De todos los dispositivos que uso, probablemente el reloj inteligente sea el más superfluo. Vamos, que si me dijeran que tengo que deshacerme de uno ya, sería mi Apple Watch. No obstante, llevo ya prácticamente una década con dispositivos de Apple en mi muñeca.
Que sea el más prescindible no significa que no me sea útil y que incluso apostara por el formato reloj cuando tras tener una pulsera de actividad, determiné que este wearable se me quedaba corto. ¿Para qué uso mi smartwach? Fundamentalmente para monitorizar datos de salud y actividad, para pagar y para alguna que otra notificación que evita que mire el móvil.
Cuando se me rompió mi anterior Apple Watch, busqué alternativas que me permitieran exactamente lo mismo y descubrí que si quería tener aplicaciones y pagar, lo suyo era comprar uno con Wear OS. Las versiones de Garmin y su experiencia deportiva también me hacían ojitos. Pero la experiencia del ecosistema de Apple fue determinante.
Esta semana he tenido una oportunidad única: probar un reloj con Wear OS después de toda la vida con WatchOS. De hecho, llevo desde el domingo pasado con mi iPhone y mi Apple Watch por un lado y el OnePlus Nord 4 y el OnePlus Watch 2R con otro y esta ha sido mi experiencia.
A un lado, el Apple Watch SE 2º gen, al otro, OnePlus Watch 2R
Hace unos meses os conté que tras muchos Apple Watch a secas, aposté por la versión más barata y fue una compra maestra. Al decir adiós a mi anterior Apple Watch 8 me despedí de cosas como la medición de SpO2, VO2Max, ECG y temperatura corporal, así como otras cosas secundarias como una carga más rápida o un diseño más moderno. ¿Puedo vivir sin esa sensórica? Sí, aunque soy curiosa y me gusta saber mi desempeño, hago deporte por placer. No busco maximizar mi rendimiento.
Además, llevo años jugando a pádel a diario y registrando el entrenamiento como tenis y eso no me lo daba ni uno ni otro y para más pena, tampoco el reloj de OnePlus. Mi reino por un smartwatch que registre pádel. Como dato: también hago spinning casi todos los días.
Otro punto que me parece interesante en esta experiencia es el precio: ambos se mueven en el mismo rango. Una semana después como ambos relojes en la muñeca, esto es lo que he descubierto.
Diseño: no quiero una sartén en la muñeca
Para gustos, los colores, pero hablamos de dispositivos que vas a llevar siempre encima, el diseño y la comodidad no es un tema baladí y aquí mi reloj de Apple gana por goleada. En cuanto al factor de forma, me gusta más el de Apple, pero dejando esto aparte, hay una cuestión esencial: el tamaño.
El diseño y los acabados del OnePlus Watch 2R son sobrios y de calidad, con una caja de aluminio y correa de fluoroelastómero... pero es demasiado grande: casi cinco centímetros de caja en mi muñeca resulta en algo poco cómodo incluso aunque sea ligero. Y no, no hay otra variante.
Sé que esto es algo exclusivo de este modelo concreto y que hay otros relojes en Android como los Samsung que sí que tienen dos tamaños y para mí es providencial. Primero, por cuestión de gustos, segundo porque es altamente probable que a una mitad de la población algo tan grande le resulte incómodo: a las mujeres.
A partir de aquí, puedes cambiarle la correa por otra ya que es universal, algo que agradezco enormemente para cambiar la apariencia. En el caso de Apple también es posible cambiarlas, aunque por correas compatibles.
Sobre funciones y uso
Vaya por delante que en este tiempo la conexión con el móvil y la fluidez ha sido bueno en ambos móviles, ofreciendo una experiencia de manejo satisfactoria y bastante amigable, con una curva de aprendizaje mínima. Desde luego, tener una pantalla más grande ayuda a visualizar mejor toda la información y dicho sea de paso, el panel del OnePlus Watch 2R se ve mejor sencillamente porque es mejor: estamos ante un panel AMOLED de 1,43 pulgadas con 466 x 466 píxeles de resolución y un brillo máximo de 1.000 nits.
Como usuaria de Apple Watch me limito a monitorizar actividad, llamadas, sueño, ver mensajes de aplicaciones de mensajería, pagar a golpe de muñeca, cambiar canciones de servicios de streaming y muy de vez en cuando, usar la linterna. Pues bien, todo esto he podido hacerlo con el OnePlus Watch 2R.
En cuanto a la salud, el reloj de la firma china es más completo, ya que proporciona más métricas en el registro deportivo y sí que mide el oxígeno en sangre, el tiempo de contacto con el suelo (CGT), el balance de CGT y el VO2 durante las carreras o el estrés. Por otro lado, el reloj de Apple tiene detección de accidentes y caídas.
En cuanto a datos, ambos han ofrecido información muy similar en registros de caminar y de sueño, pero por ejemplo en el tenis el de OnePlus ha proporcionado datos como el saque no demasiado exactos con la realidad. Por otro lado, Apple no aporta este dato. Mientras que el OnePlus es más exhaustivo y profundo en información, me gusta la sencillez y la claridad del reloj de Apple.
La batería: sacando los colores a Apple
Si hay un apartado donde el OnePlus Watch 2R gana por goleada, es el de la batería. En una semana de uso lo he cargado dos veces frente a las siete ocasiones (a diario) del Apple Watch SE y eso usándolo de forma normal, sin recurrir al modo de ahorro.
Al margen de los SO o hardware implementado, el truco del reloj de OnePlus está en su sistema de doble procesador: por un lado el Snapdragon W5 para ejecutar Wear OS 4 y por otro un BES2700 que mueve RTOS. El primero para tareas exigente y el segundo para livianas. Tras años y años cargando mi smartwatch a diario, esto ha sido una gozada.
...y no la única: el reloj de OnePlus se carga muchísimo más rápido que el de Apple, necesitando a lo sumo una hora. Eso sí, viene sin el adaptador.
Conclusión: el factor diferencial es el ecosistema
Si no fuera porque me gustan los relojes más pequeños y en ocasiones ese tamaño me ha estorbado, el OnePlus Watch 2R me ha gustado mucho por su fluidez, posibilidades, métricas deportivas y de salud y sobre todo, su batería.
Globalmente da más que el Apple Watch SE, pero hay letra pequeña: es un reloj para Android y en mi vida personal uso el ecosistema de Apple. Lo mismo con el reloj de Apple. Aunque Apple ofrece una experiencia más redonda entre dispositivos con funciones exclusivas, al final la clave está en la compatibilidad con el SO que uses en tu día a día.
Si no fuera por esta cuestión limitante (y si el diseño encajara con mis necesidades y gustos), me parece una opción magnífica en general y notable en calidad precio. Eso sí, con competencia: las ofertas están a la orden del día y en ese rango de precios y con Wear OS están las generaciones anteriores de los relojes de Samsung, como el Galaxy Watch 5. No obstante, de cara al futuro siempre es mejor comprar dispositivos más modernos y si te gustan grandes, es caballo ganador.
Portada | Eva Rodríguez de Luis
En Xataka Móvil | Los mejores relojes inteligentes: cuál comprar y modelos recomendados
Ver 2 comentarios