Samsung Galaxy A52s 5G, análisis: una evolución aparentemente menor que se hace mayor en la mano

Unos meses después del lanzamiento de los Galaxy A52 y Galaxy A52 5G, comenzaron los rumores y filtraciones en torno al posible lanzamiento de una variante mejorada con el apellido "S". Y su llegada no se hizo esperar: a mediados de agosto, Samsung presentó oficialmente el Galaxy A52s 5G, una propuesta más dentro de su catálogo de teléfonos de gama media con 5G.

Este nuevo modelo heredaba las prestaciones y el diseño del A52 5G, pero traía un cambio importante a nivel de hardware: el Snapdragon 778G de Qualcomm. Ahora, el Galaxy A52s 5G ha pasado por nuestras manos durante unos días para comprobar cómo se comporta en cada uno de los apartados. A continuación, te contamos nuestras conclusiones.

Ficha técnica del Samsung Galaxy A52s 5G

Un acabado en plástico que sienta bien

Si hablamos del diseño, más allá de sus líneas redondeadas, lo primero que salta a la vista es que Samsung se ha decantado por el plástico para este móvil. Pero en este caso, no se trata de un defecto, sino más bien de una virtud. La elección de este material permite contener el peso en 189 gramos, evita que se recaliente y hace que resulte muy cómodo en la mano, agradable al tacto y sin que se resbale.

Además, el acabado mate -verde menta en nuestra unidad- le sienta muy bien y mantiene la trasera completamente limpia, sin huellas, algo poco habitual hoy en día. Precisamente en esa parte trasera es donde encontramos una de las señas de identidad de este teléfono, pues el módulo de cámara del Galaxy A52s 5G se funde completamente con la carcasa y sobresale muy poco. Y todo eso, sin olvidarnos de su certificación IP67 de resistencia al agua y al polvo. Bien hecho, Samsung.

Aunque a simple vista parezca metal, los cantos del terminal también son de plástico, pero, eso sí, brillantes. En el lateral izquierdo es totalmente liso, mientras que el derecho está reservado para el botón de encendido y el control de volumen. En la parte inferior, tenemos un altavoz, el puerto USB-C y la toma jack de auriculares; y en el marco superior, está la ranura para tarjetas (es doble: dos SIM o una SIM + una microSD).

La pantalla Super AMOLED de 6,5 pulgadas hace un buen aprovechamiento del frontal, con unos marcos muy ajustados y una pequeña perforación para la cámara frontal que pasa desapercibida en el día a día. Ese panel tiene una resolución FullHD+, un brillo máximo de 800 nits y una tasa de refresco de 120 Hz. ¿Y en qué se traduce todo eso? En una experiencia de visualización muy satisfactoria, incluso bajo la luz del sol o en ángulos forzados.

Y si en el apartado visual rinde muy bien, en el sonoro no se queda corto. El Samsung Galaxy A52 5G tiene un sistema de altavoces estéreo con sonido Dolby Atmos que entrega un sonido muy potente y con matices, sin distorsiones salvo que lo subamos al máximo. Mención especial al puerto de auriculares, algo de lo que carecen cada vez más modelos de gama media y alta; aquí Samsung lo mantiene y eso es algo que agradecerán muchos usuarios.

Lento en cargarse, rápido en todo lo demás

Bajo el capó del Galaxy A52s 5G, encontramos el Snapdragon 778G de Qualcomm, un procesador de ocho núcleos con litografía de 6 nanómetros. Este chipset, en combinación con los 6 GB que incluye nuestra unidad (más los 4 GB de RAM virtual o RAM Plus), ofrece un rendimiento óptimo tanto para jugar como para ejecutar cualquier aplicación. Es un procesador de gama media-alta y, como tal, se desenvuelve correctamente en la multitarea, sin retardos ni cierres repentinos.

