Intelligent Energy es un fabricante y desarrollador relacionado con los sistemas energéticos y los dispositivos electrónicos. Entre su catálogo de productos tienen unas cuantas tecnologías para ser integradas en vehículos, ordenadores o, en general, cacharros domésticos. Y, además, un pequeño departamento de I+D del que nace su última investigación: poner una pila de hidrógeno a un smartphone.
El teléfono de pruebas ha sido un iPhone 6 al que le han modificado la batería (una Li-Po de 6.9 Wh., 1.810 mAh.) reemplazándola por una pequeña pila de hidrógeno diseñada y fabricada específicamente para el teléfono de Apple, y que no altera ni modifica su forma o tamaño. Los resultados, sorprendentes: hasta una semana de autonomía con una única carga.
La compañía está investigando la forma de llevar esta tecnología al mercado, ya que no es tan sencillo como reemplazar físicamente la batería por un depósito. El funcionamiento de las pilas de hidrógeno en smartphones sería similar a la de los coches, donde llevan varios años de desarrollo e incluso existen modelos a la venta, y que por ejemplo implicaría la emisión de vapor de agua y calor para conseguir la energía. Esto lo solucionan en Intelligent Energy con unas pequeñas ranuras en la parte inferior por las que ese vapor saldría al exterior.
Igualmente el mecanismo de recarga de la pila estarían gestionándolo a través del conector de auriculares, que tendría una abertura directa al depósito. Utilizando un dispensador especial, dicen, cualquiera podría recargar la pila sin necesidad de complejos procesos.
Mismo tamaño, una semana de autonomía
Lo más representativo sin duda es la capacidad de aumentar la autonomía hasta una semana sin necesidad de grandes o complejos cambios. Desde la compañía aseguran que éste es el futuro de las baterías de smartphones - viven de esto, no esperábamos oír otra cosa -, si bien es cierto que no es más que un prototipo y que la tecnología aún necesita evolucionar.
Aquí la pelota está sobre el tejado del equipo de ingenieros de Intelligent Energy. Para un cambio tan radical como este se requiere que la nueva tecnología sea tan cómo o más que la anterior, lo cual no es fácil de implementar. Ahora mismo enchufamos a un cargador, y listo; el proceso con la pila de hidrógeno debería ser algo en esa línea. Faltaría por ver la disponibilidad de la materia prima (hidrógeno), en qué formato llegaría al mercado así como por supuesto su precio.
Igual de importante es la seguridad. Las pilas de combustible generan energía a partir de emitir vapor de agua y calor, dos elementos muy perjudiciales para un dispositivo electrónico y que Intelligent Energy deberá tratar con mucho cuidado si quiere llevar esta innovación al mundo comercial.
Imagen de portada | Flickr de Prem Sichanugrist
Vía | The Telegraph, UberGizmo
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