Un balón de oxígeno para una empresa que últimamente no levanta cabeza. Cuando todo parecía que llegaría a un acuerdo amistoso, con el presidente norteamericano tendiendo la mano en su canal de comunicación y estilo habituales, el senado del país acabó con todas sus esperanzas con la promulgación de una nueva ley de Defensa.
El veto a los productos y operaciones de ZTE en Estados Unidos continuará vigente almenos hasta que el Presidente Donald Trump logre llegar a un acuerdo con el Senado para poder cumplir con el que alcanzó con ZTE y frenar las acciones que afectan negativamente el fabricante chino y, de rebote, otras empresas como Huawei.
El suspenso temporal de la prohibición de Estados Unidos a que ZTE tenga relaciones comerciales con proveedores norteamericanos, según ha comprobado Reuters, tendrá lugar hasta el 1 de agosto y arrancó el 2 de julio, autorizado por la Oficina de Industria y Servicios del Departamento de Comercio de Estados Unidos.
Lo que permite este levantamiento de las sanciones es que ZTE pueda volver a mover capitales y transferir fondos de forma limitada, ya sea recibiéndolos o emitiéndolos. También se le concede a la empresa permiso para seguir operando redes y equipos que ya tenga instalados en suelo norteamericano, además de poder ofrecer asistencia a los clientes de dispositivos que hubieran contratado sus servicios antes del 15 de abril.
Parte de los acuerdos a los que llegó la Casa Blanca con ZTE incluyen cumplir con la sanción que se le había impuesto inicialmente a este segundo fabricante chino de infraestructura telefónica tras haberse comprobado que había mantenido negocios con Irán y Corea del Norte, lo cuál es incompatible con seguir comercializando en los Estados Unidos.
Las sanciones incluyen pagar una multa de mil millones de dólares, bloquear 400 millones en una cuenta de garantía y el despido de varios altos ejecutivos, de los que ya se habrían deshecho de ocho. A todo ello se sumaría una revisión profunda de la gestión de las relaciones comerciales de ZTE.
Algunas informaciones apuntan a que ZTE ha empezado a avanzar en el cumplimiento de esas sanciones, aunque no hay nada confirmado oficialmente, todavía. Habrá que esperar a ver de qué sirven los gestos de ZTE si, finalmente, el Senado no da su brazo a torcer y dónde queda entonces el acuerdo bilateral entre el gabinete de Trump y el fabricante chino.
Vía | Reuters
En Xataka móvil | ZTE califica de "extremadamente injustas" las sanciones de embargo de Estados Unidos en un comunicado oficial
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