El organismo regulador de las telecomunicaciones en Estados Unidos podría cambiar sus planes iniciales de permitir a los usuarios realizar llamadas en vuelo a través de sus móviles.
Se habla de dos problemas que habrían causado este cambio de opinión, por un lado, ahora parece haber dudas sobre las interferencias que las antenas colocadas en los aviones podrían originar en las de tierra, causando la caída de la red, además no se acaba de tener seguridad de que tampoco se causarían interferencias con la aviónica, la electrónica del avión.
Por otro lado, están las causas económico-sociales, las aerolíneas perderían los 10 dólares por llamada de los sistemas telefónicos actuales instalados en el respaldo de los asientos. Y por último, los estudios realizados han encontrado una oposición entre muchos pasajeros, temerosos del típico pelmazo que se podría pasar todo el vuelo colgado de su móvil en el asiento de al lado.
Vía | Gadget Lab
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