Samsung Galaxy A6+, análisis: la gama media presume de ADN Galaxy en todo menos en potencia

Samsung es un fabricante que sabe cuáles son sus puntos fuertes. Con el Galaxy A8+ ya vimos como su pantalla 'infinita' SuperAMOLED era la principal protagonista y con su hermano pequeño, el Galaxy A6 Plus, ocurre algo parecido. Estamos ante un móvil de gama media premium con doble cámara trasera, cuerpo de aluminio y seis pulgadas que gracias al formato alargado se quedan en un tamaño bastante manejable.

Hemos estado probando el nuevo smartphone del fabricante surcoreano durante las últimas dos semanas y aquí os traemos nuestro análisis del Samsung Galaxy A6+. Vamos a ver cuáles son los argumentos de este móvil para competir en un segmento donde la competencia siempre pisa fuerte.

Samsung Galaxy A6+, especificaciones técnicas

Un diseño metálico sólido con algunos elementos fuera de lugar

En nuestras primeras impresiones ya comentamos los puntos clave de este Galaxy A6+. Tenemos un móvil con cuerpo metálico unibody que transmite robustez y solidez. Samsung se olvida del cristal para ofrecernos un smartphone más clásico pero que casi siempre da buenos resultados. En este caso no es una excepción y en mano es agradable, poco resbaladizo y con un peso bien distribuido que ayuda a ocultar sus 191 gramos.

Tenemos una pantalla de seis pulgadas con formato 18.5:9. Y a la práctica el frontal del dispositivo es bastante parecido al del resto de móviles de gama media de este tamaño. El ratio de pantalla está en 75.3%, un porcentaje que no alcanza a la gama alta pero sí nos da un tamaño suficiente compacto.

El borde inferior es totalmente liso y aunque tenemos los botones integrados en la pantalla, estos se pueden ocultar mediante software. En el borde superior encontramos la cámara, el flash LED y el sensor de proximidad, además del auricular central. No hay rastro del logo de Samsung en la parte delantera y si no fuese por la pantalla 'Always on Display' sería difícil diferenciarlo a simple vista de otros modelos.

En la tabla comparativa vemos que el Galaxy A6+ tiene un peso idéntico al de su hermano más potente, el Galaxy A8+. En tamaño son prácticamente iguales, aunque en este caso ganamos en delgadez. Si lo comparamos con el Xiaomi Redmi Note 5 es cuando nos damos cuenta que el trabajo de compactación de Samsung sí podría ser mejor. Y respecto al Moto G6 Plus, otro móvil contra el que lucha directamente, vemos que es considerablemente más pesado debido a su apuesta por el aluminio (y algo más de batería).

El Galaxy A6+ dispone de bordes y puntas redondeadas. Tampoco hay ningún elemento que sobresalga del cuerpo del dispositivo, ya que incluso la cámara está bien integrada. Con esto se consigue que colocado en la mesa no baile ni resbale, algo que se agradece.

Sin embargo cuando miramos el Galaxy A6+ por la parte trasera tenemos una sensación extraña. Hay algunos elementos que desentonan un poco. Empezamos por ejemplo con las líneas de antena. Tenemos una arriba y otra abajo en forma de 'U'. Después está el logo de 'Duos', casi más llamativo que el propio de Samsung.

El flash LED está situado a la derecha de la cámara trasera. Fuera de una zona negra que engloba la cámara doble situada en vertical y el lector de huellas.

Sobre el lector de huellas, comentar que tiene los mismos problemas que ya hemos visto en otros terminales de Samsung. La precisión es buena, pero el área es muy pequeña y normalmente fallaremos a la hora de colocar el dedo. Además, al estar en la misma zona que la cámara y en una posición muy elevada en numerosas ocasiones acabaremos pulsando sobre la lente.

Si nos fijamos en la parte inferior encontraremos en el centro el puerto microUSB y en el lado derecho el puerto jack de 3.5mm y el micrófono de cancelación de ruido.

Llama mucho la atención no encontrar el altavoz en la parte inferior. Es otro de esos elementos con una colocación un tanto peculiar. En el Galaxy A6+ el altavoz está colocado en el lateral derecho, a la altura de la cámara y donde normalmente tenemos los botones de volumen. Debajo de este, sí tenemos el botón de apagado/encendido.

Si nos vamos al lateral izquierdo es donde encontramos los dos botones de volumen. Y en este mismo lateral tenemos una ranura para añadir la nanoSIM principal y una segunda ranura con la posibilidad de incorporar una segunda SIM más la microSD. No es un sistema híbrido como suele ser habitual, sino un verdadero móvil dual SIM al que también podremos añadirle tarjeta microSD.

