Un iPhone 15 Pro sin botones físicos: la "solución" a un problema que no existe

Entre Keynote y Keynote, filtraciones. Es ley de vida. No tengo pruebas pero tampoco dudas de que ciertas filtraciones son interesadas a modo de globo sonda, algunas tienen más sentido que otras pero todas nos ayudan a ir haciéndonos a la idea de qué esperar sobre un teléfono. La última filtración sobre el iPhone 15 promete uno de los mayores cambios en la historia de Apple: la desaparición de los botones físicos en favor de botones capacitivos. Tuve que leerlo varias veces para procesarlo. "Oye, pero que Apple ya quitó el botón Home y no pasó nada". Sí, pero eso tenía sentido: si se confirman los rumores y Apple elimina los botones de volumen y apagado/encendido, para mí será una tragedia y un paso atrás.

Así sería el futuro iPhone 15 Pro

Qué dice la filtración. Agárrate porque vienen curvas: el teórico iPhone 15 Pro diría adiós al lightning en favor del USB-C como marca Europa, un diseño con más curvas para mejorar la ergonomía, un módulo de cámaras monstruoso y la llegada de botones capacitivos en sustitución de los botones físicos. Algunas de estas especificaciones obedecen a normativa, otras a modas en el diseño y la de los botones supondría una mirada al futuro sin precedentes. Que sí, que son filtraciones y no todas son reales, pero este cambio en los botones no es un rumor nuevo, si no que ya se lo habíamos escuchado meses antes al popular analista Ming-Chi Kuo, uno de los más certeros.

De esta filtración lo que ha trascendido es un rediseño de la botonera de volumen y el switch para cambiar entre los modos de sonido y silencio. Lo que no hay es información sobre su funcionamiento y cómo actuar por ejemplo si el iPhone se queda bloqueado (ahora puedes hacer una pulsación prolongada sobre el botón de encendido para apagarlo).

Hay botones que siguen siendo imprescindibles

Del botón Home a los gestos. Como comenzaba este artículo, Apple ya se deshizo de un elemento tan icónico como el Home, un botón que lo mismo servía para interactuar y navegar por la interfaz que para invocar a Siri o el reconocimiento digital. Con el iPhone X desaparecieron de los iPhone de septiembre, quedando presente únicamente en el outsider iPhone SE, que renovó su apuesta por este diseño el pasado año con la generación de 2022.

En el camino del primer al tercer SE Apple pasó de un Home físico a un háptico, aunque en mi opinión bien podría haberse deshecho por completo de él. Precisamente con este iPhone SE 2022 la sensación estética es que nació viejo: el reconocimiento facial y el control gestual está plenamente consolidado en el sector, se ha demostrado su efectividad en el manejo y si hablamos de diseño, posibilita un frontal prácticamente despejado y libre de una gran y anacrónica barbilla.

Más allá de que la sensación con un botón físico es mucho más tangible y satisfactoria que con un háptico, también es una cuestión práctica que potencialmente va a dar más disgustos que alegrías. Teniendo en mente que 1. es un rumor y 2. de ser cierto, no sabremos cómo funcionará, se me ocurren varias situaciones en las que tener botones hápticos y no físicos pueden jugarnos malas pasadas.

La premisa en cuanto a usabilidad por la que la ausencia del Home tiene sentido es que sus funciones se usan cuando tienes la pantalla delante, y en ese caso no es un drama cambiarlo por gestos.Pero el caso de la botonera de volumen, el switch y el de activación/on/off es diferente. ¿Cuántas veces lo tienes en el bolsillo y metes la mano para cosas como bajar el volumen o verificar que lo tienes en silencio?

Se me ocurre por ejemplo antes del cine, para asegurarnos de que está en silencio. O cuando ya se ha consumado la tragedia de que alguien te llama en plena peli y quieres bajar el volumen tan rápido como humanamente puedas. Incluso que lo tengas fuera del bolsillo y estés mirando algo y se reproduzca en Instagram un vídeo con volumen cuando no es buen momento. En todos estos escenarios quiero un botón físico a mi alcance y la correspondiente memoria muscular que ayuda a saber dónde está y cómo tocarlo.

Hay otro caso que me he dejado en la guantera (je): los guantes. Que sí, que hay guantes con las puntas de los dedos capacitivas y no me cabe duda que Apple optimizará las formas y sensaciones para facilitar la tarea, pero es innegable con tengas los guantes que tengas, con botones físicos te apañas mejor. Lo mismo puede decirse con las manos húmedas: me pasa con la airfryer con panel táctil y con la pantalla del Echo, pero con un botón físico no tendría ese problema.

Innovar sí, pero con sentido

Estos problemas no son un secreto: no es casualidad que Apple pusiera un botón físico en un dispositivo tan avanzado con el Apple Watch Ultra. Aquí la pregunta del millón es: ¿para qué eliminar los botones físicos? Más teniendo en cuenta que si se hace, tendrán que conseguir unos botones hápticos que se sientan casi como los físicos. Pero los botones físicos ya funcionan bien y habría que pulir muchísimo una tecnología para un cambio que nadie ha pedido.

Puede ser porque Apple busque ahorrar espacio en sus dispositivos para o bien hacerlos más finos o para destinarlo a otros componentes. Quizás así mejore su protección ante la intemperie. Quizás sea una vuelta de tuerca para conseguir una estética despejada. Que un diseño sea claro, despejado y minimalista es bueno, si compromete la funcionalidad, pierde puntos.

Portada | Foto análisis iPhone 14 Pro Max -  de Xataka por Ricardo Aguilar