Movistar, Airtel y Amena en los 2000: así eran las 'ofertazas' que arrasaron el mercado antes de las tarifas planas y los OMVs

Pagar hoy en día 35 euros por la fibra y el móvil con 'tarifa plana' de voz y datos está muy extendido en la mayoría de operadores, pero a finales de los años 2000, cuando aparecieron las primeras tarifas planas para hablar desde el móvil las 24 horas, el coste partía de los 159 euros mensuales (más impuestos), así que las tarifas y promociones para hablar resultaban vitales en la década de los 2000.

En un momento en el que el primer minuto de la llamada costaba unos 30 céntimos, y los minutos adicionales costaban unos 20 céntimos por minuto (siempre más impuestos) si no querías estar limitado a un horario u operador concreto, los 'módulos de ahorro' se convirtieron en un complemento imprescindible para poder usar el móvil con algo más de tranquilidad.

Todo comenzó con qtal de Airtel en 2001

A principios del año 2000, Movistar, Airtel y Amena eran los único operadores encargados de ofrecer servicio de telefonía móvil, el cual, básicamente se componía de dos tarifas: una para hablar las 24 horas del día por el mismo precio, y otra para hablar más barato (y más caro) a horas determinadas. Y ninguna de ellas era válida para hablar durante horas sin dejarte una buena parte del sueldo de la época.

Con la llegada de qtal de Airtel se comenzó a dar forma a los servicios de ahorro de los operadores para rebajar el precio de llamadas, al menos cuando hablabas con tus números más habituales.

Qtal de Airtel hizo posible crear un grupo de amigos y/o familiares con hasta diez componentes, a los que permitía hablar y enviar mensajes entre ellos por 6 céntimos/minuto y 6 céntimos/SMS. Incluso podías mandar el mismo SMS a todo el grupo. Toda una revolución para la época en la que un sólo SMS costaba 15 céntimos (más impuestos).

Duo de Amena dio la campanada en 2002

Si los 6 céntimos por minuto de qtal fueron una revolución para la época, lo fue todavía más el Duo de Amena. No era un complemento de ahorro como tal, sino una tarifa que permitía elegir un número de Amena con el que poder hablar pagando la mitad del precio más bajo hasta la fecha.

Hablar con el resto de números era algo más caro que en otros operadores, pero si el grueso de tus llamadas era al mismo número, Duo salía muy rentable a 3 céntimos el minuto, o 30 céntimos el minuto si llamabas a otros números.

Una llamada de 10 minutos costaba con Duo unos 42 céntimos, mientras que en Amena sin Duo, el precio subía a 95 céntimos si sólo hablabas por las tardes, o 1,65 euros tenías la misma tarifa para hablar durante las 24 horas.

A finales de 2002, Airtel lanzó su servicio a2, que básicamente replicaba la tarifa de 3 céntimos de Amena, y la hacía compatible con cualquier tarifa del operador. En Movistar hubo que esperar a 2005 para poder contratar 'Mi favorito' con llamadas por 1 céntimo el minuto a número elegido.

El primer WhatsApp se llamaba mensamanía en 2004

En los años 2000, enviar un mensaje de texto de hasta 160 caracteres costaba unos 15 céntimos por cada SMS y enviar un mensaje con foto o vídeo, costaba unos 70 céntimos por cada MMS. Un uso intensivo como el que hacemos hoy con aplicaciones como WhatsApp era impensable, al menos hasta que llegó mensamanía de Airtel Vodafone.

Mensamanía permitía activar un servicio por el que, a cambio de una cuota de 6 euros, incluía 100 SMS y 100 MMS gratis al día para usar con cualquier móvil Vodafone durante un par de meses.

La promoción mensamanía de Vodafone fue recurrente durante varios años como anticipo a las promociones de navidad o verano, y en 2010 se quedo como un módulo de ahorro permanente. Movistar y Amena nunca llegaron a lanzar una promoción como mensamanía.

El 60x1 llega a Vodafone en 2005

Hablar hasta 60 minutos y pagar solo el primero en cada llamada. Vodafone lo hizo posible en su promoción de verano de 2005, aunque inicialmente la promoción estaba limitada a 30 minutos por llamada y sólo válida para hablar con fijos y móviles Vodafone. En navidad de 2005 se repitió la misma promoción pero ya llegó con el 60x1 más popular.

