En más de una ocasión hemos visto como un operador ha ido empeorando las condiciones de tarifas antiguas, ya no contratables pero que algunos usuarios mantienen por distintas razones, con el fin de empujar a ese grupo de usuarios hacia nuevas tarifas. Una práctica que de nuevo está poniendo en marcha actualmente Movistar.
De esta manera el operador está comunicando mediante mensajes cortos a los usuarios de viejas tarifas el cambio de las condiciones de estas a partir del 18 de febrero. Subidas del consumo mínimo o cuotas, del establecimiento de llamada o del precio por minuto harán que muchos usuarios acaben optando por cambiar de tarifa, o directamente, cambiar de operador.
El principal afectado por la modificación de viejas tarifas es el Contrato Básico Personal, contrato que actuaba de base para muchas tarifas, lo que provoca que estas también se vean afectadas. En este caso los cambios pasan por subir el consumo mínimo desde los 7.26 euros mensuales anteriores hasta los 12 euros. Además el establecimiento de llamada pasa de 0.18 a 0.20 euros, un precio nada habitual en grandes operadores.
Pero los cambios también llegarán a tarifas que no se comercializaban oficialmente, pero se podían obtener en el departamento de retenciones. Es el caso por ejemplo de la Habla y Navega Reducida, que ofrecía un giga por 10.89 euros y llamadas 1.21 céntimos por minuto más 0.18 euros de establecimiento, que a partir del 18 de febrero sube su cuota a 12 euros, el precio por minuto a dos céntimos y el establecimiento a 0.20 euros.
¿Adiós permanencias y penalizaciones?
Cuando un operador cambia unilateralmente las condiciones del contrato que firmó el usuario siempre surge la duda ¿adiós permanencias y penalizaciones? Los operadores pueden cambiar en cualquier momento las condiciones de los contratos, siempre avisando correctamente con un mes de antelación a que se produzcan los cambios y aclarando que dichos cambios dan derecho al desestimiento del contrato por parte del usuario.
Hasta ese punto no hay ningún problema, si un usuario hubiese adquirido una permanencia por contratar una tarifa esta quedaría invalidada y el usuario podría cambiar de tarifa u operadores sin ninguna traba. Pero si el cliente adquirió un teléfono o cualquier otro dispositivo en condiciones especiales (subvencionado) esa permanencia no se anula, por lo que el usuario sigue obligado a permanecer en el operador, o a pagar la penalización si quiere abandonarlo.
Vía | Movistar
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