La trágica noticia de mediados de semana ya ha reposado, todos somos conscientes de que, pese a lo inverosímil que hubiera resultado hace un mes, el Mobile World Congress de Barcelona 2020 ha sido cancelado. No se celebrará de nuevo hasta el año que viene y deja en el aire una notable cantidad de incógnitas, desde cómo asumirán los organizadores las incontables pérdidas que arrastrará la cancelación a cómo harán frente los próximos eventos a la onda expansiva que ha generado el coronavirus Covid-19.
Durante la escalada de ausencias a la que asistimos los días previos a la cancelación del MWC 2020 fueron muchos los rumores que rodearon las decisiones de las empresas. LG fue la que abrió la veda con un anuncio por sorpresa que produjo un efecto 'bola de nieve'. El goteo de comunicados terminó en varias bajas diarias, algunas tan importantes como Ericsson, Nokia, Intel, Vodafone o Deutsche Telekom; hasta que la GSMA no tuvo más remedio que claudicar. Detrás de la decisión, tal y como declaró John Hoffman, presidente de la empresa que organiza el congreso, se encontraba la "preocupación global con respecto al brote de coronavirus, preocupación por los viajes y otras circunstancias".
En la declaración oficial con motivo de la cancelación del congreso la GSMA deja en el aire multitud de cuestiones, sobre todo en lo que se refiere a esas "otras circunstancias" que llevaron a la organización a echar el cierre anticipado. Y, pese que pueda existir cierta creencia de que en el Mobile World Congress ya no se celebran presentaciones sonadas de producto, la realidad lo niega. Basta con analizar los últimos años.
Las grandes marcas se aprovechan del MWC
Resulta difícil hacerse una idea del volumen de personas que transita por los pabellones de la Fira de Barcelona si no se ha asistido alguna vez al evento: caminar por sus pasillos puede ser tan difícil como llegar a primera fila de un concierto abarrotado partiendo desde la otra punta. En el MWC siempre hay gente. Mucha. Sobre todo los dos primeros días del congreso. Con esto en mente, y debido a la posibilidad de contagio masivo con el que amenazaba el coronavirus, resulta lógico que la preocupación existiera. Ahora bien, no es tan lógico que las empresas que cancelaran tuvieran otros motivos aparte de los sanitarios.
Al MWC no solo se viene a presentar los nuevos productos y a afianzar el catálogo de los ya asistentes: como ocurre en todo congreso, lo importante de verdad es la enorme cantidad de contactos que se generan. Entre las empresas y otras empresas, empresas y clientes, entre los periodistas y las empresas e, incluso, entre los propios periodistas: no hay otro lugar del mundo que facilite el conocimiento tecnológico a tal magnitud. Lo sé bien ya que llevo asistiendo más de diez años al Mobile World Congress de Barcelona.
Pese a que marcas como LG o Amazon no tuvieran aparente interés en asistir al MWC (la primera porque no parecía planear la renovación de sus teléfonos y la segunda porque no está directamente relacionada con los móviles), eso no implica que anunciar su ausencia fuera motivo de publicidad, tal y como se llegó a decir los días antes de la cancelación. Es cierto que el volumen de presentaciones en el MWC ha ido decreciendo con el paso de los años, pero eso no ha hecho mella ni en los asistentes ni en el número de empresas participantes. Todo lo contrario, el crecimiento del congreso ha sido constante y elevado, tanto en afluencia de público como de marcas.
Tomando como fuente a Statista, una firma de analítica especialista en el procesado de datos, podemos observar el enorme crecimiento del MWC a lo largo de los años. Por ejemplo, el ascenso en el número de asistentes.
A la gráfica le faltan los datos de los años posteriores a 2016. Según los datos provistos por la propia GSMA, serían los siguientes:
- 2017: 108.000 asistentes.
- 2018: 107.000 asistentes.
- 2019: 109.000 asistentes.
Por poner en perspectiva, la GSMA esperaba reunir en el Mobile World Congress de 2020 más de 110.000 asistentes. Este enorme agujero en la afluencia que ha provocado la cancelación afectará de forma grave a la economía. Podemos observar la progresión del aporte económico del certamen a la ciudad de Barcelona gracias a Statista.
Pero ¿todo lo anterior repercutió en el interés de las empresas por asistir al mayor congreso de móviles del mundo? Echemos un vistazo a la evolución del número de empresas expositoras en el MWC (vía Statista).
