Adiós a BenQ mobile, el plazo dado por los administradores de su bancarrota terminó sin que se encontrara un posible comprador. Ahora está en liquidación y tendrá que ir vendiendo sus activos.
A una economía como la alemana le ha sido imposible mantener un fabricante de móviles, es extraño en un país plagado de multinacionales. BenQ compró Siemens en 2004 cuando la multinacional alemana ya estaba cansada de gastar millones en un pozo sin fondo.
También es una lástima porque algunos de los últimos productos de BenQ mobile tenían muy buena pinta.
Vía | The Wireless Report