En la AppStore de Apple hay juegos malos, regulares, buenos, y luego están aquellos que sobresalen de la media. Aby Escape pertenece a ese último grupo, y en su caso lo hace por una simple razón. Sin tener una factura técnica formidable ni siendo el colmo de la originalidad, consigue fijarse en todo lo que se ha hecho bien y mal hasta la fecha para presentarse como una propuesta sólida, larga y divertida.
Que estemos ante un desarrollo español no afecta en absoluto a mi valoración, vosotros mismos comprobaréis en el siguiente análisis qué puntos hacen destacar a Aby Escape por encima del resto. Eso si no lo habéis probado ya, de lo contrario estaréis dejando escapar uno de los títulos gratuitos del año.
Aby Escape
Que Aby Escape es un mejunje de títulos como Temple Run o Jetpack Joyride es algo que salta a la vista. De hecho no creo que ni Pixel Ratio ni Bulkypix intenten esconder sus intenciones. La idea era divertida entonces y lo sigue siendo ahora, y visto el panorama de desarrollos para móviles, la “inspiración” es algo que dejó de ser un crimen hace mucho tiempo.
La diferencia entres esos ejemplos y el título que nos ocupa es que nunca te da tregua. Es decir, así como en otros juegos puedes recorrer varios metros sin temor a que te ocurra nada, en Aby Escape las cosas se empiezan a complicar antes de que llegue el minuto de juego, pidiéndole mucho más al jugador pero también ofreciéndole un reto a la altura.
Ahí es donde entra el sistema de gestión de añadidos del juego, sin duda de lo mejorcito que he visto en un juego para smartphones. A menudo la variedad de situaciones y elementos se nos presenta a los pocos minutos de juego sin dejar ni una sola sorpresa por delante. En Aby Escape, en cambio, podremos echar decenas de partidas hasta ver que, después de ese punto en el que siempre nos matan, se introducen cosas nuevas.
La gracia en gran parte reside en su dificultad, que se aplica la regla de no dárnoslo todo mascado y hacernos sufrir para recibir nuestra recompensa. En este caso eso no se basa sólo en puntuaciones que comparar con nuestros amigos, sino también en la posibilidad de conseguir más y más monedas para desbloquear los múltiples elementos que esconde el juego.
Podrían haberse dados por satisfechos con el sistema de power-ups que prácticamente se calca del citado Temple Run, pero además se añade objetos de un único uso, personajes, escenarios y hasta un modo historia. Sí, el juego no es sólo correr y correr en la misma pantalla con los ligeros cambios que pueda recrear el sistema procedural del juego, también hay un modo historia que deberemos desbloquear con monedas, y el precio es lo suficientemente alto para que justo cuando empieces a cansarte del juego le des un último empujón para ver cosas distintas.
A todo eso hay que sumarle otro clásico que parece haber venido para quedarse, el de los objetivos. Cae cinco veces por un barranco, recoge X zapatillas… retos que nos proporcionarán grandes cantidades de monedas pero que no se limitan a lo básico, sino que incitan a la compra de nuevos elementos para que el juego nos dure más de lo normal.
Siempre queda la opción de comprar con dinero real multiplicadores de monedas o incluso sacos llenos de las mismas, pero donde otros fracasan al crear un modelo de negocio que rompe el juego por completo al hacerlo imposible sin esos gastos, Aby Escape pone todo al alcance de tu mano, sólo pidiéndote un poco de esfuerzo.
Da gusto tener un juego en tus manos y ver que todo se ha hecho de la mejor forma posible, desde el apartado gráfico hasta el diseño de sus mecánicas, desde su durabilidad hasta su forma de rentabilizar un lanzamiento gratuito. Aby Escape es un juego que te dará mucho por muy poco, si eso no lo convierte en imprescindible paren el mundo que me bajo.
Aby Escape
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