Telefónica acuerda el ERE definitivo con los sindicatos hasta 2026: el objetivo, ser más digital, flexible y competitiva

En un contexto empresarial marcado por la rápida transformación digital y una feroz competencia, Telefónica España finalmente ha firmado el tercer Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas con las organizaciones sindicales más representativas (UGT, CCOO y Sumados). Este acuerdo, aprobado por unanimidad con 24 votos a favor, representa un compromiso conjunto hacia la construcción de una empresa más ágil, digital y lista para los desafíos futuros.

El convenio, que estará en vigor hasta el 31 de diciembre de 2026 con la posibilidad de ser prorrogado por un año adicional, establece las bases para una Telefónica España más fuerte, centrada en la fidelización y atracción del mejor talento. Entre sus objetivos clave se encuentra la inversión en el desarrollo de habilidades diferenciadas a través del reskilling, colocando a la plantilla a la vanguardia de las nuevas formas de trabajo y conciliación.

3.421 trabajadores afectados por el ERE de Telefónica

El compromiso con la autonomía, responsabilidad y la contribución a resultados se presenta como un enfoque fundamental para el desarrollo de la compañía en el futuro. La unanimidad en la aprobación del convenio refleja la colaboración efectiva entre la empresa y los representantes de los trabajadores para alcanzar metas comunes.

Paralelamente a este acuerdo, se ha tomado la decisión de ejecutar despidos colectivos, afectando a un total de 3.421 trabajadores, de los más de 16,000 que conforman actualmente la plantilla en sus tres divisiones (Telefónica de España, Soluciones y Móviles).

La medida permitirá la adhesión de empleados que cumplan 56 años o más durante 2024, con una antigüedad superior a 15 años. Sin embargo, se han establecido otros objetivos, considerando áreas críticas y excedentes funcionales, con el propósito de alinear las decisiones de desvinculación con las necesidades del negocio.

El gasto estimado para la ejecución de este plan se sitúa en torno a los 1.300 millones de euros (antes de impuestos), sin impacto en la caja. Los ahorros anuales previstos alcanzarán aproximadamente los 285 millones de euros a partir de 2025. Importante destacar que, a pesar de estos ajustes, se espera un impacto positivo en la generación de caja desde 2024, junto con la captura de ahorros que se hará evidente ya en el primer trimestre del mismo año.

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