Hace unos días os comentábamos como, según un reciente estudio de Cisco, la cantidad de datos que circulan por internet se cuadriplicará en 2015. Profundizando un poco más en dicho estudio podemos extraer algunas conclusiones interesantes, como por ejemplo que el tráfico de las redes inalámbricas superará claramente al de las redes fijas en menos de 4 años.
Según las estimaciones de Cisco, los dispositivos WiFi usarán más ancho de banda que las redes fijas en 2015, con un consumo mensual mundial de 37,2 exabytes (EB), frente a los 37 EB de las redes cableadas.
El estudio apunta a que estas cifras podrían llegar a ser incluso más espectaculares, si continúa la tendencia de descargar el tráfico de las redes móviles hacia puntos de acceso WiFi, como ya está sucediendo en algunas de las ciudades más importantes del planeta.
Y es que, al parecer, dichas redes móviles sufrirán un incremento de uso realmente espectacular, con un tráfico de datos que podría llegar a multiplicarse por 26 en el mismo periodo, lo cual supone unos 6,3 EB al mes y alrededor del 8% del tráfico global que circulará por Internet.
Este espectacular aumento en el uso de las redes inalámbricas supone la inmediata necesidad de mejorar las tecnologías que soportan su funcionamiento, así como de destinar más bandas de frecuencia a dicho uso. Las operadoras, conscientes de este hecho, ya trabajan a marchas forzadas para desplegar las nuevas generaciones móviles, aunque lamentablemente en algunos países más que en otros.
En el otro lado de la cadena tenemos a los consumidores, y especialmente a los poseedores de dispositivos Android o Apple, que son unos auténticos devoradores de ancho de banda. Si a esto le sumamos un futuro de Internet en el que, según nos han comentado desde Telefónica I+D, nos veremos inmersos en un mundo plagado de dispositivos, de sensores, prótesis y objetos conectados, nos daremos cuenta de que este despliegue es más necesario que nunca. De lo contrario corremos el riesgo de llegar tarde al nuevo paradigma digital del futuro, el de la Internet de las Cosas.
Más información | Estudio de Cisco (completo en PDF)