La nueva Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia que unirá en un solo regulador a las actuales Comisiones Nacional de Competencia y a la del Mercado de Telecomunicaciones aún no ha echado a andar por completo pero aún así ya tenemos los primeros líos en forma de dimisiones.
Y es que la que había sido designada como Directora del área de Competencia, Beatriz de Guindos, ha decidido dejar el cargo que obtuvo este mismo jueves, desginación envuelta en una polémica al ser esta sobrina del actual Ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos.
Aunque nunca se han manifestado públicamente operadores y otros actores del sector de las telecomunicaciones, además de la Unión Europea, han sido recelosos de una fusión de reguladores en la que temen perder la cercanía que tenían hasta ahora con la CMT, regulador únicamente dedicado a este sector.
Y mientras la puesta en funcionamiento de la nueva CNMC está cerca de llegar se han ido designando sus puestos, donde los consejeros de la actual CMT han quedado en un segundo plano frente a los de la CNC, siendo el de directora del área de Competencia el de mayor polémica.
Sustituida por otra familiar de ministro
A favor de Beatriz de Guindos cabe decir que es funcionaria y lleva la mayoría de su trayectoria profesional trabajando en la CNC como subdirectora del área de Industria y Energía, puesto al que ahora volver a ocupar tras su renuncia a la dirección de Competencia en la CNMC.
Pero para enmarañar aún más todo este asunto de puestos en la nueva CNMC cabe añadir que la que iba a ser sustituta en el anterior puesto de Beatriz de Guindos era Micaela Arias Domeq, precisamente hija del Ministro de Agricultura y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete.
A fin de cuentas nos encontramos con un lío de tintes políticos que podría empañar el estreno de la CNMC, con mucho trabajo por hacer para contentar a unos y a otros en las disputas abiertas, como las denuncias contra el acuerdo entre Yoigo y Movistar, o para relajar las fricciones que ha habido en el pasado entre la CMT y la CNC.
Vía | Expansión
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