Los tiempos cambian y la fotografía llega al bolsillo de todos los usuarios. Las cámaras digitales, según parece, están siendo sustituidas por smartphones como el Sony Xperia™ Z, que dan un gran resultado. En concreto, este dispositivo inteligente cuenta con el apartado "Efectos de imagen", donde encontramos nueve efectos para aplicar a nuestras imágenes.
Sin embargo, podemos enriquecer los filtros que tenemos en nuestro Xperia™ Z con las mejores herramientas posibles que nos facilitarán el trabajo y nos ayudarán a conseguir las mejores fotografías. De entre toda la gama de app que podemos elegir, destacamos tres y las analizamos: Camera360 Ultimate, Cymera y AfterFocus.
Camera360 Ultimate, la app de los mil efectos
Se puede considerar, de entre todas, de las mejores aplicaciones de cámara, pues nos puede incluso hacer olvidar la cámara nativa del dispositivo. En primer lugar, se puede decir sin dudar que es muy completa ya que disponer de una gran cantidad de posibilidades que ofrece en cuanto a efectos y acabados digitales, incluyendo todo lo que está de moda como HDR, lomo, color cut-out, tilf-shift, efectos de película blanco y negro.
Eso sí, no se limita a los más conocidos, y siempre te ofrece la posibilidad de poder hacer la foto original sin aditivos añadidos. Además de los efectos mencionados anteriormente cuenta con estabilizador, multiexposición y mosaico, ráfaga, guías de composición en pantalla, geolocalización, diferentes modos de enfoque automáticos y manual e incluso detección de rostros, luz de relleno, zoom digital en toma, modo silencioso, control de flash, y mucho más. No le falta nada.
Si una vez que tomas la foto quieres rotarla o incluso compartirla con tus amigos por redes sociales, cuentas con el panel “share box”. Por lo general, las críticas son excelentes en relación a la aplicación, siendo de las mejores dentro de su gama. Si lo deseas, puedes descargarla de manera gratuita en Google Play.
Cymera, la app de los "ojos grandes"
Si algo destaca en la app Cymera es su interfaz: muy intuitiva. Esto permite que tengamos de forma continua ayuda contextual. Solo así podremos elegir el modo adecuado y hacer los retoques que consideremos necesarios. Ahora bien, cuando abrimos la app nos pide que nos logueemos con una cuenta "Cyworld", algo que puede echar para atrás al usuario. Sin embargo, se puede acceder sin este logueo previo, accediendo a la aplicación sin más.
Cuando accedemos, vemos el menú principal con la cámara ya funcionando y los distintos modos alrededor de la pantalla. Hay varios, además del normal: el timer (foto con cuenta atrás), el anti-shake (para los temblores a la hora de tomar la foto) y el touch shots, para disparar fotos cuando toquemos la pantalla. Podemos activar la cámara frontal si disponemos de ella, activar o desactivar flash y establecer el área de enfoque de la cámara.
Por tanto, Cymera también destaca no solo por los filtros que ofrece después de hacer la foto, sino también antes de tomarla. Si nos fijamos en los filtros una vez tomada la foto, cabe destacar, además de los filtros de siempre, la posibilidad de poner pegatinas en las imágenes para decorarlas e incluso el efecto de "ojos grandes", que queda genial gracias al reconocimiento facial. Si lo deseas, puedes descargarte Cymera de manera gratuita en Google Play.
AfterFocus, poniendo el foco
De las tres aplicaciones para tomar fotografías, ésta es la menos conocida. Si algo la define es que nos permite jugar con el desenfoque, que es la clave de esta app. Y es que podemos definir qué partes de la imagen estarán enfocadas y qué zonas desenfocadas en su totalidad. ¿Esto qué nos ofrece? Pues simular la poca profundidad de campo de un buen equipo fotográfico de una manera bastante creíble y sobre todo, y más importante, de una forma personalizada.
El trabajo de este enfoque-desenfoque se hace a través de las máscaras, que se generan realizando un sencillo trazo alrededor de la zona que queremos enfocar frente a la que queremos que se mantenga difuminada. Todo depende, como no, de la fotografía que queramos modificar, pues cuantos más planos existan, más complicado será establecer las máscaras en la propia fotografía.
Lo más importante es la capacidad de definir los distintos grados de desenfoque, puesto que la fotografía no se limita solo al enfoque-desenfoque, sino que hay una gama intermedia, pudiendo definir dicho grado, e incluso el tipo (gaussiano o de movimiento), y hasta la forma del diafragma que queremos simular. Y al igual que Cymera, dispone de los llamados "filtros creativos", algunos muy interesantes, tales como el filtro de estrellas en el fondo o el viñeteo. Si quieres probar esta app, ya lo puedes hacer descargándola desde Google Play.
Si algo demuestran cada una de estas aplicaciones es que hacer una fotografía nunca había sido tan divertido, en especial para los que no son profesionales. Ahora, queremos no solo hacer una foto, sino que queremos aplicarle mejoras de brillo, tono y contraste o personalizadas hasta retoques, montajes fotográficos, añadidos de imágenes, e incluso conseguir difuminar alguna zona para conseguir profundidad. Y finalmente, como no publicarla en alguna red social. De las tres propuestas, ¿con cuál te quedas?
Imagen | mnvcollections.com
Ver 1 comentarios