La llegada y posterior popularización de los smartphones ha traído grandes beneficios para los operadores, con un aumento de ingresos por conexiones a Internet espectacular y con más clientes atados a cambio de su subvención.
Pero como en todo la expansión de los teléfonos inteligentes no es del todo beneficiosa para los proveedores de red. Su mayor amenaza son los servicios over-the-top, sobre todo aplicaciones que permiten al usuario ahorrarse llamadas o mensajes con la merma en ingresos que esto supone.
Antes del verdadero boom de los smartphones los ingresos por mensajes cortos ya se habían mermado pero ya en el periodo comprendido entre 2009 y 2011 la perdida fue aún mayor, con España a la cabeza de los países donde más han perdido los operadores.
Aplicaciones tan populares como Whatsapp u otras de mensajería instantánea han provocado que los Movistar, Vodafone o similares hayan recaudado un 10% menos respecto al periodo anterior según Analysys Mason.
El problema se magnifica aún más con otra dura bajada de ingresos por llamadas que no se ve compensada por el aumento de la contratación de bonos de datos, que además podrían tocar techo en un plazo de tres o cuatro años.
A grandes males …
Desde luego que nadie cuando ve las cuentas de su negocio bajar se queda de brazos cruzados y los operadores no iban a ser menos desde luego. Lo espinoso del asunto es como hacer frente a unos servicios, en su mayoría gratuitos, con una popularidad muy alta.
Una de las opciones es la adoptada por la GSMA, organización que aglutina a los mayores operadores del mundo, que optaron por desarrollar su alternativa, la aplicación Joyn, que permite llamar y mandar mensajes al igual que ya hacían otras aplicaciones.
Otra de las opciones es la creación de bonos de datos específicos para el uso de cierto tipo de aplicaciones. El ejemplo más claro y cercano para nosotros es el de Yoigo, que lanzó un bono de datos exclusivo para su uso con aplicaciones de vozIP.
Por último también está la alternativa más drástica, regalar el envío de mensajes cortos con tarifas de datos como ya hace entre otros Movistar. Una medida que podría llegar tarde tras años en los que se nos ha cobrado cada SMS a 0.15 euros.
Diferentes formas de afrontar una merma de ingresos. Aún así no hay visos de que los ingresos por mensajes cortos puedan remontar.
En Xataka Móvil | vozIP ¿riesgo u oportunidad para los operadores?