Una de esas nuevas funcionalidades que no se dijeron en la presentación de iOS 8 tiene bastante que contar. Hace uso del coprocesador M7 y tiene como destino mejorar la localización en interiores, generalmente bastante olvidada y con mucho margen de mejora.
En iOS 8 se han encontrado nuevas API que permiten que los iPhone vayan monitorizando todos sus movimientos a través del coprocesador M7, disponible en el Apple A7 del iPhone 5S, y que procesando toda esa información ayudan a mejorar la localización en interiores. A través de ciertos algoritmos en interiores y conociendo un punto de partida (inicial, dotado por GPS), y conociendo también los movimientos realizados por el usuario, se pueden determinar qué caminos existen dentro de un edificio con pequeño margen de error, independientemente de la existencia de otras posibilidades (GPS, WiFi, antenas) para localizarse.
Sin duda alguna una buena noticia, aunque nos queda la duda de si Apple desarrollará algún mecanismo de geolocalización en interiores por su propia cuenta, o si simplemente pondrá todas estas herramientas a disposición de los desarrolladores para que sean ellos quienes continúen el camino. El coprocesador M7, que a priori parecía una novedad sin mayor importancia, puede ganar importancia con iOS 8 y estas novedades 'ocultas'.
Por supuesto, iOS 8 es aún una beta y apenas acaba de publicarse, con lo que todo puede cambiar enormemente hasta su versión final prevista dentro de unos cuantos meses. Buenas noticias, igualmente, para empezar a solucionar uno de los grandes problemas de los sistemas de geolocalización actuales, como es la localización en interiores.
Vía | TechCrunch
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