No corren buenos tiempos para Snap Inc, la empresa dueña de Snapchat. A pesar de su exitosa salida a bolsa, se revalorizó un 44% en el mismo día de su llegada a Wall Street, sus primeros resultados como empresa cotizada han defraudado a los accionistas. Los ingresos generados en el primer trimestre de 2017, de 149 millones de dólares frente a los 158 que esperaban los analistas, quizás sean la noticia menos mala.
El problema de Snapchat es que no crece. Sus usuarios diarios están en 166 millones, solo cinco millones más que tres meses atrás, quedando por detrás de las Stories de Instagram, estrenadas en agosto del año pasado. Pero lo más rocambolesco de todo es que en Snapchat creen que ellos no tienen la culpa de todo, que los "malos" móviles y conexiones de muchos países lastran su crecimiento. Aunque quizás deberían preguntarse si el producto que están desarrollando puede tener éxito.
A Snapchat se le complica cada día más su futuro. Facebook ofreció 3.000 millones de euros en 2013 por una de las aplicaciones preferidas de los millennials de unos cuantos países y tras ver rechazada su oferta, Zuckerberg ha usado todas sus armas para hacerle frente. Las historias que desaparecen en 24 horas, principal función de Snapchat ya están disponibles en Facebook, Instagram y WhatsApp.
Las historias de Instagram, estrenadas en agosto de 2016, ya cuentan con 200 millones de usuarios diarios y los nuevos estados de WhatsApp, llegados en febrero de este mismo año, van por 175 millones de usuarios, frente a los 166 millones de usuarios de Snapchat, por lo que el propósito de Facebook parece ya logrado. El freno a Snapchat ha llegado, pero desde Snap Inc. no hacen autocrítica.
Malos móviles y conexiones demasiado lentas
De los ocho millones de usuarios que ha ganado la aplicación en el último trimestre seis vienen de Estados Unidos y Europa. El problema está en el resto del mundo, donde Snapchat apenas ha crecido en los últimos meses. Y según ellos el problema no es su aplicación, sino los móviles y sus conexiones que se usan en esos países.
Como recogen en Axios Snapchat tiene más usuarios en los que la implantación de iOS es mayor, sistema operativo en el que según reconocen ellos mismos la app funciona mejor. Pero además, también se excusan en que Snapchat necesita una conexión de mayor calidad que Facebook al estar basada por completo en fotos y vídeos, para justificar que no ganen clientes en países con no tan buenas conexiones.
El síndrome de la app con un solo propósito
Lo cierto es que por muchas excusas que busquen, los problemas de Snapchat, tanto de crecimiento como con los accionistas que buscan una mayor rentabilidad, no se van a acabar con ellas. Si la aplicación no funciona del todo bien en un sistema operativo la solución es sencilla: dedicar más recursos a su desarrollo. ¿Qué las conexiones son demasiado lentas en algunos países para su uso? Quizás puedan buscar la manera de rebajar el peso de las fotos o vídeos antes de ser enviados.
Esos dos puntos tendrían una fácil solución para una empresa del tamaño de Snap Inc, pero el principal problema de Snapchat no es precisamente ese. El problema es que los usuarios pueden instalar decenas de aplicaciones en sus móviles, pero acaban usando a diario muy pocas y para estar entre ellas hay que ofrecer distintas funcionalidades. Algo que precisamente Snapchat no hace, ya que su utilidad o uso es muy limitado, prácticamente de un solo propósito, compartir momentos de manera efímera.
Y todo ello sin tener en cuenta que de esos 166 millones de usuarios de Snapchat parte usan la aplicación solo para aplicar filtros y máscaras en fotos que luego se llevan a Instagram. Cuando toda la variedad de filtros de Snapchat lleguen a sus competidores Snap se debería echar a temblar de verdad. Así que el problema de Snapchat no son los países con "peores" móviles o conexiones, es un problema de producto. O evoluciona para ofrecer nuevas funcionalidades o tendrá los días contados.
En Xataka Móvil | El éxodo de Snapchat: las razones del trasvase hacia Instagram según sus protagonistas
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