La Unión de Consumidores de España ha denunciado a la cadena de tiendas The Phone House ante la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones por cobrar las solicitudes de portabilidad, un servicio que las operadoras establecen como gratuito.
The Phone House obliga a los clientes a depositar 20 euros, que sólo le son devueltos si la portabilidad se lleva a cabo. Se trata de una estrategia para evitar la tramitación de portabilidades falsas (o amagos), aquéllas en las que el cliente no quiere en realidad cambiar de operador y realiza la operación para forzar al suyo a regalarle un teléfono, descuentos en la factura, etcétera, bajo amenaza de cambiarse.
La UCE cree que esta práctica contraviene el Real Decreto 2296/2004, reglamento sobre el mercado de las comunicaciones electrónicas, acceso a redes y numeración, porque si la portabilidad se cancela (porque el cliente se arrepienta espontáneamente o por una contraoferta de su operador) no se recupera el dinero.
Vía | Finanzas.com