El Samsung Galaxy A6+ es un móvil de gama media con un buen diseño, unas sensaciones más que correctas y unos acabados cuidados. La parte trasera atrapa ligeramente las huellas y algunos elementos como el lector de huellas o el altavoz no terminan de convencernos, pese a ello, es uno de esos móviles de aluminio bien equilibrados al que no cuesta acostumbrarse.

Una pantalla SuperAMOLED de la que Samsung puede presumir

En los últimos años Samsung se ha caracterizado por incorporar muy buenos paneles en sus dispositivos. Afortunadamente el Galaxy A6+ no es una excepción. Nos encontramos un panel Super AMOLED de seis pulgadas con resolución FullHD+ y un formato 18,5:9. Esta pantalla de 2220 x 1080 píxeles nos ofrece una buena nitidez y un nivel de brillo más que correcto.

No es habitual encontrar pantallas AMOLED en la gama media ya que tradicionalmente todos optan por paneles IPS. Samsung mantiene la apuesta y nos da una pantalla AMOLED donde eso sí notamos una ligera predominancia de los tonos verdosos. Por el contrario, no tenemos una saturación tan alta como en otras pantallas de la misma tecnología.

Los colores son bastante naturales y creemos que el modo Adaptative Display hace un buen trabajo. Perdemos ligeramente en contraste y los negros no son tan profundos como los de las OLED de gama alta, pero aún así este Galaxy A6+ puede presumir de pantalla enfrente de su competencia. Un panel AMOLED bien calibrado y aunque no tiene un contraste tan alto, sigue siendo una gran opción frente a la mayoría de paneles IPS que no tienen tanta potencia en los colores.

A través del software podremos establecer el brillo automático, aplicar filtros de luz azul, cambiar el tamaño de la fuente y aplicar diversos modos de imagen que van desde el básico, foto AMOLED, cine AMOLED, adaptative display y un modo en el que podremos elegir directamente si queremos potenciar los tonos rojos, azules o verdes. Nuestro favorito es el que viene de base ya que nos ha parecido el más natural. Los ángulos de visión de la pantalla son correctos y la respuesta táctil también es buena.

Pero si hay un beneficio de las pantallas AMOLED es su trabajo con los negros. Además del bajo consumo si colocamos fondos oscuros tenemos la función 'Always On Display'. Aquí Samsung nos mostrará información sobre la hora, fecha, notificaciones o porcentaje de batería. Se pueden ver a simple vista, la nitidez es buena, el consumo es mínimo y lo cierto es que una vez te acostumbras lo echas de menos. Otro detalle del Galaxy A6+ que le ayudará a diferenciarse de muchos terminales.

Un procesador por debajo de lo que se merece el móvil

El Samsung Galaxy A6+ incorpora un procesador Snapdragon 450, un chipset de ocho núcleos a 1,8GHz junto a una GPU Adreno 506. Nos acompañan además 3GB de memoria RAM. Para esta gama media Samsung decide no incorporar un procesador Exynos y nos trae un SoC de Qualcomm que siendo sinceros, está por debajo del rendimiento deseado.

No es un procesador que rinda mal. Al contrario. A nivel de rendimiento y fluidez ofrece una experiencia muy similar al popular Snapdragon 625 pero viendo el nivel de precio y el nivel del resto del dispositivo nos hubiera gustado encontrar algo más de potencia.

Si vamos a utilizar el Galaxy A6+ para navegar, hacer fotos y consultar las redes sociales, este terminal será más que suficiente. Pero en aplicaciones pesadas, no digamos ya juegos como el PUBG, el Galaxy A6+ sufre demasiado y la ralentización es más que notable. Por tanto no estamos ante un terminal para quien busque jugar, aunque sí ofrece una experiencia aceptable en todo lo demás.

Aquí os dejamos con la tabla comparativa de los benchmarks más populares, donde como se aprecia hay un salto considerable entre este modelo y el Galaxy A8+. El Galaxy A6+ se sitúa entre el Moto G6 y el Redmi 5 Plus, dos modelos que son los hermanos pequeños de su gama y con precios de salida significativamente más bajos.

En el almacenamiento tampoco andamos sobrados. Encontramos 32GB de los cuales nos quedarán libres 24,24GB. Sí podremos ampliarlos mediante tarjeta microSD que quedará libre aunque utilicemos dos SIMs. Aún así, no podemos utilizar esta memoria externa como almacenamiento interno.

