La venta de Palm promete convertirse en uno de los mayores culebrones financieros de la historia de las telecomunicaciones en vista del número de candidatos que han surgido con intención de llevarse al huerto uno de los mayores filones peor explotados comercial y tecnológicamente hablando. Junto a los cada vez más intensos rumores de negociaciones con HTC y Lenovo, es ahora el consorcio chino formado por ZTE Corp. y Huawei el que salta a la palestra como posibles candidatos a llevarse el premio gordo.
Para más inri de los de Sunnyvale, se ha dado a conocer que fue precisamente el consejo de dirección de la propia Palm la que contactó con los conocidos fabricantes de equipamiento electrónico en una serie de reuniones preliminares que tuvieron lugar a mediados del pasado mes de febrero, tratando de encontrar una solución a la situación que actualmente atraviesa.
El hecho de que ambas compañías chinas se hayan convertido en potenciales compradores tiene bastante sentido si tenemos en cuenta que, a pesar de sus intentos por entrar en el mercado de la telefonía móvil, Huawei carece del renombre necesario y de un sistema operativo propio para mantenerse a la altura de otras marcas de primer orden.
Por otro lado, el consorcio tiene a su favor los bajos costes de producción y la inyección de capital necesaria para reflotar la marca, pudiendo invertir el dinero suficiente como para ponerse al día en el desarrollo de nuevos terminales. En este caso, Palm sería el puente adecuado para salvar el difícil escollo que tienen que sortear las marcas y productos chinos en occidente cuya calidad sigue siendo más que cuestionada por los consumidores.
Vía | Reuters.
Ver 16 comentarios