El router es un elemento esencial para disfrutar de conexión a Internet en casa, por esto el operador nos lo instala nada más contratamos el servicio. Sin embargo, ya sea el predeterminado de la compañía o uno neutro que hayamos adquirido, puede que tengamos problemas con la señal WiFi.
Para estos casos, debemos analizar nuestro hogar para dar con la elección óptima que consiga repartir la cobertura por todos los rincones. En este sentido, influyen ciertas tecnologías que debemos comprobar que nuestro router tenga, o bien lo hagamos antes de lanzarnos a por uno nuevo.
Antenas potentes y direccionales
Comencemos por lo más básico. Como sabemos, el router emite la señal WiFi a través de sus antenas. Estas, para una correcta distribución, necesitan la potencia adecuada dependiendo de cada situación. Esta potencia de salida se mide en dBi por sus siglas que significan "ganancia de antena en decibelios por encima de un radiador isotrópico".
Entre las características del router, ya sea en su caja o en el manual digital, encontraremos esto que hablamos. Además de la potencia, también es importante el número y por supuesto, la colocación de las antenas. En cuanto al número, la mayoría de equipos ya usan hasta cuatro, una cantidad más que razonable.
MU-MIMO y OFDMA: estas siglas son tus aliadas
Entramos en terreno técnico con las siglas MU-MIMO. Este rimbombante nombre viene a significar "múltiples entradas y múltiples salidas" (del inglés Multi User - Multiple Input Multiple Output). Esta tecnología tiene como objetivo principal la mejora de la capacidad y eficiencia en conexiones con mucha demanda de datos como llamadas de voz o streaming de vídeo.
Muy útil para los días que corren, puesto que conectamos muchos dispositivos a la misma red WiFi, y todos tienen propósitos distintos. Así, un router compatible con MU-MIMO dará menos problemas de conectividad a nuestros equipos.
Por otro lado, OFDMA consigue una mayor estabilidad donde MU-MIMO no se luce, es decir, en volúmenes de datos pequeños, como sucede con dispositivos del hogar. Esto cobra más importancia si tenemos altavoces, pantallas u otros dispositivos inteligentes.
Beamforming
El Beamforming es otra tecnología presente en routers modernos que ayuda a que la conexión sea mejor, más rápida y de mayor calidad. ¿Cómo consigue semejante logro? Pues ajustando las conexiones WLAN (redes inalámbricas de área local), logrando así hallar el camino más adecuado para llegar a nuestros dispositivos.
Esta tecnología permite al router analizar las señales que vuelven de los dispositivos conectados, por lo que consigue determinar la mejor vía para enviarlas de una forma optimizada. Muy útil para hogares con varias plantas, porque además cuenta con una característica llamada Direction Sensing, capaz de mover la transmisión a una dirección determinada.
WiFi Mesh
Hay una reciente tecnología que supone una gran diferencia. Hablamos de la red de malla o Mesh (en inglés) consistente en varios equipos que reparten la señal. Un router actúa como centralita, y se conecta al resto de satélites compartiendo la conexión de manera automática. Es una solución que conlleva un mayor desembolso económico, pero da un mejor resultado que los amplificadores WiFi.
Además, el precio de los routers mesh sigue disminuyendo con el paso del tiempo, y ya encontramos opciones muy válidas por debajo de las tres cifras. Por si fuera poco, la instalación de estos sistemas es muy sencilla, por lo que no necesitaremos conocimientos técnicos. De hecho, la mayoría de fabricantes incluyen una app para configurarla desde el móvil.
Compatibilidad con WAN
No todos los routers cumplen con esta funcionalidad, aunque es muy aprovechable. Se trata del puerto WAN, una conexión situada en la parte trasera del router, dándonos la posibilidad de usarlo como extensor de un router neutro.
Si contamos con esta conexión, podemos tirar un cable desde el router original a este para que reparta la señal en otro lugar de nuestra casa. Seguramente el tuyo lo tenga, pero no está de más por si debemos tomar otro tipo de medidas para mejorar la señal WiFi.
Si estamos sufriendo problemas con la cobertura WiFi, estas tecnologías harán que la conexión sea mejor, posibilitándonos conectar todos nuestros equipos. Antes de adquirir un nuevo router, es deseable comprobar si el actual ya las posee. Si la respuesta es negativa, ya conoces algunos aspectos importantes cuando vayas a comprar uno nuevo.
Imágenes | Daniel Aleksandersen / Wikimedia Commons
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