A nivel de conectividad andamos sobrados. El GPS funciona de manera precisa, la recepción de datos y WiFi es buena y contamos con NFC para poder pagar con el móvil, aunque únicamente desde Google Pay. Un añadido que Samsung considera imprescindible y nos alegramos que se incorpore en el A6+.

Samsung Experience 9.0 y Oreo: un largo trabajo detrás

El Samsung Galaxy A6+ incorpora Android 8.0 Oreo con la capa de personalización Samsung Experience 9.0, Knox 3.1 y el parche de seguridad de abril. Estamos ante una capa de personalización muy trabajada y con multitud de opciones. Pero no estamos simplemente ante un software con algunas apps preinstaladas, sino que se nos ofrecen servicios premium, funciones no tan habituales y una serie de añadidos que pueden representar un motivo suficiente poderoso de compra.

Tenemos cajón de aplicaciones que podremos ordenar a nuestro gusto, una pestaña de multitarea con aplicaciones en grande y un menú de ajustes rápidos donde tenemos los accesos clásicos así como algunos como la carpeta segura. La Samsung Experience 9.0 no es la capa más personalizable que hemos probado, pero sí es probablemente una de las más maduras y completas.

Con el Samsung Galaxy A6+ tenemos activada la función Bixby, que en este caso podremos utilizar en su forma de Bixby Home, un feed accesible desde la izquierda de la pantalla principal así como Bixby Vision, que tendremos desde la cámara.

Pero la cantidad de herramientas no se queda ahí. Tenemos Samsung Themes y aplicaciones básicas como el navegador, calendario, correo o notas. También Samsung Health, SmartThings para conectarse con otros dispositivos del hogar y finalmente la tienda de aplicaciones Samsung Galaxy Apps.

Las herramientas de ofimática son muy importantes en el Galaxy A6+ y por eso como en el resto de sus dispositivos tendremos preinstaladas las aplicaciones de Microsoft Office.

Otra función interesante es la de carpeta segura, donde podremos crear un espacio privado al que solo nosotros tendremos acceso. También se añade la función 'Dual Messenger' para añadir dos cuentas distintas de una misma aplicación de mensajería y la multiventana, que va más allá de la que tenemos de base en Oreo y nos permite controlar a la vez varias aplicaciones, pudiendo elegir el tamaño de la ventana secundaria a nuestro gusto.

También tenemos gestos para controlar el dispositivo o silenciarlo, ajustes para mantener el dispositivo y un Game Launcher para optimizar el rendimiento de los juegos y bloquear las notificaciones y alertas que puedan cortar la partida.

Samsung también incorpora Samsung Pass, un servicio en el que podremos sincronizar nuestras contraseñas y asociarlas a nuestros datos biométricos. Aquí podremos elegir o bien el lector de huellas o bien el reconocimiento facial. Este último funciona bien, aunque tendremos que tener la pantalla encendida para que se active. Es decir, habrá que pulsar el botón de apagado/encendido para ir a la pantalla de bloqueo y entonces una vez miremos directamente el terminal se desbloqueará.

Batería más que correcta, pero sin carga rápida

El Samsung Galaxy A6+ incorpora una batería de 3.500 mAh, lo que para un terminal de seis pulgadas entra dentro de la media. Si esto lo combinamos con un procesador eficiente y un software que no consume especialmente tenemos una autonomía bastante competente.

En nuestras pruebas a lo largo de dos semanas hemos obtenido una media de unas siete-ocho horas de pantalla, con un uso medio que supera con facilidad el día y medio. Casi nunca conseguiremos llegar al final del segundo día, pero el Galaxy A6+ es de esos terminales que podemos utilizar intensivamente que casi siempre logra sobrevivir a la noche.

Al pasarle el test PC Work 2.0 battery life con el modo avión y el brillo al 50% conseguimos algo más de once horas de vida media. Un resultado bastante aceptable y superior a lo que esperábamos.

Samsung incorpora dos modos de ahorro de energía. El estándar reduce el nivel de brillo, limita la velocidad del procesador y bloquea funciones como el Always on Display, mientras que el modo de ahorro máximo añade además un modo sencillo oscuro y bloquea las apps en segundo plano. Con cualquiera de los dos ampliaremos notablemente la autonomía, aunque la experiencia de uso empeora claramente.

Este apartado de la batería podría ser de notable alto si se hubiera añadido carga rápida. Lamentablemente nos quedamos en un puerto microUSB y un tiempo de carga total que alcanza las dos horas y media, llegando al 25% en media hora y algo menos del 50% en una hora.

