El Xataka Móvil Arcade de hoy podría separarse en dos grupos muy claros. Todos los juegos son igual de divertidos, pero mientras unos lo hacen optando por un diseño mucho más cuidado y visualmente impactante, los otros dos aseguran el tiro con estilos más simples.
Algo similar ocurre si los separamos entre juegos para disfrutar durante ratos cortos y títulos en los que perderte durante horas. El primero y el último son un perfecto ejemplo de eso último. Los otros dos, mejor dejarlos para cuando estemos esperando a que llegue el autobús.
The Sushi Spinnery
The Sushi Spinnery es uno de los últimos ladrones de horas desarrollado por Kairosoft. Esta vez con un restaurante de sushi como protagonista nos invitan a gestionar otro negocio, escogiendo qué productos vender y cómo hacer que el público se acerque a nuestro local.
Si habéis probado otros títulos de esta compañía ya sabréis que el precio es totalmente justo, pocos juegos ofrecen tanto contenido sin preocuparse de volver a hacernos picar en una tienda dentro de la aplicación. Un juego largo, divertido y tremendamente adictivo, es imposible apartar la vista de la pantalla.
Slayin
Aquí otro juego que, como te despistes, acaba con tu productividad por completo. La clave de Slayin está en sus mecánicas, a medio camino entre un endless runner y un juego de acción. Sí, como en el género de moda nuestro personaje no parará de correr, pero en este caso el escenario está limitado a lo que vemos en pantalla y sólo podremos movernos de izquierda a derecha.
Lo haremos para esquivar y atacar a los enemigos que aparezcan, la clave para avanzar en el juego y poder conseguir monedas con las que mejorar esa espada, armadura o magia que nos puede dar la clave de la victoria. Otro imprescindible que se suma a la larga lista de juegos destinados a acabar con los ratos muertos.
Badland
Con un diseño precioso y el siempre aplaudible éxito que otorgan los premios al sector indie, Badland llega a iOS para hacernos vivir una experiencia tan reconocible como única. Sus mecánicas son tremendamente básicas, pulsa sobre la pantalla para que el personaje ascienda y suelta para que caiga, pero la forma de implementarlas es sencillamente magistral.
Sus retos, a menudo más relacionados con los puzles de físicas que con la dupla de dificultad y escenario, nos intentarán poner en aprietos cuando el límite (ampliable) de 40 niveles empiece a agotarse, pero no es nada que el método de ensayo y error no pueda solucionar. La lástima es que si le metes mucha caña es raro que te acabe durando más de una tarde. Pero pese a ello me sigue pareciendo una compra muy recomendable.
The Other Brothers
Pedíamos a gritos un plataformas de la vieja escuela con la boca pequeña, y es que el miedo a los controles táctiles nos ha invitado a pensar que lo de la cruceta y los botones tal vez no sea una buena idea. The Other Brothers no sirve para demostrar lo contrario, su cruceta se mueve cada vez que pulsamos sobre la pantalla y, al final, el control del personaje se vuelve un poco caótico.
El problema pide a gritos una actualización que no creo que tarde demasiado en llegar, hasta entonces tendrás un juego magnífico, con un estilo muy cuidado y unos diseños de personajes que son la bomba, pero capaz de provocarte algún que otro mosqueo. Por suerte su precio es lo más bajo posible, casi pidiendo perdón por un problema que seguro habrá salido a relucir durante las sesiones de testeo.
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