Hasta ahora las pastillas más tecnológicas que yo conocía eran las de Neo, la roja o la azul, pero investigadores de la Universidad holandesa de Radboud han conseguido superarlas ampliamente. En concreto han realizado un experimento en el que varios corredores voluntarios tenían su temperatura corporal monitorizada mediante la ingestión de una pastilla con radiofrecuencias RFID.
La marcha de Nijmegen, que comenzó siendo un ejercicio militar, tiene lugar a mediados del mes de Julio y sus participantes recorren entre 30 y 50 kilómetros cada día. Actualmente participan en este evento unas 40.000 personas, pero tras dos fallecidos en el 2006 y casi 70 personas atendidas por agotamientos o excesos de calor, se empezó a pensar en alguna forma de controlar la salud de los corredores. La respuesta ha sido la creación de un sistema que combina un sensor de calor en forma de píldora y un móvil con GPS y bluetooth.
Los voluntarios ingieren estas tecno-pastillas que envían cada diez segundos la temperatura interna del cuerpo hasta el teléfono móvil mediante bluetooth. Esta información y las coordenadas GPS del corredor son mandadas de forma automática por el móvil hasta el centro de control, donde un programa toma en cuenta la altura, peso y edad del deportista para alertar a los equipos médicos en caso de que sea necesario. De esta manera se han podido detectar variaciones en la temperatura de incluso medio grado, alertar, por ejemplo, a un corredor con riesgo de deshidratación mediante una llamada o SMS, o enviar una ambulancia al lugar necesario antes de que fuese solicitada.
Creo que son este tipo de avances los que convierten los móviles en "teléfonos inteligentes", cuando se aprovechan las características en las que superan a los ordenadores. Quizá en unos años estas píldoras RFID podrán servir para otros muchos usos: tele-diagnóstico, medicación monitorizada, etc., podrían ser realidad muy pronto.
Vía | RFID Update Mas información | HQ Inc