La transición del mercado hacia el OLED parece imparable, con varios de los principales fabricantes buscando inversión para comenzar a introducirse en una tecnología que Samsung domina con una fuerza casi monopolística. Dicen las cifras que el 95% de la producción mundial de pantallas OLED para móviles sale de las fábricas de los coreanos, pero LG quiere poner pronto fin a esto.
Al igual que Foxconn, a través de Sharp, o Japan Display, LG lleva tiempo realizando inversiones para comenzar a producir paneles OLED cuanto antes y de hecho se espera al menos un modelo para este mismo año con pantalla propia. Se habla del LG V30 para el mes de septiembre, aunque los planes de LG van más allá y ya coloca los cimientos para el futuro.
3.200 millones para ampliar fábricas
Fuentes cercanas al fabricante surcoreano mencionan planes de LG para reforzar al menos dos de las plantas en las que actualmente producen pantallas LCD. De hecho, esta expansión hacia el OLED estaba ya prevista para los televisores de la compañía pero ahora todo parece haber cambiado y el "mobile first" habría llegado a las factorías de pantallas de LG.
Independientemente de la producción de paneles OLED que LG pueda destinar al LG V30 de este final de año, o al futuro LG G7 del 2018, los surcoreanos habrían puesto sobre la mesa una inversión de 3.200 millones de euros (3.570 millones de dólares) para aumentar esta producción para el año 2019. La apuesta de LG por el OLED parece evidente y quieren plantar cara a Samsung.
Los informes de producción de Samsung revelan que sus fábricas producen aproximadamente 240.000 paneles OLED cada mes. Grandes paneles, de los que se extraerían bastantes pequeños paneles para teléfonos. LG podría estar en disposición de producción 120.000 paneles OLED al mes para el año 2019. Eso supondría que, de llevarse bien la gestión comercial, optaría al 33% del mercado actual de pantallas.
LG ya tendría algún que otro cliente en el bolsillo, pues parece que el futuro Xiaomi Mi Note 3 podría montar un panel OLED producido por LG, sumándose así a la producción del fabricante para consumo propio. Ya veremos si LG es capaz de cumplir estos plazos e incorporarse al mercado de pleno derecho. Sobre todo porque algunos clientes, como Apple con sus iPhone, prometen un consumo bastante elevado de esta tecnología y conseguir un contrato con ellos se antoja bastante goloso.
Vía | PocketNow
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