Teléfonos desechables: qué son los 'burner phones' y qué necesitas saber de los números de un solo uso

Los móviles desechables, aquellos que se compran para un momento de necesidad, dejaron de tener sentido: tras el triunfo del smartphone y la mensajería instantánea, apostar por teléfonos básicos que están pensados casi para usar y tirar se aleja de lo que necesita cada persona. Aun así, siguen teniendo su público; por más que disponer de un teléfono y número telefónico desechables requiera, por lo general, cierta documentación previa.

Nos hemos acostumbrado a que los móviles cada vez van durando más tiempo, sobre todo porque no son baratos y hay que amortizarlos. Pero hubo un tiempo en el que resultaba relativamente habitual adquirir uno desechable; junto con su número integrado, también de un solo uso. Y no es que ahora los «burner phones» o móviles desechables hayan pasado de moda, que hay hasta apps que facilitan una numeración temporal, el problema es que terminaron chocando contra la legalidad. Porque, ¿podríamos adquirir un móvil de un solo uso junto con su número de teléfono sin aportar datos personales?

Necesitas identificarte para adquirir una numeración prepago

En la actualidad, existen dos maneras de adquirir un nuevo número de móvil: o contratando una tarifa en cualquiera de los operadores o adquiriendo un número de prepago en aquellas compañías que aún los ofrecen, las que comúnmente se conocen como tarifas «de tarjeta». En todos los casos resulta imprescindible comunicar los datos personales al realizar la compra, incluido el DNI.

Lo que antes podían ser números desechables, que se entregaban con o sin un teléfono básico también de un solo uso, ha pasado a convertirse en una opción que no se encuentra disponible en todos los países. En lo que respecta a España, la obligación de que los operadores lleven el registro de los números prepago dificultó la venta de estos artículos. Según estableció el Consejo de Ministros en 2007:

El Proyecto de Ley de Conservación de Datos en comunicaciones electrónicas que aprobó el Consejo de Ministros en marzo de 2007 puso fin al anonimato en las tarjetas telefónicas de prepago. Actualmente, resulta imprescindible identificarse y dejar los datos personales al operador antes de adquirir cualquier SIM en el territorio; ya sea física como eSIM. Y esto atañe a los teléfonos desechables que se vendían con un número de prepago.

Teléfonos como el BIC Phone, que podía adquirirse con una SIM prepago en multitud de tiendas a un precio que rondaba los 19/29 euros, dejaron de tener sentido. De hecho, han desaparecido de los comercios; por más que aún pueda encontrarse algún modelo que resiste al olvido.

El lío de los números extranjeros

Adquirir una SIM de prepago en España, ya sea física como virtual, implica la identificación del comprador, pero no ocurre lo mismo con las empresas que venden eSIMs por Internet. Como ocurre con servicios como HolaFly, resulta posible disponer de un número de teléfono desechable sin más identificación que un registro en la web. Eso sí, por lo general es complicado que ofrezcan llamadas de teléfono: lo habitual es que se centren en los datos móviles.

Aplicaciones como Burner, tanto para Android como para iOS, son muy populares en países como Estados Unidos, aunque no están disponibles en España. Existen otras variantes, la mayoría con una mecánica similar: ofrecer servicio telefónico con números desechables de otros países y a través una la aplicación. No sirven como tarifa de datos, sí para hacer llamadas y enviar o recibir SMS. ¿Que necesitas activar un servicio que sólo funciona en un país? Apps como 2Number para iOS son de mucha ayuda.

Los teléfonos desechables casi han pasado a mejor vida, las SIMs de un solo uso prácticamente también. Aunque siempre habrá alternativas: en un mundo global donde resulta posible adquirir productos de cualquier país, un número de teléfono temporal está a unas pulsaciones de distancia en eBay, Wallapop o, incluso, en Amazon.

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