Hace unos días LINE presentaba LINE Call para Android, su servicio de llamadas VoIP que, con unas tarifas a priori interesantes, te permitía llamar desde la aplicación tanto a móvil como a fijos. ¿La idea? Que utilizando su aplicación no sólo puedas comunicarte por voz con otra gente que la tenga instalada, sino con todo el mundo.
Pero ¿merece la pena? ¿Qué tal funciona? Y, en definitiva, ¿es un servicio que puede sustituir a las llamadas tradicionales que hasta ahora utilizamos? Desde Xataka Móvil hemos decidido probarlo y ya os adelantamos algo: todavía tienen mucho que mejorar. Mucho. Os relatamos nuestra experiencia a continuación.
Tarifas interesantes
0,016 euros el minuto a fijos y 0,072 euros el minuto a móviles. Ése es el precio que tiene llamar con Line a números españoles. Además existe un plan de 30 días, con el que pagas 0,48 euros y a cambio tienes 60 minutos para hablar cada mes que incluyen fijos. Si quisieras también móviles, serían 1,6 euros. Las tarifas están bastante bien, especialmente para llamadas cortas (no habría establecimiento de llamada).
Otro aspecto importante es que las tarifas para llamadas a otros países también son relativamente bajas. Por ejemplo, llamar a un fijo de Colombia son 0,03 euros minuto, mientras que a Estados Unidos son 0,02 euros. En la web oficial tenéis todas las tarifas para los países a los que puede realizarse una llamada a través de esta aplicación.
En mi caso, y dado que no tengo teléfono fijo en casa con tarifa plana a otros fijos nacionales, me pareció interesante la propuesta. Sí, iba a probarlo para poder escribir sobre ello pero mi idea era seguir utilizando el servicio si funcionaba bien.
Comprar créditos, a través de la app
Para acceder a LINE Call, hay que utilizar la aplicación principal LINE. Nada más entrar, el primer fallo: si recordáis, acabamos de comentar que existe la opción de comprar créditos o de contratar una tarifa plana de 60 minutos para un mes. Mi primera intención era lo segundo ya que por precio salía rentable, pero comenzaron los problemas. Ni desde la aplicación me aparecía la opción ni desde la web, en la que me asegura que esa posibilidad no está disponible en mi país (a pesar de que, desde la web, sí aparece como tal). Empezamos mal.
Opté entonces por comprar 100 créditos por 0,89 euros. La transacción es extremadamente sencilla, ya que se trata de una compra in-app que se tramita desde Google Play. Un par de clicks y ya tenía el saldo añadido a mi cuenta. Otra opción, para los que posean "monedas" de LINE, es canjearlas por créditos para llamadas. No era mi caso. Una vez con el crédito en el bolsillo, pasamos a lo importante: llamar.
Las llamadas dejan mucho que desear
Cuando probé LINE hace bastante tiempo, las conversaciones de voz eran todo un horror: el retardo hacía imposible mantener una conversación. Suponía que esto habría ido mejorando con el tiempo y desde luego que no esperaba encontrarme en una situación similar con un servicio de llamadas de pago. Pero por desgracia así fue.
Tanto en las llamadas que hice desde WiFi (con una conexión de 100MB, por lo que la capacidad de la misma no debería ser problema) como con 3G existía muchísimo retardo. Con Wi-Fi, fácilmente, estaríamos hablando de 1 o 2 segundos desde que mi interlocutor me hablaba hasta que me llegaba a mí, y viceversa. Con 3G el retardo era todavía mayor. Así es imposible mantener una conversación normal, ya que tienes que esperar siempre unos segundos para dar tiempo al receptor de la llamada.
Respecto a la calidad de la misma, lo cierto es que sobre WiFi no encontré queja alguna: la voz se escuchaba de forma clara. Tampoco es una mejoría brutal respecto a una llamada normal, pero se escuchaba bien tanto llamando a móviles como a fijos. Con 3G es cuando llegó el problema. Con una cobertura decente, mi interlocutor decía escucharme con cortes continuamente. Retardo y cortes, no una buena forma de intentar tener una conversación.
En cuanto al consumo de datos, en dos llamadas realizadas sobre 3G (2,26 minutos a fijo y 2,39 minutos a móvil) en total se consumieron en torno a 1,5 megabytes. No es una cantidad excesivamente alta pero sí es algo a tener en cuenta para los que, como yo, tienen una determinada cantidad de datos cada mes y no pueden pasarse del límite si no quieren que la operadora les cobre.
Otro inconveniente importante: al ir a llamar a un teléfono móvil, LINE Call no reconocía el número tal cual lo tenía guardado en la agenda del teléfono (un Moto G). Fue necesario escribir el código de país (+34) a mano y después añadir el teléfono. A la hora de realizar llamadas a fijos no tuve el mismo problema.
Llamar, llamar y llamar
Con LINE Call no esperéis grandes opciones. No existe la posibilidad de configurar desvíos de llamada, no se pueden enviar mensajes y no existe el buzón de voz. Respecto a las llamadas, la propia aplicación te alerta de que no podrás realizarlas a números de emergencia o número de tarificación premium.
¿LINE Call? De momento no, gracias
Iba dispuesta a que me gustara LINE Call, de verdad, e incluso meditando la posibilidad de usarlo en el día a día, pero lo cierto es que no creo que vaya a ser así. Tiene cosas que me gustan, como las tarifas o el hecho de que al llamar el que reciba la llamada vea tu teléfono en el identificador, pero el servicio tiene un problema que echa todo a perder: el dichoso retardo, sin olvidarnos de los cortes en 3G. Y cuando en un servicio que sirve para comunicarse es imposible mantener una conversación... mal vamos.
Enlace | LINE Call En Xataka Móvil | "LINE Call llega a LINE en Android: llamadas a líneas fijas y móviles tradicionales":https://www.xatakamovil.com/aplicaciones/line-call-llega-a-line-en-android-llamadas-a-lineas-fijas-y-moviles-tradicionales
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