El coste económico y el tiempo necesario para secuenciar el ADN humano han descendido a medida que se incrementaba la potencia de cálculo de los microprocesadores. Hoy en día, el mayor problema no está en realizar los complejos cálculos, sino en cómo transmitir los cientos o miles de gigabytes que se generan por las redes de datos.
El GBI (Beijing Genomics Institute) es uno de los centros más importantes en lo que a secuenciación de ADN humano se refiere, y para solucionar el problema de la transmisión de los datos generados está probando nuevas redes privadas de fibra óptica a 10 Gbps que les conectan con diferentes organizaciones científicas y educativas con las que habitualmente colaboran, como el National Science Foundation (NSF), la Universidad de Indiana o el National Center for Biotechnology Information (NCBI).
El resultado de las primeras demostraciones ha sido la transferencia de 24 GB de datos sobre genoma humano en menos de 30 segundos, lo cual ha resultado tan rápido que se han necesitado discos duros de alta velocidad y en configuraciones especiales para poder transmitir e ir almacenando los datos.
Los responsables del proyecto esperan que este tipo de redes puedan extenderse rápidamente entre instituciones científicas y educativas, rompiendo el actual cuello de botella que actualmente sufren este tipo de proyectos que necesitan mover descomunales cantidades de datos en poco tiempo.
Vía | Phys En Xataka On | LHC Computing Grid, así son las impresionantes redes de datos que permiten funcionar al Gran Colisionador de Hadrones