Estamos a finales de mayo y se acercan las vacaciones. Algunos las cogeréis en junio, otros en julio o agosto, no importa. Lo que importa es que debemos cuidar de nuestro bolsillo y más en vacaciones, sobre todo si viajamos a otro país.
En nuestro caso queremos daros unos pequeños consejos para ahorrar con el móvil que no por sencillos dejan de tener su importancia. No hay grandes secretos aquí, básicamente se trata de tener muy claro que el móvil, cuando salimos de nuestro país, se transforma en un dispositivo distinto al que nos acompaña a diario.
¿Tiene que estar el móvil encendido siempre?
Creo que es una pregunta que conviene hacerse cuando nos vamos de vacaciones. Se supone que queremos desconectar unos días de toda la rutina que nos domina en el día a día, sobre todo si usamos el móvil de forma intensiva a nivel laboral, así que ¿es necesario que llevemos el móvil encendido en todo momento durante nuestras vacaciones? No, no es necesario. Llevándolo apagado evitaremos esos actos reflejos de ir a mirar qué ha puesto quién en Twitter o contestar sin pensar a la primera llamada que nos llegue.
El roaming
Si optamos por no apagarlo, o por encenderlo de vez en cuando para consultar alguna cosa, es importante tener claro que mientras estamos fuera de nuestro país las tarifas que se aplican son las de roaming, la cuales son sensiblemente más elevadas que las nacionales.
Desde el verano de 2012, los precios de este tipo de tarifas en roaming a nivel europeo fueron ajustados con respecto a la normativa anterior y se pusieron algunos límites, pero en todo caso conviene informarse a través de nuestra operadora de dichos precios. En algunos casos, además, es posible que tengamos que pedir que nos activen el roaming antes de salir de vacaciones. Tanto la navegación por Internet como las llamadas cuestan más si estamos fuera de nuestro país, así que asegurémonos bien de los detalles de cada tarifa (son distintas si estamos dentro de la comunidad europea o fuera) y hagamos cálculos para evitar sorpresas.
¿Y si recibimos llamadas?
Si recibimos llamadas mientras estamos en el extranjero tenemos que tener claro que nos va a tocar pagar. Es importante conocer también las tarifas que nos va a aplicar nuestra operadora al recibir llamadas. Lo mejor en estos casos es prevenir. Es decir, antes de irnos de vacaciones podemos hablar con aquellas personas (familiares, amigos, etc.) con las que normalmente nos comunicamos y que más opciones tengan de llamarnos para dejarles claro que, a no ser que se trate de alguna emergencia, no lo hagan.
Aprovechemos los puntos WiFi
Esto va relacionado directamente con todo lo que hemos comentado en los anteriores puntos. Es decir, si vamos a salir a callejear no necesitamos llevar el móvil encendido, ni usarlo de GPS, ni historias, todavía existen los mapas en papel, pero antes de salir del hotel, por ejemplo, sí podemos echarle un vistazo a nuestra aplicación preferida de mapas para hacernos una idea de cómo es la zona. En los hoteles suelen ofrecer conexión WiFi gratuita, ideal para que podamos conectar el móvil y realizar aquellas tareas que necesiten de conexión de datos sin tener que pasar por las tarifas internacionales.
En el caso de la recepción de llamadas, como comentábamos en el punto anterior, lo que podemos hacer es no cogerlas en el momento y buscar algún sitio desde el que podamos conectarnos a Internet vía WiFi. De esta forma podremos comunicarnos con quien nos llama por otros canales: WhatsApp, Skype, correo electrónico, etc.
Ojo, si es una emergencia, como también hemos dicho más arriba, pues se contesta y no pasa nada. La idea aquí es tener claro lo que hay para evitar sorpresas, nada más.
En resumen
El secreto al salir de vacaciones es disponer de toda la información en nuestras manos, hacer cálculos y prevenir. A partir de ahí el uso que le demos al móvil ya dependerá de nosotros, pero sabremos en todo momento a qué atenernos cuando nos llegue la factura.
Esperamos que os puedan ser de utilidad estos consejos.
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