Como podemos apreciar, y pese a que se exista la creencia de que el volumen de presentaciones ha ido decreciendo, junto con el interés de las marcas en el MWC, lo cierto es que ha resultado ser lo contrario: Barcelona ha ganado un enorme poder de convocatoria. Y solo hay que bucear en los últimos años para descubrir la gran cantidad de productos desvelada durante los días del MWC en Barcelona, también durante las jornadas previas al inicio de la feria. Nokia 9, 3, 5, nuevo Nokia 3310, Samsung Galaxy S9, Galaxy S7, Galaxy S6, Huawei P10, Mate X, LG G8, G7, G6, Sony Xperia 1, Xperia XZ2, XZ2 Compact...
La lista de móviles reconocibles y de marcas importantes sería eterna, señal de que a los fabricantes les importa, y mucho, el Mobile World Congress. No en vano, todos los medios tecnológicos acudimos a Barcelona durante esos días; por lo que les resulta sencillo captar nuestra atención y enseñarnos en persona todo su catálogo. Sí, sobresalir es complicado dada la exagerada competencia, pero no hay un altavoz igual para presentar los últimos productos. Y esto es especialmente notorio en el caso de las marcas pequeñas.
Para las marcas pequeñas el MWC es su única opción
El Mobile World Congress llena los ocho pabellones de la Fira Gran Vía, sus 240.000 metros cuadrados disponibles(y hasta 400.000 cuadrados con ferias paralelas, como el 4YFN, también cancelado por el coconavirus). Estos pabellones están conectados por pasillos mientras poseen zonas abiertas entre ellos; que también aprovechan las empresas para exponer sus productos y ofrecer recintos cerrados para reuniones. De entre toda la extensión disponible hay una zona principal que aglutina la exposición de los fabricantes principales, los Hall 4 y 5. Tradicionalmente ocupados por Samsung, Huawei, ZTE, Qualcomm, Intel, Nokia, Motorola, LG y una larga retahíla de marcas reconocidas, es también la zona que acapara más miradas y actualidad. No obstante, es una porción minúscula del congreso.
Quizá las marcas grandes no necesiten en gran medida la publicidad que ofrece el MWC ya que suelen tener sus propios eventos (por más que sí utilicen el altavoz mediático), pero no ocurre lo mismo con las empresas más pequeñas: estas aprovechan el congreso para anunciar sus nuevos productos y ofrecer la oportunidad de que todos los asistentes los prueben. También hacen uso de la cobertura mediática para generar conocimiento de marca en el mercado occidental, así pudimos conocer los productos de Vivo antes de que la marca adquiriese popularidad fuera de China; igual que otros fabricantes menores de aquel país, como Gionee o Meizu en su momento. Y si nos fijamos en otras marcas aún menores, el número de fabricantes de móviles sería casi incontable, igual que las empresas de accesorios o de redes.
La cancelación del MWC supone una enorme pérdida para las empresas de mediano y pequeño tamaño, y no solo por perder la opción de comunicar sus productos: carecer de un entorno apropiado para establecer contactos con clientes y proveedores es su mayor frustración. Tal y como relata Javier Lacort en Xataka, y después de consultar diversas empresas que habían planeado su asistencia al WMC 2020 de Barcelona, todas relatan que las pérdidas (por lo general más de 4.000 euros invertidos en el stand, viajes y material de marketing) son lo de menos: lo más importante es el retorno que les aportaba la presencia en un congreso mundial.
Las presentaciones también se cancelan
Una de las últimas dudas que nos quedaban está disipándose: las marcas que iban a utilizar el MWC para presentar novedades, incluso fuera del congreso, han cancelado sus eventos en Barcelona. Sony hará un lanzamiento por streaming, igual que Realme. OPPO iba a presentar los Find X2, pero ha pospuesto el evento a alguna fecha de marzo. Xiaomi pensaba lanzar los Xiaomi Mi 10 de manera internacional, igual que Honor con su Honor View 30; intenciones que ambas empresas han cancelado. También está cancelada la presentación de los nuevos móviles de HMD Global (Nokia) y los de Wiko, dos marcas que pensaban utilizar el marco del MWC para popularizar su catálogo. Y hay otra víctima directa: Samsung. Pese a que dio a conocer sus nuevos productos el 11 de febrero, la marca pensaba aprovechar su enorme stand en el congreso para ofrecer a asistentes y periodistas una toma de contacto anticipada con los Samsung Galaxy S20 y Samsung Galaxy Z Flip.
El MWC continúa teniendo tirón para las grandes presentaciones, solo hay que echar un vistazo a los años anteriores y a todos los smartphones que anticipaban su puesta en circulación a finales de febrero de 2020. Pero todo es ya historia: toca borrar el año y esperar a 2021 para el siguiente congreso. Veremos si el MWC logra reponerse de la herida.
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