Una de las funciones más habituales de los relojes inteligentes es trackear nuestra actividad tanto en el día a día como practicando un deporte. Pero si el GPS no funciona correctamente, o bien nos quedaremos sin esa práctica función o será inútil si no registra las ubicaciones con la precisión esperada. Estas son las principales causas de error de GPS en los smartwatch y cómo puedes solucionarlas.
¿Por qué se desconecta el GPS?
El sistema de geoposicionamiento global (abreviada y de forma simplificada, GPS) integrado en relojes o móviles se vale de la conexión con el conjunto de satélites que se encuentran alrededor de la Tierra, logrando así conocer la ubicación moderadamente exacta mediante trilateración, localizando la latitud, longitud y altitud.
En la precisión del sistema de geolocalización o incluso en su funcionamiento pueden influir obstáculos como edificios altos, árboles o hasta las propias nubes.
En general, la antena GPS del smartwatch es menos potente que la del teléfono, lo que en la práctica se traduce en sufrir interferencias con la señal es más habitual, llegando incluso a que tengas problemas estando simplemente en interiores.
Del mismo modo, los modos de bajo consumo o ahorro de batería también pueden desactivar el GPS para estirar la autonomía del dispositivo.
Sal fuera y reinicia tu reloj
Si el GPS de tu reloj da problemas cuando estás en interiores, intenta probar esta función de nuevo en el exterior. Si aún así el GPS no se conecta de forma automática, apaga el dispositivo y vuélvelo a encender unos segundos después. Al completarse el reinicio, abre una aplicación de mapas para comprobar el estado.
Si el GPS del reloj da fallos cuando estás en interiores, puede que el entorno o el propio edificio sean los responsables. Lo bueno es que esta función está destinada para exteriores.
Vuelve a sincronizar reloj y teléfono
Aunque la mayoría de los relojes cuentan con su propio sistema de geolocalización independiente, también pueden recurrir las funciones del GPS del teléfono por su estabilidad y potencia cuando ambos dispositivos están conectados.
Si es el caso, puedes probar desactivando el Bluetooth de smartphone y reloj para volver a activarlo y que así recuperen la conexión o, de forma más drástica, desemparejar teléfono y reloj para volver a sincronizarlos.
Normalmente esto pasa por acudir a la sección del Bluetooth del teléfono y olvidar el reloj para, con el Bluetooth activado de ambos dispositivos, volver a conectarlos.
Usa otra aplicación que emplee GPS
Un error de concepción muy común es pensar que no funciona bien el GPS cuando quizás lo que falla es una aplicación concreta que emplea el sistema de geolocalización. Así que antes de ser tajante asumiendo que el fallo es del GPS, prueba con otras aplicaciones como MapMyRun o Strava.
Elijas la app que elijas, ábrela y entra al mapa o a la herramienta concreta de trackeo. Si tu localización aparece correctamente, sabrás que tu GPS está funcionando y que probablemente el fallo venga de la aplicación anterior. Si es este caso, buscar actualizaciones de esta app o borrarla y volverla a instalar puede solucionar el problema.
Actualiza el sistema operativo y la aplicación
Actualización del Samsung Galaxy Watch4. Imagen de u/Enjinr
Los errores a la hora de conectarse al GPS podrían deberse también a un fallo general detectado que ha sido arreglado o mejorado en posteriores actualizaciones, por eso una buena idea es buscar si existen actualizaciones disponibles e instalarlas.
Para buscar actualizaciones de la aplicación del reloj en tu teléfono tendrás que hacer prácticamente lo mismo que para cualquier otra app: en Android ir a 'Play Store' y pulsar sobre tu foto de perfil, ir a 'Gestionar apps y dispositivo' y allí en 'actualizaciones disponibles' descubrirás qué tienes pendiente. En iOS será necesario abrir la aplicación del Apple Watch y después tocar la pestaña Mi reloj. En 'General' encontrarás 'Actualización de software' y un globo rojo si hay actualizaciones pendientes.
Para buscar si hay actualizaciones del sistema para el reloj, normalmente tendremos que acudir a la sección de ajustes y allí buscar la sección de actualizaciones de software, que suele estar en Sistema o en General. Para este tipo de actualizaciones será necesario que tu reloj tenga suficiente batería o directamente, que esté conectado a la corriente. En cualquier caso y en general, es una buena práctica tener configuradas las actualizaciones automáticas.
Si usas una correa de metal, retírala
Uno de los puntos fuertes de los relojes inteligentes es que personalizando la esfera y la correa resulta muy fácil ajustar su diseño a tu estilo. Sin embargo, podría darse la situación en la que una correa de metal fuera la causa de tus problemas con el GPS.
El instrumental GPS de teléfonos y relojes viene cuidadosamente calibrado de fábrica, pero colocar una pieza grande metal demasiado cerca de esta pieza puede interferir con su señal. Así que la solución puede ser de lo más sencilla: primero prueba retirando la correa y reinicia el reloj para comprobar si funciona el GPS y si es el caso, entonces necesitarás otra correa.
Si deseas imperiosamente colocarle una correa de metal, mejor apostar por un modelo oficial, que seguramente habrán probado este aspecto a conciencia para garantizar que no hay interferencias.
Restaura de fábrica tu reloj
Si todo lo anterior sigue sin resolver tus problemas con el GPS, entonces es momento de restaurar de fábrica tu smartwatch por si hubiera algún ajuste o aplicación bloqueando la conexión GPS de alguna manera e ir probando una por una resulta tedioso y complejo.
La restauración de fábrica varía en función del dispositivo, pero debería existir esta opción tanto en el reloj como en la aplicación instalada en tu teléfono. Así, por ejemplo para resetear el Apple Watch tendremos que ir a 'Ajustes' > 'General' > 'Restablecer' y allí tocar sobre 'Borrar contenidos y ajustes'. Después de resetear tu smartwatch, comenzarás desde cero y este potencial error de software debería haberse solucionado.
Portada | Foto de Marita Kavelashvili en Unsplash y Samsung
En Xataka Móvil | GPS, Galileo, GLONASS y BeiDou: qué son y en qué se diferencian
