Ya sabemos que la tendencia en el sector de las telecomunicaciones europeo es a unir fuerzas o esa por lo menos es la intención de los grandes estamentos europeos, que cada vez que tienen ocasión mencionan la diferencia en el número de operadores y redes que existe entre EEUU, con cuatro grandes operadores, y Europa.
Y en ese sentido se ha pronunciado Alberto García Erauzkin, presidente de Euskaltel, situándose a favor de unir fuerzas, expresando su deseo de liderar algún proceso de concentración de operadores, siempre con la condición de ser la cabeza de esa posible fusión de operadores y manteniendo su sede social en Vizcaya.
Euskaltel, lider en el País Vasco en los mercados de telefonía fija, Internet y televisión y en tercera posición en telefonía móvil, vería con buenos ojos un proceso de unión de fuerzas de operadores, ya fuese mediante una concentración o fusión, en la que intentaría ser coprotagonista aspirando a mantener su sede en Vizcaya.
Posible unión de cableras
En ningún momento Erauzkin ha dado nombres ni ha dado más detalles de por donde podrían ir los acuerdos aunque todo apuntaría a la unión de cableras regionales, véase la gallega R y la asturiana Telecable, o incluso con ONO, de mayor envergadura pero sin presencia precisamente en los territorios donde las regionales operan.
No sería nada descabellado la unión entre cableras y es que cuando se realizaron las últimas subastas de espectro, se rumoreo que los operadores de cable podrían acudir de manera conjunta, aunque finalmente esto no se produjo, optando cada cablera regional por hacerse con espectro en sus regiones y ONO en varias comunidades.
También hay que tener en cuenta que los principales accionistas de las cableras podrían ver con buenos ojos su unión, estando la mayoría de ellas en manos de fondos de inversión. Tanto la mayoría de los accionistas de ONO, Telecable y R son fondos de inversión, en muchos casos tras la salida de bancos españoles, mientras que en el caso de Euskaltel un 49.9% está en manos de Kutxabank, unión de las cajas vascas, mientras que dos fondos de inversión tienen un 48.1% e Iberdrola otro 2%.
Vía | El País
