De los Huawei P20 a los Huawei P30: esto es todo lo que ha cambiado en un año

Ya ha pasado un año desde que Huawei diese el mayor puñetazo sobre la mesa que se recuerda en la compañía. Desde que los Huawei P20 y P20 Pro llegasen para elevar el listón fotográfico de un mercado que hasta entonces estaba un poco parado, evolucionando de forma lenta. Evolucionando, no revolucionando. Pero el P20 Pro introdujo las tres cámaras en el mundo móvil, y hoy en día no son pocos los exponentes de la competencia, y de su propio catálogo, que han adoptado su modelo.

Pero los P30 ya están entre nosotros, y con ellos la gama alta del fabricante vuelve a dividirse y a dar un paso adelante. El modelo normal pasa de dos a tres cámaras, y el P30 Pro coloca un cuarto sensor en su espalda. No es algo nuevo ya, pues lo hizo Samsung ya en un par de ocasiones, pero sí es algo digno de mención. Ahora veamos qué es lo que ha cambiado en este año, qué novedades nos ha traído la nueva generación de teléfonos premium de Huawei.

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Más pantalla, menos notch, full OLED

Corría el año 2018 cuando Huawei presentó su nueva generación de gamas altas dividiendo los modelos no sólo por su diagonal, sino también por la tecnología de sus pantallas. El P20 aterrizó con 5,8 pulgadas y luciendo un panel LCD, mientras que el P20 Pro crecía hasta las 6,1 pulgadas y optaba por el OLED. Los dos teléfonos tenían además un notch bastante pronunciado que impedía a sus paneles ir más allá de los 18,7:9, pero este año todo ha cambiado.

Ahora los dos teléfonos han crecido, y aquí todo el mundo ha cruzado a la orilla del OLED. En la nueva generación de P30 nos topamos con el modelo estándar con 6,1 pulgadas, alcanzando a su hermano mayor el año anterior, y al P30 Pro llegando a las 6,47 pulgadas de pantalla. Además, el 'notch' se reduce y los ratios se estiran hasta llegar a los 19.5:9. Pero hay más cambios en esta pantalla.

Además de crecer y estirarse, las pantallas de la nueva generación de P30 y P30 Pro de Huawei albergan ahora los lectores de huellas dactilares. Lectores que pasan del marco inferior al propio panel, escondiéndose tras el mismo. Lectores ópticos que Huawei ya estrenase en el Mate 20 Pro y que ahora ha mejorado para ofrecer una mayor velocidad y precisión de desbloqueo.

Y como el teléfono ha crecido, también lo han hecho sus baterías y sus sistemas de carga rápida. 3.400 y 4.000 mAh tenían los P20 y P20 Pro, ambos con carga de 22,5W. Ahora saltamos a 3.650 mAh y 4.200 mAh, con cargas rápidas de 22,5W y 40W para el P30 Pro, que además tiene carga inalámbrica de 15W y permite carga inalámbrica inversa. Es decir, que ahora podemos usar la carga inalámbrica para dar energía a otros dispositivos Qi.

Potencia actualizada a este 2019

Huawei presenta sus cerebros de máxima potencia en la segunda mitad del año. Ocurrió con el Kirin 970 de los Huawei P20 y P20 Pro, que fueron estrenados meses antes por la familia Mate, y volvió a ocurrir con el Kirin 980 de los actuales Huawei P30 y P30 Pro. Más potencia, NPU Dual y conectividad mejorada. ASí que ahora tenemos el doble potencia para ejecución de código de inteligencia artificial, pero también más añadidos.

Como la tecnología de construcción en 7 nanómetros, prometiendo mayor ahorro energético, o como el Bluetooth 5.0 para nuestras conexiones inalámbricas. Pero además, los P30 y P30 Pro dan un salto adelante en RAM y memoria. Los dos teléfonos parten ahora de 6GB y 8GB de RAM, y sus memorias ofrecen 128GB como base, llegando el P30 Pro hasta los 512GB en su versión más potente. Además, el P30 ofrece tarjeta de expansión NMCard, la propietaria del fabricante, una novedad en comparación con el año anterior.

Los teléfonos llegan ahora de forma nativa en Android 9 Pie y con EMUI 9, aunque ya la pasada generación recibió su correspondiente actualización, y el P30 recupera el jack de 3,5 milímetros que no estaba presente en los P20. Aunque sólo lo tendremos en el modelo estándar, nada de auriculares con jack en el P30 Pro, que cede el control del audio al puerto USB C y a la conexión Bluetooth. Pero lo más interesante de todo es, sin duda, el salto fotográfico.

Más cámaras, más potencia, más versatilidad

Llevaba tiempo rumoreándose que los P30 iban a crecer en número de sensores, y así ha sido. Si en la pasada generación teníamos dos cámaras para el P20 y tres cámaras para el P20 Pro, ahora el partido se juega con tres y cuatro sensores, aunque el cuarto del P30 Pro es uno tan específico que ni siquiera se le trata como sensor. Hablamos, claro está, de un TOF 3D para lecturas de profundidad. Un sensor de tiempo de vuelo, que explicamos aquí.

Así, el nuevo Huawei P30 nos coloca ante un sistema de cámara triple, con 40, 16 y 8 megapíxeles, con lentes f/1.8, f/2.2 y f/2.4, y luciendo el mismo zoom de tres aumentos que conocíamos de la pasada generación. ADemás, la lente de 16 megapíxeles es una ultra gran angular, frente a la gran angular del P20, y por supuesto tenemos estabilización óptica añadida al paquete.

El Huawei P30 Pro es el que protagoniza el mayor salto aquí, sin embargo. 40, 20 y 8 megapíxeles para el más potente de los P30, cuyo zoom óptico crece hasta los cinco aumentos y que además incorpora el ya mencionado sensor TOF 3D para lecturas de profundidad. Un teléfono que se hace aún más versátil, pese a que la familia pierde los sensores especializados para blanco y negro del año anterior.

Un gran salto adelante de los Huawei P30 y P30 Pro con respecto a la generación pasada. Saltamos en pantalla, procesador, memorias, cámaras y baterías con dos modelos bastante prometedores, y que deberían funcionar bien en ventas para su fabricante. Seguiremos su evolución a lo largo de los próximos meses, pero no cabe duda de que Huawei presenta una apuesta bastante firme para hacerse con el título del mejor teléfono móvil del año. ¿Lo conseguirá? Ya veremos.

Comparativa de especificaciones entre los Huawei P20 y Huawei P30