Prohibir el tethering debería ser una práctica ya olvidada

¿Os acordáis de las primeras tarifas de internet en el móvil? Si nos quejamos a día de hoy de los precios que pagamos deberíamos echar la vista atrás, para acordarnos de aquellas tarifas que no eran mensuales, pagábamos por cada día o semana de conexión, cuando no por el consumo puro y duro que hacíamos. Por no hablar de aquellas tarifas que nos daban un acceso limitado a ciertos portales.

Según se fue popularizando el uso de internet en los móviles las tarifas se adaptaron a las nuevas exigencias, pasando a ser mensuales y con cierta cantidad de datos incluidos. A pesar de ello los operadores se cubrieron inicialmente las espaldas, prohibiendo o limitando el uso de aplicaciones de voIP o de intercambio de archivos mediante p2p. Pero lo que no tiene ningún sentido es que a día de hoy se recuperen viejas restricciones como la del uso del tethering.

Los megas megas son. Los operadores nos ofrecen X cantidad megas o gigas y poco o casi nada les debería importar en qué gastamos esos megas, siempre que los paguemos religiosamente. Otro punto es cómo tratan el exceso de datos, si nos bajan la velocidad o nos cobran por mega o bloques lo que nos hayamos pasado de la cuenta. Esa es otra discusión muy distinta.

En su día prohibir el tethering podía tener sentido

Hoy toca hablar de lo que técnicamente se llama tethering, que no es otra cosa que compartir la conexión de datos desde un móvil a otro móvil, tablet o cualquier dispositivo. Si rebuscamos en internet podemos encontrar como hace siete años no todas las tarifas permitían hacer uso del tethering, como expresan en este hilo de Forocoches, pero en su día podemos encontrar cierta parte de lógica en su limitación o prohibición.

En 2010, e incluso en años posteriores, se dieron bastantes casos de usuarios que se creían que las tarifas de internet eran como barras libres, que podían conectar un ordenador al móvil y descargarse un par de películas de eMule sin ningún problema. Luego llegaban los recibos a casa y venían los problemas: facturas de varios cientos o incluso miles de euros. Ésa pudo ser una razón de peso para que años atrás el tethering estuviese prohibido.

Una práctica olvidada, hasta hoy

A 2017 que estamos ya la gran mayoría de los usuarios ya saben cómo funciona esto del internet en el móvil. No es la barra libre que tenemos en las conexiones fijas, en el móvil tenemos cierta capacidad de navegación contratada y una vez la consumimos, según el operador con el que tengamos la línea, podemos seguir navegando a una velocidad muchísimo más lenta de lo normal y/o tenemos que pasar por caja.

Como gasta cada uno sus megas ya es otra cosa. Las llamadas mediante aplicaciones de voIP están totalmente permitidas (parece que los operadores han dado esa batalla por perdida) e incluso podemos usar aplicaciones de p2p, aunque su uso puede suponer una ralentización de la conexión por parte del operador. Lo que ya no es una práctica habitual es impedir que un usuario haga una red WiFi con su móvil para conectar otros dispositivos.

Hasta ahora. Justo el día que Yoigo anunciaba sus tarifas convergentes y modificaciones en sus tarifas móviles hemos conocido que las condiciones generales que afectan a todas ellas serán cambiadas pronto. Además de limitar las llamadas a una hora, no permitir la selección manual de redes móviles o reducir la calidad de los vídeos, Yoigo ha introducido una cláusula que no ha gustado a nadie:

3.2 El Cliente se compromete a realizar un uso del Servicio razonable y basado en la buena fe. El servicio de voz sólo podrá utilizarse para conversaciones telefónicas y no para otros usos distintos o alternativos.

En particular no se considera un uso medio, razonable y de buena fe y, por tanto, no está permitido, el uso del servicio de voz y/o de acceso a Internet móvil, que implique, con carácter enunciativo y no limitativo, cualquiera de las siguientes o similares prácticas:

h) La cesión o compartición del uso de los servicios de acceso a Internet en modalidad móvil a través, entre otros, de terminales o dispositivos diferentes al que tenga insertada la tarjeta SIM suministrada por YOIGO y, especialmente, con dispositivos o líneas asociados o pertenecientes a operadores distintos de YOIGO.

Claramente se habla de que no está permitido el uso de tethering.

¿Por qué incluye esa cláusula ahora Yoigo?

Antes de informaros de la introducción de dicha cláusula, que no entrará en vigor hasta el 16 de febrero para nuevos clientes y hasta el 16 de marzo para ya clientes, desde Xataka Móvil hemos querido conocer las razones que hay detrás de un paso tan polémico como el dado por Yoigo.

Fuentes del operador nos han asegurado lo que luego han ratificado en la rueda de prensa: ningún cliente que haga un uso "normal" de la línea tiene que echarse a temblar. La promesa es que ninguno de ellos tendrá problemas por hacer tethering con su línea ni verá disminuida la calidad de los vídeos de YouTube u otros servicios de vídeo bajo demanda o en streaming.

El problema básico y central es lo que pone en las condiciones. Son muy muy claras. En ellas se dice que no está permitida "la cesión o compartición del uso de los servicios de acceso a internet". El argumento esgrimido por la compañía es que no quieren que sus clientes se dediquen a dar acceso a internet mediante su tarifa a otras personas, cuando normalmente los usuarios recurren al tethering para conectar sus portátiles o tablets. Sus dispositivos personales.

También se ha mencionado que Yoigo quiere salvaguardar la experiencia de todos sus clientes y que si todos hiciésemos tethering con nuestros móviles las antenas no darían a basto y podríamos sufrir saturaciones de la red móvil. Pero lo cierto es que Yoigo ha apostado por tarifas muy generosas en gigas (hasta 25 ofrecen) y esa apuesta es arriesgada, ya que si todos los clientes de la tarifa SinFín consumiesen los 25 GB la rentabilidad estaría en entredicho.

De momento nos podemos creer la promesa de Yoigo de no prohibir el uso del tethering mientras sea "razonable", pero el problema es la definición del "uso razonable o normal". Si desde el principio nos dijesen que no podemos usar más del 50% de los gigas de nuestra tarifa en tethering (por poner una cifra) todo habría quedado más claro, pero las cláusulas ambiguas solo causan problemas.

Yoigo ya pasó por algo similar cuando incluyó una cláusula conflictiva en su tarifa Infinita, que ponía un límite no claro a los minutos en llamadas que acabó siendo retirada sin haberse llegado a aplicar. Por eso, solo nos queda invitar al operador a aclarar o poner cifras al uso razonable, para que ningún usuario se acabe llevando una sorpresa.

Foto de portada | PIX1861
En Xataka Móvil | Las tarifas móviles con más gigas de 2017