Un apartado fotográfico todoterreno

El Samsung Galaxy A6+ incorpora doble cámara trasera. Tenemos un sensor principal de 16 megapíxeles bajo una lente de apertura f/1.7, enfoque automático y flashLED. Acompañando encontramos un sensor secundario de cinco megapíxeles con una lente de apertura f/1.9 que nos ayudará a crear el llamativo efecto bokeh.

La aplicación de cámara de Samsung es aparentemente sencilla pero disponemos de una gran cantidad de opciones. En la pantalla principal encontramos, además del botón de disparo, tres opciones: Bixby Vision, enfoque dinámico y stickers. Como vemos, los añadidos y efectos tienen una posición de privilegio en la cámara de Samsung.

En la parte superior nos encontramos con el botón de cambio a la cámara frontal, el modo pantalla completa, flash y el menú de ajustes. De manera algo oculta, si deslizamos desde la izquierda accederemos al resto de funciones como la panorámica, el modo noche, la ráfaga, el modo deportes, sound & shot y un modo manual que nos dejará elegir la ISO, la obturación y el balance de blancos.

El Galaxy A6+ no ofrece todas las opciones de Bixby que tenemos por ejemplo con el Galaxy S9, pero sí algunas de ellas como Bixby Vision. Aquí únicamente tendremos que elegir lo que queremos reconocer, apuntar sobre el objeto y automáticamente nos aparecerá la información sin necesidad de hacer la foto. Tenemos reconocimiento de textos, de códigos QR y hasta información sobre comidas o vinos.

Calidad de imagen

Pero vayamos a lo que importa. ¿Qué tal se comporta la cámara del Galaxy A6+? Los resultados son bastante buenos en todo tipo de situaciones. Sin llegar a ser una cámara de sobresaliente, lo cierto es que es de esas cámaras de apuntar, disparar y donde normalmente los resultados suelen estar acordes a lo que esperamos.

De día las imágenes son bastante precisas, los distintos colores mantienen su tonalidad natural y las fotografías consiguen un buen nivel de detalle. Sí es cierto que se anticipa cierto nivel de ruido pero en general la cámara está al nivel de lo visto en la mayoría de móviles de gama media.

La velocidad de enfoque no es la más elevada pero como comentamos no suele fallar. El rango dinámico es bastante correcto, permitiendo apreciar detalle en las partes más oscuras como en las más claras, aunque en diversas zonas apreciaremos inevitablemente algunos quemados.

Si nos vamos a la fotografía macro veremos que no nos permite enfocar a muy pocos centímetros, pero sí consigue un buen detalle en imágenes de cerca. La nitidez es buena aunque si debemos comentar algo sería que las fotos tienden a estar algo difuminadas y notamos como si el procesado de la cámara fuera bastante agresivo.

Las fotografías por defecto se realizan en 16MP, en un formato de imagen 4:3 pero también tenemos disponible la posibilidad de efectuarlas en modo panorámico de 18,5:9. El resultado es muy similar salvo que el campo abarcado será mayor. Se trata de una opción que incorporan la mayoría de cámaras y que en el Galaxy A6+ está muy bien implantado en la aplicación ya que los menús se integran a la perfección con el modo panorámico.

La cámara del Galaxy A6+ tiene activada por defecto la opción Auto HDR. De hecho si queremos desactivar el efecto HDR deberemos ir a los ajustes y pulsar en manual. En caso de eliminar este modo automático las imágenes ofrecen tonos más oscuros. Nuestra recomendación es mantener el modo HDR auto ya que el nivel de detalle no se penaliza tanto y la cámara suele acertar cuando aplica el efecto.

HDR desactivado (izquierda) vs HDR activado (derecha)

En escenas con peor iluminación el nivel de ruido empieza a notarse aunque sigue cumpliendo bastante bien.

Si nos vamos a imágenes de noche el detalle sigue manteniéndose relativamente bien y suele captar bastante luz en aquellas zonas más oscurecidas. Un resultado bastante meritorio y donde el Galaxy A6+ no tiene nada que envidiar al resto de modelos de gama media presentados en 2018.

Precisamente uno de los puntos flojos de la fotografía nocturna del A6+ es que los colores de las luces son algo artificiales. Este juego mejora bastante si aplicamos el modo noche. El enfoque mejora es bastante puntos y aunque oscurece la imagen, los tonos son más acordes a los que tenemos enfrente.

