El Director Ejecutivo de la Fundación Symbian, Lee Williams, que podríamos decir que cumple las funciones que tendría un CEO en una compañía, ha decidido bajarse de una aventura a la que ha estado ligado desde su creación en 2008, y anteriormente liderando la línea de negocio alrededor de Symbian S60.
Su salida es inmediata a la vez que sorprendente, y las razones por las que deja el cargo son personales, al menos de cara a la galería. Aunque alguno diría que ya estamos curados en salud en lo que tenga que ver con el entorno Nokia y la fuga de directivos: Anssi Vanjoki, Ari Jaaksi, Olli Pekka-Kallasvuo ...
De hecho ya cuenta con sustituto, Tim Holbrow, hombre importante de finanzas en la Fundación, que llega para asumir el cargo en su periodo completo, ya que están apareciendo algunos rumores sobre la temporalidad de su puesto.
Recordamos que la Fundación Symbian es una organización sin ánimo de lucro que se formó en 2008 para llevar adelante los diferentes sistemas operativos entre los que encontramos el recién presentado Symbian^3. Desgraciadamente los análisis a nivel mundial del sistema están siendo bastante duros, y no hace falta ser un experto en el tema para darnos cuenta que está un par de pasos por detrás de los gallitos del mercado.
¿Symbian^4 tampoco llama la atención de otros fabricantes?
Considero que el problema real no se encuentra en Symbian^3, que ha llegado en una época de transición, sino en el desarrollo de Symbian^4, que no parece nada claro, y a estas alturas deberían haber vendido algo más interesante a desarrolladores y terceros fabricantes, ya que está llamado a ser un punto de inflexión en la historia de Symbian.
Tampoco creo que haya ayudado el posicionamiento de empresas como Sony Ericsson y Samsung, que recientemente informaron que no iban a lanzar terminales con Symbian^3, a pesar de forma parte de la Fundación.
Vía | Mobile Industry Review.