Aunque no seamos un mercado puntero en la implantación de la conectividad LTE, es una realidad que la llamada última generación de redes, también conocida como 4G, está expandiéndose muy rápido a nivel mundial.
La subida de clientes está superando las expectativas desde su nacimiento, hace ya tres años. En 2010 se llegaron a los 600.000 usuarios de este tipo de redes, pasando la barrera de los 100 millones el año pasado.
Según un informe realizado por IHS iSuppli (mejor conocidos por contarnos cuánto cuestan los dispositivos por componentes) la proyección es la de doblar la cifra en 2013, y pasar a más de mil millones de usuarios en el año 2016.
Las estimaciones que se hacían en 2010 apuntaban a 300 millones de usuarios en 2015, y es muy posible que esa cifra se supere un año antes de lo previsto. A finales de 2013, estaremos en la barrera de los 200 millones de suscriptores a este tipo de redes.
Está claro que la tecnología LTE emerge como un estándar real en la comunicación inalámbrica a nivel mundial, gracias a una adopción rápida en el mercado de los Smartphones, por parte de fabricantes y operadoras. En el lado negativo encontramos muchas más frecuencias registradas que en la conectividad 3G.
Vía | IHS iSuppli
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