Cambié de operador de fibra y cometí un error que me hizo pagar por duplicado. Fue provocado por el teléfono fijo que no quise

Cambiar de compañía telefónica tus servicios de fibra y móvil manteniendo el mismo número mediante portabilidad es una ventaja de la que se aprovechan cada mes unas 600.000 líneas aproximadamente.

Se trata de un servicio gratuito y reglado, para que los riesgos al cambiar de operador sean mínimos, aunque también hay que tener en cuenta otros detalles importantes para que todo salga bien y no acabes pagando por servicios que no utilizas.

Mucho cuidado si no quieres teléfono fijo

El teléfono fijo lleva años en desuso y ya hay más operadores que han dejado de incluirlo o que permiten añadirlo opcionalmente, que operadores con fijo incluido por defecto. La idea es ahorrar unos euros al mes si crees que no necesitas fijo.

Hasta aquí bien. El problema es que solicité portabilidad de mis servicios de fibra hacia un operador que no tenía fijo, y nadie me avisó de lo que tenía que hacer para evitar pagar por duplicado por mi conexión de fibra en casa.

Ya había solicitado portabilidad de mis líneas móviles en otras ocasiones y el proceso se había llevado a cabo sin sorpresas de ningún tipo. Incluso recuerdo portar sin problemas de ADSL a HFC. Pero la primera vez que incluí en la ecuación la portabilidad de la fibra hacia un operador sin teléfono fijo, es cuando cometí un error garrafal.

Nadie me avisó porque, probablemente, no era necesario. La portabilidad se realiza para mantener el mismo número en otra compañía, pero como en realidad yo no quería fijo en mi nueva compañía, no fui consciente de que solo estaba solicitando portabilidad de las líneas móviles.

En el proceso de compra en la nueva compañía, yo contraté fibra y móvil, pero realmente solo había solicitado portabilidad de las líneas móviles. Es decir, mi antiguo operador solo sabía que yo iba a cambiar las líneas móviles, pero no sabía nada de que también iba a contratar fibra con otro operador.

Evitar pagar por duplicado indefinidamente tiene fácil solución

El proceso se llevó a cabo según lo estipulado. Mi nuevo operador vino a instalarme la nueva fibra (sin fijo) y días después se llevó a cabo la portabilidad efectiva de las líneas móviles. Todo se había llevado a cabo según lo esperado y todo parecía correcto, pero no era del todo así.

Antes de terminar el primer ciclo de facturación con mi nuevo operador, recibí la esperada última factura de mi antiguo operador, y días después, llegó la primera factura de mi nuevo operador con el precio estipulado en el contrato. Sin ningún sobresalto.

Lo que no esperaba fue la factura que volvió a llegar poco después. Era de mi antiguo operador. El mismo al que yo estaba convencido que ya habíamos saldado todas las cuentas pendientes, me reclamaba una nueva factura por el servicio de fibra. Y en ese momento me di cuenta de mi error.

Aunque el técnico que me instaló el nuevo servicio de fibra me quitó el viejo router de mi antiguo operador, el antiguo servicio de fibra seguía activo, porque mi antiguo operador no sabía que yo había activado fibra con otro operador y porque yo no le dije que quería dar de baja la fibra antigua.

Así que la inesperada factura que recibí tenía que pagarla. El error era mío porque era yo quien tenía que haber solicitado la baja de la fibra con el fijo en cuanto me instalaron la nueva. Hubiera agradecido que alguien me hubiera advertido, pero no fue así. Y yo no caí en ese detalle hasta que ya fue tarde, así que me tocó pagar por duplicado. Y después llamar a mi antiguo operador para dar de baja definitivamente la antigua fibra para no seguir pagando por duplicado indefinidamente.

Imagen portada | Gemini.

En Xataka Móvil | Hice un amago de portabilidad y cometí un error que nunca olvidaré: no quiero volver a pasar por esa odisea.