Fotografía nocturna (izquierda) vs modo noche (derecha)

Para activar el modo bokeh deberemos hacerlo desde la opción principal de enfoque selectivo. Aquí tenemos una cámara secundaria que hace muy buen trabajo. El Galaxy A6+ dispone de uno de los mejores modos retrato de la gama media. El nivel de desenfoque se puede modificar en varios niveles, podemos elegir fácilmente en qué punto queremos que se aplique y lo más importante, a través de la aplicación de galería de Samsung podremos modificar el desenfoque aunque la foto ya haya sido realizada.

En este modo desenfoque podemos aplicar varios niveles pero en general los perfiles están igual de definidos. Aquí se agradece que aunque el desenfoque sea más intenso, el nivel de acierto se mantiene.

Fotografía estándar (izquierda) vs modo bokeh mínimo (centro) vs modo bokeh pronunciado (derecha)

Para la grabación de vídeo no contamos con estabilización óptica ni tenemos vídeo a 4K. En el Galaxy A6+ estamos limitados a la grabación de vídeo 1080p a 30fps.

Cámara frontal

En la parte delantera tenemos un sensor único de 24 megapíxeles con una lente de apertura f/1.9 y flashLED. Pese a contar con solo un sensor tenemos también modo retrato para aplicar efectos de desenfoque. A lo que deberemos añadir un modo belleza muy sutil y la opción de selfies panorámicos, una opción que puede ser útil para hacer selfies en grupo pero no debemos confundirla con los selfies de gran angular.

Los resultados de la cámara frontal son de nuevo muy buenos. El nivel de detalle es elevado, el rango dinámico es correcto e incluso el modo retrato es bastante resultón. Eso sí, con bastantes más problemas que en la parte trasera. Algo lógico ya que se hace todo por algoritmos al no tener un doble sensor.

Esta cámara frontal nos permitirá incluso realizar selfies de buena precisión aunque la luz sea escasa. Normalmente la mayoría de dispositivos sufren en este tipo de situaciones, pero la cámara del Galaxy A6+ lo solventa bastante bien. Contamos además con un flash LED frontal de tres niveles para ayudar a realizar mejores fotos de noche.

En este Galaxy A6+, aunque el sensor sea inferior a sus hermanos mayores seguimos teniendo esa sensación que suele ofrecer Samsung. Una cámara todoterreno donde sin llegar a deslumbrar tampoco hemos detectado ningún punto donde flojee.

Altavoz lateral y auriculares incluidos

El apartado de sonido del Galaxy A6+ no es muy destacado, pero sí nos ha parecido interesante conocer su apuesta. Al contrario de lo que estamos acostumbrados, el terminal de Samsung incorpora un único altavoz en el lateral derecho, justo encima del botón de apagado/encendido. El resultado es similar al que tenemos con el altavoz inferior pero cuando tenemos el teléfono en mano el sonido sale más cerca de nuestro oído.

El volumen máximo alcanza unos 90 decibelios y nos ha parecido bastante agradable, sin notar una distorsión llamativa. Sí mejora notablemente a través del puerto de auriculares. En este caso además Samsung nos añade en la caja unos auriculares de color blanco con micrófono y que nos servirá para aprovechar la función de radioFM que tiene. Son de tipo botón, se adaptan bastante bien a la oreja y producen un sonido limpio aunque sin destacar en graves.

Samsung Galaxy A6+, la opinión y nota de Xataka Móvil

El Samsung Galaxy A6+ tiene un precio oficial de 369 euros, aunque ya se puede encontrar en algunos sitios por 319 euros. Normalmente el precio de partida de los terminales de Samsung es muy elevado pero con el paso de los meses se coloca a un rango de precios más lógico y es entonces cuando empieza a ser una opción a tener en cuenta.

Es una lástima que el Galaxy A6+ no incorpore un procesador mejor porque en el resto de apartados compite con los Moto G6 Plus o Redmi Note 5. Tenemos un diseño unibody que pese a tener un par de elementos que podrían mejorarse, sí ofrece buenas sensaciones. Su pantalla está entre las mejores de su rango, la doble cámara trasera es todoterreno y la autonomía ha pasado el test con nota.

El Galaxy A6+ viene actualizado a Android 8.0 Oreo y la capa de personalización de Samsung ofrece decenas de funciones muy trabajadas. En general se nota la mano del fabricante surcoreano que pese a ofrecernos un gama media más asequible ha mantenido gran parte de la identidad de la gama Galaxy.

Si estáis buscando un gama media completo y con añadidos como Bixby, dobleSIM o NFC, este Galaxy A6+ es un smartphone Android que ofrece una gran experiencia. Una lástima que de momento esté a un precio muy por encima de lo que la competencia marca.