Comprar por Internet cierto tipo de artículos tecnológicos, contenidos digitales, ropa, electrodomésticos, libros, etc. se ha convertido en algo común para muchos usuarios, aunque todavía somos algo reticentes a realizar compras de alimentación que posteriormente son enviadas hasta nuestros domicilios.
Los motivos son variados, aunque uno de los principales es que aún resulta demasiado complejo para alguien no acostumbrado a usar Internet a diario tener que utilizar los servicios web de los supermercados. ¿Cómo solucionar este problema? Pues recurriendo a la Internet de las cosas, como está haciendo Evian en Francia con su Smart Drop.
La conocida marca de agua embotellada ha lanzado un nuevo servicio de venta y distribución por Internet directamente a los consumidores finales, pero conscientes de que necesitaban algo más para simplificar el proceso y atraer el interés de los clientes han lanzado un pequeño dispositivo llamado Smart Drop.
Se trata de un sencillo aparato que se pega al frigorífico como si fuera un imán decorativo que cuenta con una pantalla LED en la que podemos seleccionar el producto que queremos comprar (por ejemplo botellas de 1,5 litros), la cantidad y el día y hora en que queremos que nos lo traigan a casa. Una vez realizada dicha elección el dispositivo se conectará a través de la WiFi doméstica con el sitio de Evian donde se gestionará el pedido.
En el futuro cercano esperan crear una aplicación para móviles que realice estas funciones de forma similar, sin embargo me parece que la Smart Drop es mucho más intuitiva y de facil manejo, sobre todo para el gran público que no tiene por qué estar acostumbrado a usar un smartphone, conectarse con Internet, descargarse la aplicación, etc.
El servicio funciona de momento sólo en París, aunque esperan se extienda por el resto de Francia y después a otros países. Además, otras empresas como Danone se han interesado por el dispositivo, por lo que en poco tiempo podríamos asistir a una nueva generación de gadgets que doten de conectividad a nuestras anticuadas neveras.
El problema en este caso puede venir si tenemos que tener uno de estos aparatos para cada marca, aunque quizá se podría crear una especie de Smart Drop universal compatible con diferentes marcas y productos, simplificando la vida al cliente que en definitiva es de lo que se trata con todo este asunto.
Vía | Creativity-online
En Xataka On | La Internet de las cosas (I): Un mundo digital de máquinas interconectadas