Como comentabamos hace unos días, la decisión de suspender parcialmente la venta de nuevos modelos de móviles con chips de Qualcomm en Estados Unidos, por la batalla legal de patentes que enfrentan a esa compañía con Broadcom, puede tener graves repercusiones.
Lógicamente además de la propia Qualcomm, los mayores perdedores serían los fabricantes que utilizan principalmente esos chips, LG y Samsung, en Estados Unidos tienen una cuota de mercado muy buena, superando incluso la de fabricantes más importantes, por lo que tendrán mayores dificultades para encontrar una solución. Kyocera y Sanyo también emplean la tecnología de Qualcomm y Motorola planea integrarla en su próxima gama de móviles. Todo ello podría provocar además un serio contratiempo para la tecnología 3G y que algún fabricante contemplara la posibilidad de migrar a otras como WiMAX.
En el lado de los mayores beneficiados estarían Nokia y Sony Ericsson, no utilizan chips de Qualcomm y su participación en el mercado americano es baja, lo que podría suponer un empujón a las ventas aprovechando las dificultades de la competencia. Tampoco el iPhone de Apple se verá afectado.
Ahora la patata más caliente es para Qualcomm, salvo que llegue a un acuerdo con Broadcom todas las demás opciones de salir airosa llevarían mucho tiempo o son poco probables, como un veto presidencial. Así que malos tiempos para la telefonía móvil en Estados Unidos.
Vía | mocoNews.net