Incluso en juegos exigentes, el Galaxy A52s 5G se desenvuelve con soltura, si un aumento excesivo de la temperatura y con transiciones muy fluidas, algo a lo que también contribuye esa tasa de refresco de 120 Hz que antes comentábamos. En definitiva, tampoco podemos ponerle ninguna pega en este apartado. A continuación, os dejamos los resultados de los benchmarks más populares:

Hablemos ahora del software, donde nos encontramos One UI 3.1 basado en Android 11 con todos los defectos y virtudes a los que nos tiene acostumbrados la capa de Samsung. Tenemos su característica interfaz con los servicios y aplicaciones propias de la marca y varios "añadidos" de terceros, como las apps de Microsfot, Netflix, Facebook y Spotify (estas últimas pueden desinstalarse). El resultado es una capa estable, pero pesada, con bastante bloatware y algunas apps duplicadas.

La parte positiva es que trae amplias opciones de personalización y varias herramientas útiles, entre las que destacan Game Booster -para jugar-, la plataforma de seguridad Samsung Knox o la barra lateral para acceder a nuestras apps favoritas. En cualquier caso, One UI no ralentiza el rendimiento del Galaxy A52s 5G y tiene asegurados tres años de actualizaciones del sistema. De los 128 GB de capacidad, viene de inicio con casi 28 GB "ocupados", pero siempre podemos recurrir a una tarjeta microSD.

Ver galería completa » Capturas de One UI (37 fotos)

Pasamos ahora a uno de los apartados donde este modelo muestra cierta debilidad: la autonomía y, especialmente, la velocidad de carga. Samsung ha equipado el Galaxy A52s 5G con una batería de 4.500 mAh que, sobre el papel, promete dos días de duración, pero a la hora de la verdad, con un uso medio, no supera el día y medio. Tener un panel Super AMOLED de 120 Hz penaliza en este sentido y, con una carga completa, no logra alcanzar las 7 horas de pantalla.

Además, la carga rápida de 25 W no es tan rápida como cabría esperar. Con el cargador que trae de serie (de 15 W), tarda aproximadamente una hora y 45 minutos en recargarse por completo. En media hora, apenas obtiene el 30% de energía, y para llegar al 50%, nos vamos a unos 50-55 minutos. Vamos, que no es apto para una urgencia.

Otro punto en el que el Galaxy A52s 5G flaquea es el de la identificación biométrica. Dispone de un lector de huellas integrado en la pantalla y reconocimiento facial, pero tanto uno como otro son demasiado lentos en la autenticación. Además, no siempre consigue identificar nuestro rostro.

Cámaras con muchas luces y una sombra

El equipo fotográfico del Samsung Galaxy A52s 5G está formado por una cámara frontal de 32 megapíxeles f/2.2 y una cámara trasera cuádruple con sensor principal de 64 megapíxeles f/1.8, gran angular de 12 megapíxeles f/2.2, lente macro de 5 megapíxeles y sensor de profundidad de 5 megapíxeles, estos dos últimos con apertura f/2.4. El sensor principal cuenta con AF y estabilizador óptico (OIS), y eso se nota, como veremos más adelante.

La aplicación de cámara que nos propone Samsung es bastante completa e intuitiva, con accesos directos a la mayoría de funciones habituales y un carrusel de modos de disparo que podemos editar a nuestro gusto. De inicio, trae cuatro modos (Diversión, Captura Única, Foto y Vídeo), pero dentro de la pestaña Más, tenemos muchas más opciones (como Retrato, Macro, Noche y Pro). Lo único que echamos de menos es un acceso directo al HDR y al optimizador de escenas, que están ocultos en el menú.

Aunque, como decíamos, el sensor principal es de 64 megapíxeles, las fotos que obtiene por defecto son de 16 megapíxeles (salvo que seleccionemos expresamente el formato 3:4 64 MP). Esas imágenes, en condiciones favorables de iluminación, tienen un buen nivel de detalle y un enfoque correcto (el AF es rápido y efectivo), aunque en ocasiones observamos un exceso de saturación.

El optimizador de escenas suele aplicar los ajustes oportunos y el HDR automático realiza un buen trabajo rescatando detalle de las zonas luminosas y oscuras, especialmente en los contraluces. Nuestro consejo es mantenerlo siempre activado. Si disparamos con el gran angular, es conveniente activar la corrección de las distorsiones dentro del menú, aunque seguiremos perdiendo algo de nitidez en los laterales.