El 60x1 primero llegó en forma de promoción para hablar con Vodafone y fijos las 24 horas del día, y luego en forma de promoción para hablar con todos los operadores por las tardes y fines de semana. Finalmente, los 60x1 se quedaron como tarifas definitivas accesibles para todos en 2006 con la presentación de las tarifas Vitamina. También llegaron a Movistar en 2008, evolucionadas a 100x1.

Gracias a las tarifas 60x1 que incluían llamadas a fijos, estas tarifas sirvieron ya en 2005 para realizar las primeras conexiones a internet móvil desde el ordenador por unos 35 céntimos la hora, aunque a velocidad mucho más reducida de lo que empezaba a permitir el 3G a través de conexiones con módem USB.

Las llamadas a 0 céntimos minuto llegaron en 2006

Después de haber incentivado el uso intensivo de las llamadas regalando hasta 59 minutos por llamada, el siguiente paso era regalar también el primer minuto.

En 2006 al fin llegaron las llamadas a 0 céntimos el minuto. A partir de este momento ya sólo habría que pagar el establecimiento de llamada, de unos 18 céntimos con impuestos, al menos en las llamadas realizadas al mismo operador.

Primero llegaron las llamadas a 0 céntimos el minuto a Vodafone en la promoción de verano de 2006, aunque todavía tardaron años en hacerse permanentes. En 2007 llegó antes el Contrato 1, por el que hablar con Vodafone y fijos costaba 1 céntimo el minuto para siempre. No fue hasta 2013 cuando Movistar lanzó también su contrato cero, para igualar al resto del mercado.

Módulos de ahorro para todos los gustos

Tras la popularización masiva de grupos como qtal y servicios como Duo, los módulos de ahorro se nutrieron con el paso de los años con multitud de añadidos. Primero ofrecían llamadas baratas para hablar con la pareja, con las líneas de la cuenta familiar, con números fijos y con los números frecuentes de cualquier operador.

Los mismos módulos de ahorro fueron evolucionando a tarifa plana, de modo que hablar pasaba a ser gratis a cambio de una cuota mensual específica para parejas, familias, fijos, etc.

Entre 2006, cuando Amena lanzó la primera tarifa semiplana para hablar con cualquier operador por las tardes sin pagar establecimiento de llamada, y 2009, que se lanzó la primera tarifa plana 24 horas 'asequible' por 59 euros, los módulos de ahorro comenzaron su declive.

También influyó en la desaparición de los módulos de ahorro la irrupción de los nuevos operadores, como Yoigo y los OMVs en 2006, que trajo consigo una drástica rebaja de precios para lo que estábamos acostumbrados por aquel entonces. Carrefour Móvil se dio a conocer por una tarifa única de 15 céntimos el minuto cuando lo habitual era pagar hasta 21 céntimos, y para alcanzar mínimos de 12 céntimos el minuto había que comprometerse a consumos mínimos de 90 euros mensuales.

Internet ilimitado por 1,20 euros al día de Yoigo

Después de que se popularizaran las primeras tarifas 3G ilimitadas para pinchos USB, que en sus inicios costaban 49 euros en Vodafone, con llamadas gratis a fijos, reducción de velocidad a 128 Kbps a partir de 1 GB y permanencia, Yoigo revolucionó el mercado con su tarifa de datos realmente ilimitada.

Yoigo nació en 2006 y lo hizo con una tarifa de datos máxima de 1,20 euro al día, que resultaba ser más barata que cualquier tarifa mensual de la competencia, además permitía ahorrar los días que no te conectaras y podías navegar lo que quisieras sin que la velocidad se viera reducida.

Las promociones de verano eran el gran acontecimiento del año

En la primera década de los años 2000, los días previos al anuncio de las promociones de verano y navidad eran toda revolución, en los que el secretismo era máximo y no era fácil que se filtrara la información, pero no se hablaba de otra cosa en los foros especializados.

La expectación era máxima porque, gracias a esas promociones, podría usarse el móvil sin preocupación durante unos meses. Y con suerte, era el anticipo de tarifas que se harían definitivas años más tarde.

Sobre todo se promocionó el uso del móvil para hablar, pero también permitió dar a conocer nuevos servicios, ofreciendo el acceso gratuito a servicios como las videollamadas, la conexión a internet o la televisión, mucho antes de que se convirtieran en lo que hoy son.

Imagen portada | Copilot.

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