Tratar de aprovechar nuestro iPhone como sistema de navegación por satélite puede resultar un tanto caro. Sobre todo si, sumado al soporte homologado, añadimos la aplicación de TomTom para comprobar que el funcionamiento de la misma es de todo menos preciso. Algo que padecimos muchos usuarios hasta que la empresa de desarrollo de dispositivos de geolocalización decidió sacar a la luz la actualización 1.3.
A fin de cuentas, el precio final a pagar por todo el conjunto, eliminando incluso el coste del propio terminal, puede equipararse al de cualquier otro dispositivo de geolocalización dedicado. Por lo que tras mucho pensárselo, TomTom ha sacado a la luz una actualización con una larga lista de mejoras, notables sobre todo en el funcionamiento de posicionamiento en ruta. Lo que no desvela el misterioso funcionamiento errático y totalmente diferente que el propio software ocasionaba en terminales exactamente idénticos.
Comprobar como un iPhone 3GS de 32 GB no era capaz de ejecutar la aplicación con la fluidez necesaria para realizar las necesaria ayuda a la conducción, podía convertirse en una de las sensaciones más frustrantes de nuestra vida al comprobar como un dispositivo gemelo sí podía hacerlo con total normalidad.
Más frustrante si cabe que la nulidad del servicio técnico de TomTom en nuestro país a la hora de consultar este tipo de problemas, el cual hace gala de un total desconocimiento del producto. Hasta el punto de sugerir como solución la eliminación y resintalación de la aplicación. “Perdone señor técnico de TomTom, pero se trata de un smartphone de Apple, no de un ordenador con Windows”.
Hasta el punto de enviar al servicio técnico en periodo de garantía el soporte TomTom Car Kit necesario para la alimentación eléctrica y recepción de la señal GPS, con el fin de que procedieran a la revisión y sustitución en el caso de encontrarse defectuoso, siendo devuelto a manos de su propietario con una escueta nota en la que se notificaba la actualización del firmware del aparato. Desgraciadamente, era la misma que incorporaba antes de realizar el extraño periplo hacia el SAT de TomTom.
Nueve meses han sido necesarios, desde su presentación en el WWDC 2009, para que gran parte de los usuarios que nos dejamos una buena suma de dinero para llevar a cabo nuestra particular convergencia de dispositivos, pudiésemos disfrutar de una navegación de viva voz, precisa y sin convulsos movimientos de pantalla, que nos dirija a desconocidos destinos sin perdernos por nuestro propio desconocimiento o por el del propio GPS.
La nueva TomTom 1.3 para iPhone, además de contar con diferentes versiones en función de la cobertura de sus mapas, añade como principal novedad búsquedas en Google integradas, o lo que es lo mismo, seleccionar nuestro destino empleando el mencionado buscador. Además de contar con los últimos mapas, como gran novedad, cuenta con las búsquedas de Google integradas.
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