Hace unos meses debatíamos sobre cómo afectaría a nuestras vidas la posibilidad de descargar representaciones de objetos físicos desde Internet, que posteriormente pudiésemos reconstruir mediante impresoras 3D.
Cualquier objeto del mundo real podría ser replicado con mayor o menor detalle en una de estas impresoras, acercando a nuestras casas todo un nuevo universo de copias en tres dimensiones. Un pedacito de este nuevo universo lo tenemos en la distribución de obras de arte, de esculturas famosas que ahora es posible descargar desde la Red e imprimir tranquilamente en casa, aunque de momento a tamaño reducido y en materiales menos nobles que el mármol.
A finales de mayo, la comunidad de MakerBot (empresa que se dedica entre otras cosas a vender sistemas de impresión en 3D) llegó a un acuerdo con el Metropolitan Museum of Art de Nueva York (MET) para comprobar el potencial de las tecnologías de escaneado y posterior replicación en 3D de algunas de sus obras escultóricas.
Días después, un equipo de artistas se pasó por el museo escaneando algunas de sus obras de arte más populares, que posteriormente fueron retocadas a mano usando Autodesk 123D Catch para pulir pequeños detalles e imperfecciones. El resultado del proceso es que han empezado a colgar en la web Thingiverse (en donde podemos encontrar decenas de objetos para descargar) los frutos de su trabajo, comenzando por "La Náyade reclinada" de Antonio Canova.
El archivo digital ocupa poco más de 60 megas, por lo que el tamaño no debería ser ningún problema a la hora de distribuir este tipos de contenidos por Internet. El principal inconveniente lo encontramos en la tecnología de impresión, aún en fase embrionaria, que no está al alcance de todo el mundo y que no dispone todavía de formatos o aplicaciones estandarizadas.
Aún así, el futuro de este tipo de "descargas físicas" me parece más que prometedor, sobre todo por la aparente sencillez con la que podríamos llegar a fabricar pequeños objetos y repuestos para nuestros hogares.
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