Si hay una aplicación rival que han puesto en el punto de mira desde Facebook esa es Snapchat. Mientras en otras ocasiones Mark Zuckerberg ha preferido no rivalizar y tirar de chequera, como hizo con WhatsApp o Instagram, en el caso de la aplicación de mensajería efímera ha preferido sacar toda la artillería para intentar arrinconarla.
El plan para acabar con Snapchat ha pasado por replicar su principal propósito, compartir con nuestros amigos o seguidores historias que desaparecen en un plazo de 24 horas. Llegaron a Instagram, a la propia Facebook y como no, a WhatsApp. Y aunque parece que casi nadie use las historias o nuevos estados de la aplicación de mensajería, lo cierto es que ya son más usuarios los que las usan a diario que los que usan Snapchat.
Los nuevos estados o las historias de WhatsApp llegaron a finales de febrero y a pesar de la repercusión inicial, su éxito parecía estar siendo muy tímido. Los estados están ahí, en una pestaña aparte de los chats, y el hecho de estar en una sección aparte y de que son muchos los usuarios que ya usan Instagram para compartir historias efímeras no daban buenas señales para esta nueva opción.
Pero lo cierto es que en poco más de un mes, para finales de marzo, ya son 175 millones de usuarios los que usan a diario los nuevos estados de WhatsApp. Es una cifra muy inferior a los 1.200 millones de usuarios de WhatsApp en sí, pero a pesar de ello ya son más que los 163 millones de usuarios diarios de los que presumía Snapchat en el mes de febrero.
Una app para todo, ¿deseo de los usuarios?
Los datos de usuarios de los nuevos estados de WhatsApp unidos a los que usan las historias de Instagram (200 millones) vienen a demostrar algo que es palpable en los últimos tiempos: los usuarios queremos una aplicación para todo, no múltiples aplicaciones con un propósito concreto cada una de ellas.
El crecimiento de usuarios de Snapchat es bastante plano, mientras que WhatsApp, Instagram o Facebook Messenger a pesar de llegar las cotas que están alcanzando sigue creciendo. La clave está en que las apps en manos de Facebook están incorporando cada día más funciones, y aunque algunos no las llegarán a usar casi nunca, otros muchos las valoran positivamente.
Así, hemos visto como llegaban las llamadas y vídeollamadas a WhatsApp, por supuesto los nuevos estados, la próxima posibilidad de que podamos compartir en directo nuestra ubicación en tiempo real, su adaptación a empresas o incluso las transferencias de dinero entre particulares. Todo para hacer de WhatsApp la aplicación que lo tenga todo.
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