Hoy en día la potencia que tienen nuestros smartphones y tablets los convierten en una herramienta que nos pueden hacer prescindir casi por completo de nuestro ordenador en un entorno doméstico e incluso, en un entorno empresarial. Sólo se necesitan unos cuantos complementos para ser más productivos con el smartphone o la tablet y prescindir del portátil.
Se trata un poco de hacer de nuestro smartphone un transformer, que ahora se convierte en un portátil con un par de añadidos. Hoy en día es más o menos sencillo y fácil de implementar, lo único que debemos considerar es si nos es práctico llevar determinados accesorios encima para evitar cargar con el peso del portátil.
En el caso de las tablets, sobre todo las de mayor tamaño vamos a necesitar menos accesorios ya que por el tamaño de su pantalla, entre 8 y 10" nos servirán a la perfección para sustituir a los portátiles con poco más que añadir un teclado para no usar el táctil de la propia pantalla.
El teclado Bluetooth
Lo primero que vamos a necesitar por lo tanto es un teclado Bluetooth, tanto para la tablet como para el smartphone. Esto nos permite teclear y crear contenidos con mayor rapidez. Aquí conviene distinguir, puesto que mientras que en el caso de la tablet puede ser más compacto y cercano en diseño a lo que sería un teclado de portátil. Más interesante si incluye touchpad para no tener que utilizar la pantalla táctil, aunque esta siempre estará a mano.
En el caso del smartphone puede ser diferente lo que vamos a necesitar. Quizás un teclado más cercano a lo que podría ser un ordenador de sobremesa nos serviría a la perfección siempre que incorpore touchpad en el caso de utilizar la tecnología Bluetooth para la conexión. Hay modelos muy compactos que son muy fáciles de transportar.
La otra opción es prescindir de llevarlo con nosotros y aprovechar la tecnología OTG para a través de un cable y un hub USB conectar un teclado y ratón USB que podemos tener en cualquier lugar, ya sea en nuestra casa o nos pueden prestar en el lugar donde vamos y tenemos que ponernos a trabajar. Es una opción muy cómoda puesto que sólo llevamos con nosotros un pequeño cable extra. También puede ser una buena solución en el caso de los tablets.
Una pantalla externa de mayor tamaño
Si lo que necesitamos es conectarnos a una pantalla externa de mayor tamaño, en este caso lo ideal es utilizar un adaptador de MHL a HDMI que nos permitirá conectar el smartphone o la tablet a una pantalla de mayor tamaño. De esta forma nuestro teléfono se convertiría en un pequeño ordenador si lo complementamos con el teclado con touchpad mediante Bluetooth.
Lógicamente no podemos llevar una pantalla con nosotros, pero es una solución muy buena si sabemos que vamos a disponer de una pantalla de estas características allí donde vamos. Una televisión en torno a las 24 o 26" nos puede servir a la perfección, pero llegado el caso también podemos trabajar en pantallas más grandes.
Hay que tener en cuenta que la resolución de pantalla de smartphones y tablets de hoy en día nos permitirán hacerlo sin ningún tipo de problemas. El estándar MHL 3.0 soporta 4K, que permitirá ver vídeos con una resolución de 3820 x 2160 a 30 frames por segundo. De esta forma ya nos hemos montado nuestro pequeño puesto de trabajo para ponernos manos a la obra.
El cargador para no quedarnos a mitad de trabajo
Si hemos transformado nuestro equipo probablemente no sea sólo para ponernos cinco minutos a trabajar, sino que nos espera un buen rato. En este caso tener el cargador a mano puede ser una buena idea. Tener el cargador a mano será una buena idea, sobre todo en el caso de los tablets con teclados conectados por Bluetooth.
Con nuestro teléfono si lo hemos conectado al televisor mediante un cable MHL 3.0, además de transmitir vídeo con soporte a 4K, también tiene un canal de datos simultáneo de alta velocidad, que conectará ambos aparatos a 6Gbps y un canal de carga a 10W, por lo que el smartphone se recarga a través de la corriente de la televisión, evitando quedarnos sin batería durante una sesión larga de trabajo.
¿Me basta con las apps que tengo en el smartphone o la tablet?
Lo cierto es que hoy en día tenemos apps en el smartphone para suplir casi cualquier necesidad que tengamos a nivel laboral. Si estamos acostumbrados a trabajar con programas online no tendremos ningún problema, y quizás lo único que tendríamos que hacer es activar la opción de pedir siempre la versión de escritorio en el navegador del teléfono o la tablet. De esta forma nos cargará las páginas como si estuviéramos delante de un ordenador.
Pero a veces se necesita alguna aplicación específica que tenemos en el ordenador de casa o del trabajo, o simplemente preferimos tener el entorno de escritorio que ya conocemos y en el que nos vamos a mover más rápido. En estos casos el smartphone o la tablet son el medio perfecto para conectarnos a un equipo de forma remota.
Si lo que necesitamos es conectarnos al ordenador del trabajo tenemos soluciones que nos pueden ayudar para tener el entorno que necesitamos y ponernos a trabajar casi como si estuviéramos delante de nuestro escritorio habitual. De esta forma no vamos a echar nada de menos y lo único que necesitamos es una buena conexión a Internet para no sufrir lag o retardos.
