El mercado español de las telecomunicaciones ha visto como se reducía el número de actores presentes en la convergencia en los últimos años. Ante su crecimiento, tanto en clientes como en red, Vodafone y Orange compraron ONO y Jazztel respectivamente, lo que nos dejó con tres grandes actores a nivel nacional (a falta de que MásMóvil creciese) y unos pocos actores a nivel regional.
Y tal como hiciese ONO en su día, que se formó a base de juntar cableras regionales, Euskaltel no va a dejar que los grandes operadores nacionales le dejen sin mercado. El primer paso fue la compra de la cablera gallega R y tras quedarse fuera de la puja por telecable en un primer momento, hoy se confirma lo que ya era un secreto a voces: la compañía vasca se hace finalmente con su colega asturiana.
Como era de esperar, los flecos a resolver entre los dueños de Euskaltel y telecable para completa la transacción se han resuelto y tendremos gran cablera del norte. El acuerdo ha consistido en un pago de 686 millones de euros más otros 15 millones de euros de variables, que serán pagados en efectivo por un lado y en acciones por otras, de manera que el fondo Zegona pasará a tener un 15% de la nueva Euskaltel, siendo el segundo accionista solo por detrás de Kutxabank.
Y seguirá creciendo
De momento, solo contamos con los datos que Euskaltel ha remitido a la bolsa de Madrid. Tocará esperar a esta tarde para que la empresa vasca explique sus intenciones con telecable, que se encuentra en pleno proceso de actualización de su red fija y en el cambio de su cobertura móvil, y para conocer sus planes ahora que ya ha ejecutado la unión de las tres cableras independientes que quedaban en el país.
La nueva empresa tendrá unas cuentas tremendamente saneadas, ya que sus tres marcas tienen una buena base de clientes en cada territorio, generando unos importantes ingresos que son en buena parte beneficio, por la poca necesidad de nuevas inversiones. Pero ante la amenaza de la llegada de la fibra de Movistar, Vodafone y Orange, Euskaltel no puede permanecer inmóvil.
Los rumores de los últimos meses apuntaban a que Euskaltel expandiría su negocio hacia Cantabria, completando así su huella en toda la cornisa cantábrica. El plan pasaría por buscar un socio local y desplegar fibra hasta el hogar. La otra opción es el también rumoreado acuerdo con Orange, para ofrecer servicios en provincias limítrofes al País Vasco usando su fibra.
En el horizonte más lejano queda una idea que resultaría atractiva para los usuarios y que los grandes operadores temerían: la unión de la nueva Euskaltel con MásMóvil. Esa hipotética unión supondría juntar redes fijas y redes móviles, creando un gran cuarto operador con capacidad de inversión y de poner las cosas difíciles a los de siempre. Pero como decimos, esa idea queda muy lejos y es solo una hipótesis.
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