Este es el primer caso en Europa, y seguro que no el último. Tras los incidentes de las llamadas "happy slappings", o las collejas de toda la vida, grabadas por los hacedores con sus teléfonos móviles y luego distribuidas por Internet, el gobierno italiano ha decretado la prohibición del uso de móviles dentro del recinto escolar. Las sanciones llegan a la negación del derecho a examinarse. Si bien la medida es drástica, viene acompañada del consentimiento de padres y profesores. Estos últimos esperaban medidas urgentes ante la creciente delincuencia que llega a vender sus hazañas on-line, desde agresiones a alumnos a asaltos sexuales a profesoras. En la misma linea el gobierno sigue de cerca la macabra moda de los USA en la que bandas rivales de Los Angeles graban con sus móviles los asesinatos de miembros de pandillas rivales y los cuelgan en Internet para publicidad de la banda y como medida de represión.
No creo que sea problemas de los móviles si no la delincuencia juvenil, si les prohíben los móviles no dejaran de repartir collejas, simplemente no se difundirá tan alegremente por todo el mundo. Es tapar el problema no arreglarlo.
En Italia prohibido en los colegios, en algunos estados de si vas en bicicleta y en los teatros con inhabilitadores, en muchos países conduciendo coches, en Japón y Australia en las playas,... ya podemos decir que el teléfono móvil ha calado hondo en la sociedad.