En más de una ocasión nos hemos quejado de lo que ocurre cuando los legisladores desconocen el mundillo de la tecnología en general y de Internet en particular, pero es que hay veces que parece que lo hacen a propósito. La última idea descabellada nos llega desde el Parlamento Europeo no tiene precio: uno de sus eurodiputados italianos, Tiziano Motti, quiere que los ordenadores personales incluyan una especie de “caja negra” que registre toda la actividad que los usuarios realizan online.
Se excusa en, cómo no, la seguridad, ya que de esta forma si se suben fotografías delictivas a la red podría saberse perfectamente quién las ha subido, ya que todo quedaría registrado. Así, y siempre según su versión, se acabaría el problema existente en la actualidad después de que la asociación entre IP y persona dueña de la conexión cada vez sea admitida por menos jueces (inseguridad de las redes, varias personas compartiendo una conexión, etc).
Dejando de lado la cantidad de problemas de privacidad que esto puede acarrear (aunque ellos insisten en que no es su objetivo monitorizar el tráfico), sigue sin ser algo eficaz: ¿qué ocurrirá con los lugares que ofrecen equipos y conexión a todo el mundo, como bibliotecas o cibercafés? Hoy en día hay multitud de dispositivos que se conectan a Internet, ¿de verdad vamos a tener que instalar este software en móviles, tablets y electrodomésticos?
Sea como fuere, parece que la propuesta es demasiado “tonta” como para ser tomada en serio. Uno de los eurodiputados suecos literalmente la califica como tal y dice, con bastante criterio, que si llega a proponerse esto mismo en China o Corea del Norte, la Unión Europea estaría tirándose de los pelos. Por suerte, esta iniciativa parece tener poco futuro.
Vía | Active Politic, Europa Portalen
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