Orange y MásMóvil están a punto de crear un nuevo gigante de las telecomunicaciones en España, con consecuencias que apuntan en todas direcciones, siendo la reducción de competencia la que más preocupa a los usuarios.
Porque menor competencia podría traducirse en menor motivación para invertir en redes, y sobre todo, en precios más caros o una reducción considerable del ritmo al que llegan las mejoras en tarifas u otras ofertas. Para impedir que esto ocurra, en Bruselas han confiado en Digi como escudo anti oligopolio.
Porque ya es el cuarto operador del país con más del 7% de cuota de mercado en fibra y móvil, y porque cuenta con una red de fibra propia cercana a los 10 millones de unidades inmobiliarias, Digi ha sido bendecida con los remedies de la fusión de Orange y MásMóvil para facilitar que pueda mantener los precios bajos en el futuro.
Si Digi quiere, el low cost más agresivo está garantizado
Digi acaba de renovar su acuerdo para usar la cobertura móvil de Movistar hasta finales de 2025, el cual reporta unos suculentos beneficios que rondan los 300 millones de euros. Pero Digi quiere rebajar la factura y parece que todo juega en su favor.
Digi se encuentra cómodo con la red de Movistar y cambiar de mayorista supondría unos costes asociados que intentará evitar. Por su parte, Movistar no querrá perder un cliente tan suculento y estará dispuesta a renegociar el acuerdo a la baja, aunque no será fácil para Telefónica, porque Orange y Zegona están dispuestas a arrebatar el contrato.
Orange ya ha dado sus primeros pasos, y junto al traspaso de espectro, ha acordado un acceso en condiciones ventajosas a su red, así que Digi ya tiene la primera contrapartida para rebajar lo que paga por usar las redes de terceros.
La segunda contrapartida vendrá previsiblemente por parte de Zegona cuando se ponga al mando de Vodafone, que ya se ha mostrado abiertamente a mejorar su oferta mayorista para atraer a nuevos OMVs y aumentar drásticamente el uso de las redes que tiene desplegadas.
Por si tener tres operadores desenado conseguir como cliente mayorista a Digi no fuera suficiente para rebajar lo que paga actualmente, el operador contará con espectro para desplegar su propia red, lo que le servirá para aumentar la presión sobre sus mayoristas. O bajan el precio lo suficiente, o Digi comienza a desplegar su propia red.
Lo que parece seguro es que, sea con o sin red propia, Digi tendrá cuerda suficiente para seguir bajando los precios como hasta ahora, así que la existencia del cuarto gran operador que ayuda a mantener la agresividad comercial del low cost está asegurada.
Si Digi ataca, Lowi, Simyo y O2 reaccionarán
Una de las marcas que más suena para responder primero al ataque de Digi es Lowi, ya que Zegona ha hecho hincapié en reforzar la marca low cost, imitando aspectos como la fibra más barata en zonas con cobertura propia, que alcanza algo más de 10 millones de hogares.
Zegona tiene el objetivo de hacer más rentable Vodafone para su futura venta, y para ello será necesario aumentar el número de clientes sin que el ARPU (ingreso medio por cliente) se vea afectado. Será un equilibrio complicado de conseguir, pero se lleva demostrando desde hace años que lo más eficaz para ganar clientes es bajar los precios.
Lo sabe Digi, que está arrasando con su política de precios ultrabaratos, sobre todo en zonas donde tiene desplegada su propia fibra, que ya supera los nueve millones de hogares. Y lo saben Movistar, Orange y Vodafone, cuyas respectivas marcas low cost, O2, Simyo y Lowi, son las que más ayudan a no perder más cuota de mercado.
Si la estrategia es igualar a Digi, que reduce la cuota mensual en 10 euros cuando te encuentras bajo cobertura de fibra propia, el próximo año podrían hacerse más habituales los combinados de fibra y móvil con gigas de sobra en torno a los 25 euros al mes.
Si Orange hiciera lo propio con Simyo, su huella de fibra propia supera los 14 millones de hogares, y serían más los usuarios potencialmente beneficiados. Pero hay que ser cautos. Si Orange es considerado operador dominante y está sujeto a la regulación, las bajadas de precios podrían tardar en llegar para evitar tener que bajar también los precios a competencia, se de depreciara todavía más el sector.
En cuanto a O2, es de esperar que también se vaya adaptando al mercado, pero siempre ha sido más reticente a bajar los precios de acceso a los servicios y aunque sería de suponer que así seguirá siendo, todavía no sabemos hasta donde estará dispuesta a llegar una Telefónica liberada de regulación.
En Xataka Móvil | Telefónica, Vodafone y Orange no quieren más ‘Digis’ en sus mercados y reclaman un nuevo acuerdo para Europa.
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