zoom nítido y un modo retrato más logrado gracias a este 3X.

Cuando cae la noche, el sensor más luminoso del iPhone 13 Pro no logra hacer demasiado. Los resultados son idénticos a los del iPhone 13, con fotografías de alto nivel incluso sin modo noche, pero sin superar a su hermano con sensor y lente del año pasado.

El ultra gran angular es bastante más luminoso, f/1.8 vs f/2.4 y con nuevo sensor. De noche sí que notamos algo más de nitidez, aunque no la esperada vistas las diferencias en hardware.

Por último, destacar que el modo macro queda restringido a los iPhone 13 Pro, por lo que la distancia de enfoque es mucho más cercana. Al contar con un sensor grande sin este modo, el iPhone 13 tiene algunos problemas para enfocar de cerca, tal y como vimos la generación pasada. El macro resuelve este problema, aunque se activa de forma automática con más frecuencia de la que nos gustaría, algo que se resolverá en actualizaciones.

¿Qué iPhone me compro?

La compra más equilibrada, un año más, es el modelo intermedio, el iPhone 13. Tienes una pantalla casi idéntica a la del 13 Pro (aunque se pierde Promotion), la fotografía con la cámara principal es prácticamente la misma, la duración de la batería es casi calcada y, como extra, te llevas un móvil bastante más ligero.

Es cierto que el iPhone 13 Pro ofrece unos 120Hz de los que no quieres bajar una vez los pruebas y que el teleobjetivo da bastante juego, pero es difícil justificar los más de 200 euros de diferencia entre ambos modelos, al menos para usuarios que le vayan a dar un uso habitual al teléfono.

No obstante, la compra de estos iPhone dependerá de los distintos perfiles de usuario: si quieres un móvil pequeño, tienes el iPhone 13 mini, si quieres lo mejor en pantalla y versatilidad fotográfica, puedes apostar por el Pro Max.