Este modelo carece de teleobjetivo, por lo que sólo dispone de zoom digital. Nuestro consejo es recurrir a él lo menos posible porque a partir de dos aumentos, la pérdida de calidad es notable. Lo que sí que incluye es una lente macro que permite disparar a escasos centímetros. A diferencia de lo que hemos visto en otros modelos, aquí el macro sí que ofrece resultados correctos, pero, en nuestra opinión, sigue siendo un sensor prescindible.

El cuarto y último sensor es el destinado a la lectura de profundidad en el modo Retrato. Aquí el Galaxy A52s 5G hace también un buen trabajo, con un recorte óptimo del primer plano y la posibilidad de ajustar el desenfoque del fondo en siete niveles.

Por la noche, sin llegar al nivel de la familia Galaxy S, la cámara trasera mantiene el tipo y nos entrega unas fotos con un tono amarillento generalizado, pero con menos ruido y más detalle de lo que cabría esperar. Aquí es de gran ayuda el modo Noche, que mejora la definición y la nitidez de las fuentes de luz, pero ten en cuenta que ese modo automáticamente recorta la imagen y reduce la resolución a 12 megapíxeles.

Hablemos ahora de la cámara frontal, que entrega unos selfies de 8 megapíxeles bien enfocados, con un buen nivel de detalle y un rango dinámico correcto. Esta cámara incluye la opción de hacer selfies de grupo, pero no aumenta demasiado el campo de visión, por lo que también es prescindible.

Se agradece que Samsung haya mantenido en esta cámara el HDR y la posibilidad de ajustar el efecto bokeh en siete niveles si elegimos el modo Retrato. En ese modo, por cierto, el recorte del sujeto puede calificarse de óptimo, aunque, al recurrir al software para ello, no es tan natural como en la cámara trasera.

Y llegamos al punto en el que el Galaxy A52s 5G vuelve a hincar la rodilla: los selfies nocturnos. No es que sean un desastre, ni mucho menos, pero la pérdida de calidad es considerable. El ruido y el efecto acuarela son evidentes, y el nivel de detalle cae en picado si lo comparamos con los autorretratos diurnos. Nuestra recomendación aquí es activar el modo Noche, que logra disimular un poco el grano de la imagen y rescatar algo de detalle.

En lo que respecta al vídeo, es capaz de grabar en 4K a 30 fps y hace uso del estabilizador óptico OIS para compensar eficazmente la trepidación de la cámara. Sin ser su punto fuerte, podemos decir que sus grabaciones no defraudan. En definitiva, tenemos un equipo fotográfico completo que rinde correctamente en la mayoría de situaciones y que cuenta con algunos añadidos para ampliar sus posibilidades como los ajustes manuales del modo Pro o los filtros Snapchat del modo Diversión.

Ver galería completa » Fotos tomadas con el Samsung Galaxy A52s 5G (40 fotos)

Samsung Galaxy A52s 5G, la opinión de Xataka Móvil

La gama Galaxy A de Samsung suele caracterizarse por un equilibrio de prestaciones que también está presente en este Galaxy A52s 5G. El acabado uniforme de la trasera y lo cómodo que resulta en la mano son algunas virtudes que se suman a una muy buena pantalla y a un muy buen sonido. El rendimiento del terminal es óptimo y One UI, con su exceso de bloatware, sigue siendo una capa estable que ofrece amplias posibilidades de personalización y herramientas útiles.

Las cámaras también realizan un trabajo satisfactorio en la mayoría de escenas, aunque los selfies nocturnos no sean su fuerte. Y no nos olvidemos de su conectividad 5G, su toma jack y la certificación IP67, que siempre son puntos a favor. Como pegas, una autonomía justa, una carga rápida que no destaca por su velocidad y unos sistemas de identificación biométrica muy lentos.

Su precio de 449 euros se nos antoja un poco excesivo, aunque ya es posible encontrarlo más barato en algunos distribuidores. Es cierto que su evolución respecto al A52 5G es pequeña y que en las marcas chinas podemos encontrar fuertes competidores con mejor relación calidad-precio, pero no por eso deja de ser un terminal recomendable dentro de la gama media premium.