Me voy de viaje a China. Así he preparado mi móvil: roaming, datos, VPN y más

Esta ha sido mi experiencia para exprimir al máximo mi teléfono, navegar dónde y cuándo lo necesito y no llevarme sustos en la factura

Estoy moderadamente acostumbrada a viajar por Europa, pero esta vez me ha tocado visitar China, lo que supone un viaje largo y tener que preparar a fondo mi teléfono para seguir disfrutando de sus datos, mapas para no perderme y más sin miedo a que me llegue una factura importante: estos los preparativos que he hecho en mi móvil.

Antecedentes. Soy cliente de Vodafone y la teleco recientemente comprada por Zegona divide los diferentes países del mundo varias zonas y aunque hay algunos países que vienen "de serie" con mi tarifa de datos (los de la zona 1), no es el caso de China, que pertenece a los países de la Zona 2. Bajo estas líneas, el precio de mis llamadas, videollamadas y SMS si se me ocurriera hacerlas tal cual desde el país asiático o, alternativamente, la opción tarifas de Viaje Mundo por 15 euros/día. 

Este es mi caso, para China y para la teleco de la que soy cliente, pero en tu caso te recomiendo googlear algo como  "país destino + roaming + tu teleoperadora", por ejemplo "China roaming Vodafone" para llegar a una web informativa similar que nos lleva a una conclusión: cuando el roaming no es gratis (no viene incluido), sale bastante caro.

Lo primero: el roaming

Lo anterior se conoce como roaming o itinerancia de datos y cuando es gratis supone que te estás conectando a internet con otra red diferente a la de tu teleco, pero que gracias a acuerdos entre empresas de telecomunicaciones, no te cuesta dinero. Vamos, el roaming gratis. Si el roaming no es gratis como me pasó a mí con Vodafone, lo suyo para evitar sorpresas en la factura es desactivar  la itinerancia de datos.

¿Cómo desactivar el roaming? Hay dos vías de hacerlo y en caso de duda, yo recomiendo y hago ambas: la primera es desde el operador actuando sobre la línea y la segunda, desde tu teléfono.  Así, entré en la app de Vodafone y en la sección de roaming, procedí a desmarcar los toggles.

Y ahora nos vamos al teléfono. El camino en iOS y en Android el camino no difiere demasiado:

  • En iOS: 'Ajustes' > 'Datos móviles' > ' Opciones' y desmarcamos 'Itinerancia de datos'.
  • En Android: 'Ajustes' > 'Redes móviles' > 'Uso de datos' > 'Itinerancia de datos' (el camino puede variar en función del fabricante.

Dos consejos importantes si viajas sin roaming

Con el roaming desactivado, solo podremos disfrutar de internet cuando estemos con Wi-Fi, algo que puede darse o bien en el hotel o en edificios públicos o locales de restauración.

Para un viaje de vacaciones, el Wi-Fi puede ser más que suficiente, pero en ese caso tengo un par de recomendaciones importantes:

  • La primera es descargar los mapas de la zona en Google Maps antes de irte de viaje, lo que te permitirá usar el navegador incluso aunque no tengas datos. Para ello entra en la aplicación de Maps, toca sobre la foto de perfil y entra en 'Mapas sin conexión'. Allí entra en selecciona tu propio mapa y, cuando tengas una una buena conexión, proceder a descargarla.
  • La segunda es descargar el idioma en la aplicación de Google Translate, simplemente entrando en la aplicación, tocando sobre tu foto de perfil de la esquina superior derecha y en 'Idiomas descargados', seleccionar el del país al que viajas.

Ambas cosas las hice un par de días antes de salir de casa, eligiendo Shenzhen (ronda los 100 MB) y el idioma chino simplificado. De ese modo, incluso aun sin conexión a internet me he llevado el móvil para orientarme y mantener alguna conversación con las gentes de allí.


Necesito internet: SIM y VPN

Pero mi viaje no fue de placer, sino profesional, por lo que estar sin internet en mi día a día no era una opción. Aquí hay varias opciones en forma de tarjetas SIM que pueden valer para usar datos durante la estancia en el extranjero aunque por comodidad y porque mi teléfono lo permite (aunque también puedes usarla en un móvil que no la admita con este truco), opté por una tarjeta eSIM, es decir, sin formato físico. Así, pude comprarla en cualquier momento sin tener que  ir a una tienda física, instalarla y activarla en menos de cinco minutos.

Esto implica por ejemplo poderla comprar en cualquier momento o lugar, por ejemplo, una vez ya estás en el destino y decides que la necesitas (eso sí, cuando tengas conexión, por ejemplo en el Wi-Fi). Como no tenía muy claro cómo iba a ser el día a día allí, la compré días antes y la instalé directamente con un código QR, aunque  el procedimiento suele venir bastante bien detallado y básicamente consiste en elegir esa tarjeta virtual para los datos móviles en los ajustes y volver a activar la itinerancia de datos.

Estoy hablando de una eSIM internacional como puede ser TravelSIM, MiSimCard o Holafly, que fue la que elegí. Durante la compra especifiqué que el destino y la duración, más que suficiente para cubrir mi viaje y un uso ilimitado "responsable". Así, no permitía el tethering ni las llamadas a la vieja usanza, pero sí con datos, por ejemplo a través de WhatsApp.

Que sea específica para China tenía un as en la manga: venía con VPN incluido, lo que me permite entrar a aplicaciones que uso en mi día a día censuradas. En caso contrario, tendría que haber usado una combinación de tarjeta SIM y un VPN para mi móvil. Ojo, en caso de habernos quedado en el apartado anterior, recurriendo al Wi-Fi para internet, el VPN habría sido una buena idea igualmente para esquivar los bloqueos.

Portada | Montaje con mockuphone y Foto de Lian Rodriguez en Pexels

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